Investigados los gerentes de una cooperativa de mariscadores por una trama de pesca furtiva de angulas
La Guardia Civil ha instruido diligencias en calidad de investigados a dos hombres, mariscadores profesionales y gerentes de una cooperativa de mariscadores, como presuntos autores de un delito de tráfico de especies amenazadas, así como a otros dos, vendedores de las angulas y que podrían haberlas pescado de manera furtiva.
El Seprona de la Guardia Civil de Cantabria comenzó una investigación en diciembre del pasado año al averiguar que algún mariscador profesional estaría comprando angulas a furtivos, para posteriormente introducirlas en los canales de venta legales como capturadas por profesionales.
Las pesquisas realizadas llevaron hasta un hombre con un amplio historial de pesca y marisqueo furtivo, que mantuvo contactos en Muriedas y Santander con, al menos, un mariscador profesional.
Una vez constadas las entregas a este mariscador, este mes de febrero los agentes del Seporna intervinieron, al percatarse de que en un garaje de Muriedas estaban realizando una transacción de lo que podían ser angulas.
En ese momento se sorprendió a dos hombres que realizaban la venta de angulas, no descartándose que hubieran sido pescadas de manera furtiva, y a los dos compradores, que resultaron ser gerentes de una cooperativa de mariscadores.
Los agentes procedieron a la incautación de las angulas y a la instrucción de diligencias en calidad de investigados a los cuatro hombres como presuntos autores de un delito contra la flora, fauna y animales domésticos, por tráfico de especies amenazadas.