Luis Alberto Salcines ya es Hijo Adoptivo de San Vicente de la Barquera
El Salón de Plenos de San Vicente de la Barquera ha acogido este sábado el acto de nombramiento del escritor, gestor cultural y crítico Luis Alberto Salcines como Hijo Adoptivo de la villa marinera.
La cita ha contado con la asistencia de todos los concejales de la Corporación Municipal, además de multitud de vecinos barquereños e incluso personas llegadas de fuera de Cantabria.
La concejala de Cultura, Pilar Gutiérrez, ha sido la encargada de leer el acta con el que la Corporación Municipal aprobó por unanimidad este reconocimiento a Salcines, añadiendo recuerdos personales como alumna cuando él fue director del Instituto de San Vicente de la Barquera.
«Para mí este reconocimiento no es solo por su labor cultural, es porque muchos hemos sido sus alumnos, era un profesor exigente pero a la vez divertido, amable y cariñoso», ha dicho.
Por su parte, el alcalde, Dionisio Luguera, ha agradecido la presencia de todas los asistentes a este acto y ha recordado que «es un acto aprobado por unanimidad de toda la corporación, y con el apoyo de asociaciones y vecinos de San Vicente de la Barquera».
«Si hay alguien que ha colaborado con todo en San Vicente, ese ha sido Salcines, y este acto de su nombramiento como pejín y barquereño es algo fabuloso, hoy alguien con el amor que tiene a San Vicente es homenajeado como persona que lleva a San Vicente de la Barquera desde que vino», ha destacado el regidor.
Y en su discurso al recoger el título, Salcines ha expresado su emoción por este reconocimiento que le acredita como Hijo Adoptivo de San Vicente de la Barquera y ha recordado su llegada al municipio para trabajar en el recién abierto centro educativo, donde dio clase a una amplia representación de la actual Corporación y a muchos vecinos.
«Viví en barrios emblemáticos de San Vicente porque siempre me ha
gustado vivir donde trabajo para implicarme en la vida de la localidad». «Me empañé de la vida de San Vicente, compraba los periódicos en los quioscos, la cesta de la compra y comía el menú del día y tomaba café y un vino», ha relatado.
Además, ha destacado que ha desarrollado una vida cultural más allá de la vida académica, ya que no concibe «la separación de la educación y la cultura porque son un espacio de encuentro».
En el acto también se ha entregado un ramo de flores a la esposa de Salcines y se ha descubierto una placa conmemorativa en La Casona del Cantón.