Santander moviliza 103 millones en obras municipales
La pandemia no le ha impedido al Ayuntamiento de Santander potenciar las obras municipales. Al contrario, en lo que va de legislatura, ha finalizado 70 proyectos en los que ha empleado casi 66 millones de euros y tiene otros 25 en ejecución, con un presupuesto de 41,7 millones de euros.
Muchos de ellos van dirigidos a la mejora de barrios o zonas urbanas, como la Calle del Sol, el barrio Polio y su entorno, San Francisco y San Luis, la calle Magallanes o Isabel II, sin olvidar los trabajos de reordenación en la plaza de Italia y los jardines de San Roque.
También ha rehabilitado edificios históricos, como Tabacalera y el Palacio de la Magdalena. El primero llevaba más de dos décadas sin uso cuando el Ayuntamiento logró que Patrimonio del Estado le cediese una parte para transformarla en un centro cívico que acoge espectáculos, talleres y todo tipo de programas socioculturales, y cuenta con el jardín vertical más grande de Europa.
El Palacio de la Magdalena, que ya fue remodelado entre 1994 y 1995, se ha sometido a un nuevo lavado de cara, una iniciativa que ha supuesto un desembolso de casi tres millones de euros y que ha incluido la reforma de la Casa de los Guardeses para convertirla en una oficina turística.
Obras más destacadas
Entre las obras más importantes, destacan la nueva sede del TUS, la ampliación de la piscina municipal del complejo del IMD, la urbanización del perímetro de los Campos de Sport y la rehabilitación de los centros cívicos Meteorológico, Callealtero y Eulalio Ferrer.
Para favorecer la movilidad, Santander ha realizado mejoras entre la calle San Martín y el Alto de Miranda por la subida del Gurugú, en las calles Valencia y Enrique Gran y ha instalado las escaleras mecánicas y rampas de la Avenida del Faro y Valdenoja, así como la conexión mecánica entre Jesús de Monasterio y el parque Juan José Ruano.
Una de las actuaciones más ambiciosas es la construcción de 120 viviendas de protección oficial en San Román, en las que el Ayuntamiento ha invertido 15,47 millones de euros. En ejecución están el centro cívico de Cueto (3,5 millones), la rehabilitación del antiguo túnel de Tetuán (3,85 millones), el derribo de los tinglados de la calle Antonio López (1,5 millones) y las 66 viviendas de protección oficial que se construyen en la parcela de Tabacalera, con un presupuesto de 8,58 millones de euros.
Asimismo, está previsto actualizar los Jardines de Piquío, por un millón de euros, y se acometerán itinerarios verticales en el Paseo de Canalejas, por 2,4 millones. Pendiente queda la regeneración urbana del barrio de Entrehuertas, la mejora de los accesos al Faro de Cabo Mayor y la Península de La Magdalena, entre otros.
El Consistorio también recuerda que en esta legislatura ha desembolsado 30 millones en programas sociales y subraya que los santanderinos pueden ahorrarse 30 millones gracias a la bajada de impuestos.
Millones por aquí, millones por allá… Propaganda pura y dura. Lo cierto es que para los santanderinos de a pie, la ciudad está cada vez más sucia, desordenada, bacheada, sin pintar y sin vigilancia policial.
La alcaldesa, en vez de ir a hacerse fotos en la calle de turno recién arreglada, debería de ir a darse una vuelta a pie por el resto de la ciudad, que también es Santander, donde las calles no reciben una escoba en años, ni se limpian las aceras invadidas de maleza, donde las calles no están pintadas desde hace años -¿será que los automovilistas no pagan sus impuestos?-, donde los coches y autobuses del TUS se enfangan en atascos debido a coches mal aparcados – ¿hay policía de movilidad en Santander o estoy equivocado?-.
En fin, señora alcaldesa, menos propaganda y más pisar la calle, que el mantenimiento diario de la ciudad, no debe de estar reñido con las millonarias obras que comentan en la noticia.