El PRC pide soluciones para que el Cabildo deje de ser ‘de la posguerra’
El PRC de Santander ha reclamado este jueves soluciones para que el Cabildo deje de ser «una zona cero» y «un barrio de la posguerra» para pasar a ser un «ecobarrio» con alquileres para jóvenes gracias a los fondos europeos para la rehabilitación y la colaboración público-privada.
En rueda de prensa, el portavoz del grupo municipal regionalista de Santander, José María Fuentes-Pila, ha mostrado la preocupación de su partido por la aprobación de un proyecto de urbanización del Cierro del Alisal, que prevé 1.135 viviendas, y ha afeado al PP su «política de destrucción de la identidad de la ciudad».
«La broma son 170.000 metros cuadrados», ha lamentado Fuentes-Pila con «perplejidad» porque se «proyecta un desarrollo expansionista alejado de las necesidades del ciudadano y del modelo de participación ciudadana» con el que «se le ha llenado» al equipo de gobierno (PP-Ciudadanos).
A su juicio, con este proyecto se «termina de aniquilar el comercio local condenándole a una situación desesperanzadora».
El portavoz del PRC cree que «las prioridades de la ciudad pasan por solventar el estado de ruina de muchos barrios», como El Pilón, «un escenario de guerra» en el que «conviven solares vacíos, inmuebles abandonados y la falta de inversiones».
También fija como objetivo la recuperación del Cabildo, «zona cero, de la vergüenza y de la gestión urbanística del PP».
En este sentido, cree que se pueden aprovechar los fondos europeos para la rehabilitación del barrio y que hay que ofrecer apoyo al propietario de dos parcelas de titularidad privada para fomentar la construcción de viviendas para el alquiler joven.
«No puede esperar», ha afirmado Fuentes-Pila, quien apuesta por «no seguir expulsando jóvenes a la periferia».
Por todo ello, ha pedido que se vuelva a convocar una comisión «para rescatar lo que se pueda y establecer una hoja de ruta para el Cabildo», lo que implicaría una modificación puntual del Plan General, según ha avanzado.
EL DRENAJE DE LA CIUDAD
Respecto al aguante de la ciudad ante los últimos episodios de lluvia intensa, Fuentes-Pila ha valorado que el sistema de drenaje «no es óptimo, pero no es catastrófico». «Había movilidad, se podía circular», ha señalado a preguntas los periodistas.