El beneficio de AB InBev baja un 84% hasta marzo, tras el impacto de su salida de Rusia

El grupo cervecero belga Anheuser-Busch InBev (AB InBev) registró un beneficio neto atribuido de 95 millones de dólares (90 millones de euros) en el primer trimestre de 2022, lo que equivale a un descenso del 84% en comparación con las ganancias que contabilizó durante el mismo periodo del año anterior, incluyendo el impacto adverso de la venta de su participación minoritaria en AB InBev Efes, la sociedad conjunta rusa con Anadolu Efes.

El pasado 22 de abril, AB InBev informó de que asumiría un impacto adverso de 1.100 millones de dólares en sus cuentas del primer trimestre por la venta de su participación minoritaria en AB InBev Efes, la sociedad conjunta rusa que mantiene con la turca Anadolu Efes, incluyendo la suspensión de la licencia para la producción y venta de Bud en Rusia.

Sin tener en cuenta atípicos, el beneficio neto normalizado subyacente del propietario de marcas como Budweiser , Stella Artois y Corona aumentó un 9,5%, hasta 1.204 millones de dólares (1.141 millones de euros).

Entre enero y marzo, la facturación de la firma fue de 13.235 millones de dólares (12.546 millones de euros), un 7,7% más. En cifras orgánicas, que excluyen el impacto del tipo de cambio y de las variaciones en el perímetro contable de la firma, el incremento interanual fue del 11,1%.

En los tres primeros meses del año, AB InBev elevó el volumen de cerveza comercializado un 2,8%, hasta los 139,34 millones de hectolitros, con un incremento del 7,8% de los ingresos por hectolitro, gracias al aumento de los precios y el impulso del negocio de cervezas premium.

«La ejecución incansable de nuestra estrategia y la transformación digital acelerada impulsaron un impulso continuo en el primer trimestre, generando un aumento del 11,1% en los ingresos brutos a través de una combinación de crecimiento del volumen y los ingresos por hectolitro», declaró Michel Doukeris, consejero delegado de AB InBev.

De cara al conjunto del ejercicio, la cervecera espera que su resultado bruto de explotación (Ebitda) crezca en línea con la perspectiva a medio plazo de entre el 4% y el 8% y que nuestros ingresos crezcan por encima del Ebitda gracias a una combinación saludable de volumen y precio.

«La perspectiva para el año fiscal 22 refleja nuestra evaluación actual de la escala y magnitud de la pandemia de Covid-19, que está sujeta a cambios a medida que continuamos monitoreando los desarrollos en curso», advirtió la empresa.