¿Conoces el impacto medioambiental del uso del dinero online?
La crisis climática se agudiza y la expansión del mercado cripto preocupa a los ecologistas. ¿Qué modalidad de pago electrónico es la más elegida?
En los tiempos que corren, el avance en materia de finanzas digitales representa una de las secciones de noticias más relevantes de los medios. Estar informados sobre lo que sucede en el universo cripto es casi inevitable. Las transacciones con divisas digitales son cada vez más frecuentes y los complejos sistemas que operan para su funcionamiento se perfeccionan a paso acelerado.
El boom de las criptomonedas condujo a cierta fascinación por este minucioso sistema de transacciones que queda registrado gracias a la tecnología de blockchain: cadena de bloques. Bitcoin es una moneda descentralizada; no se rige por autoridades, como entes bancarios o gobiernos, y tampoco interfieren terceros para su emisión o liquidación. Los consumidores pueden hacer compras sin complicaciones o hacer envíos de dinero abaratando la transacción al menor costo posible.
La revolución de las divisas digitales trajo nuevos paradigmas financieros y, con ellos, mucha polémica respecto al consumo energético del rubro. Según El Centro de Energía Alternativa de la Universidad de Cambridge, bitcoin consume más energía en un año que Argentina u Holanda. El crecimiento del universo cripto no puede dejar de responder a su responsabilidad ecológica y esto preocupa a las compañías.
¿Es el dinero real una mejor alternativa para el cuidado del medioambiente?
Ante la evolución de las divisas digitales y la controversia en materia de su impacto en el medio ambiente, muchas personas eligen utilizar el dinero físico. Los mercados que manejan constantes depósitos y transacciones de dinero suelen operar con ambas opciones. La industria del juego es una de ellas; existen múltiples formas de pago en casinos con dinero real, como también la opción de pagos con criptomonedas.
El creciente uso de las divisas digitales para la vida cotidiana plantea el debate ético sobre su explotación y abre la pregunta sobre qué modalidad financiera es menos dañina. Se tiende a creer, entonces, que el uso del papel es menos dañino que el uso de monedas digitales. Sin embargo, existen otros formatos de pago que son cada vez más populares y no generan un impacto tan grande en el ecosistema.
Hoy en día, la mayoría de los países han adoptado tecnologías que permiten realizar pagos electrónicos. Las personas prefieren no cargar con dinero en efectivo dado que es más seguro y más cómodo. Los pagos con billeteras electrónicas son una de las modalidades favoritas que se han visto impulsadas por la pandemia. Entre las más conocidas y de mejor reputación se pueden encontrar: Payoneer, Skrill y Paypal.
Plástico: una alternativa ecológica al papel billete
Hablar de plástico como una alternativa al papel para reducir la huella de carbono suena dudoso. El plástico es y ha sido siempre el enemigo cuando se refiere al impacto medioambiental. La crisis climática en la que se encuentra el planeta que habitamos nos empuja a tomar responsabilidad sobre nuestro consumo, y el plástico es uno de los recursos que debemos evitar.
Sin embargo, en lo que refiere a la emisión de billetes físicos, los estudios indican que el plástico es más sustentable que el dinero en papel. Actualmente son más de 30 países los que utilizan billetes de polímero. Este es un plástico que, según el Banco de Inglaterra (Boe), es menos dañino que el papel que se desgasta más rápido. Un estudio llevado a cabo por la entidad bancaria reveló que plástico dura 2,5 veces más que los billetes de papel.
La vida útil más larga del billete implica menos residuos y, además, según el estudio, los billetes de polímero pueden reciclarse y devenir en nuevos artículos de plástico. A pesar de ser una opción que pareciera ser más amigable con el ecosistema que la impresión del papel, el polímero tiene su contracara. Agrupaciones veganas han salido a expresar su descontento luego de descubrir que los billetes de polímero utilizaran grasa animal como una de sus principales materias primas.
Las quejas fueron dirigidas al Banco de Inglaterra al que se le solicitó la revisión de la impresión de billetes y la demanda de un nuevo proceso de producción. El Banco de Inglaterra decidió no modificar dicho proceso alegando que la alternativa implicaría el uso de aceite de palma; un producto mucho mas costoso que, además, originaría mayores controversias en materia de sustentabilidad ambiental.
La desmedida emisión de huella de carbono indica que, tanto a nivel colectivo como individual, debemos ser conscientes de nuestro consumo. Muchas empresas han ejercido acciones responsables y se encuentran lanzando aplicaciones que promueven hábitos sustentables. Ante la gravedad de la crisis climática que nos atraviesa es inminente que las empresas tengan en consideración el uso de tecnologías que no amedrenten contra el medioambiente.