La ciencia al día

ZAPATOS POR COMPUTADORA.- Hacer zapatos es una de las industrias artesanas más antiguas que se conocen y ahora gracias al proyecto Footwear, en el que participa la empresa española Inescop, el sector se está revolucionando debido a la introducción del diseño por ordenador en una de las fases más críticas de la producción, como es la confección de las hormas. Una rémora tradicional en el sector zapatero es el tiempo que se tarda en introducir un nuevo modelo en el mercado. Los zapatos, recordemos, se hacen sobre un molde especial u horma y aunque algunos fabricantes hacen sus propias hormas, la mayoría han de recurrir a pequeñas empresas especializadas para que se las hagan. El nuevo sistema con ayuda de ordenador se llama Forma 3D y prescinde del molde de madera. Lo que hace es una versión digital o una nueva forma a partir de una base de datos. Una vez terminada, el propio ordenador se encarga de transmitir los datos a un torno que confecciona las hormas en plástico. Con este sistema se estima que se puede recortar el tiempo de entrega de un nuevo modelo en un 60%.

ENERGIA HIDRAULICA EN PEQUEÑA ESCALA.– Durante varios años el río Fulda en Alemania ha sido controlado para mantener una diferencia de 2 metros en los niveles de agua a lo largo de nueve meses al año, pero esa posibilidad se había perdido para obtener energía eléctrica, toda vez que la elevación resultaba inapropiada para las turbinas convencionales de una central hidroeléctrica. Sin embargo, la empresa finlandesa Waterpumps WP Oy ha conseguido desarrollar unos generadores compactos sumergibles que desde el fondo del río son capaces de hacer un seguimiento del nivel aguas arriba y seleccionar la mejor combinación de turbinas para maximizar los resultados. Hasta ahora se han instalado dos minicentrales con 15 generadores y una capacidad de un megavatio.

CHORROS DE ARENA MAS SEGUROS.– Los chorros de arena a presión se usan ampliamente en la industria para la preparación de superficies de cristal, metal y madera, para la limpieza de edificios urbanos y hasta para limpiar piscinas. La técnica es eficiente pero peligrosa y los trabajadores necesitan buena ropa protectora, de manera que los monos de algodón o poliéster no resultan lo suficiente robustos para resistir un chorro accidental, que puede producir heridas graves. La empresa noruega Mellandsjo Skinnsom, que fabrica ropa de trabajo para ambientes hostiles a partir de piel de reno, ha buscado adaptar sus monos de piel que aunque son adecuados, resultan pesados, poco confortables y demasiado voluminosos. La solución ha consistido en combinar la piel por un material apropiado más ligero como la fibra sintética llamada Kevlar cubierta con un polímero elastomérico. Así se le da una nueva utilidad a una fibra de gran resistencia que se suele usar también para la fabricación de raquetas de tenis o chalecos antibalas.

LA HERENCIA CINEMATOGRAFICA DEL SIGLO XX.– Los nuevos avances en el campo de la digitalización están revolucionando la conservación de viejas películas cinematográficas, de forma especial en lo que se refiere a su restauración, creación de métodos de acceso y recuperación. En ese sentido, el proyecto Echo que se ha llevado a cabo durante dos años en varios países europeos, aspira a suministrar un servicio de filmoteca digital para películas que están en los grandes archivos nacionales. Las instituciones participantes de Francia, Holanda, Italia y Suiza poseen una colección única de material documental que abarca desde los años veinte del pasado siglo en adelante, lo que constituye una herencia social, cultural, política y económica de la vida europea que debe preservarse. La digitalización de las imágenes permite no sólo mejorar los contrastes y recuperar grises que el tiempo ha diluido, sino también borrar rayones y reconstruir fotogramas desaparecidos, con la ventaja de que todo el tratamiento se puede realizar sobre la copia de ordenador y no sobre la cinta que se conserva.

LOS CINCO CERDITOS.– No es que nos hayamos confundido en el título del cuento infantil sino cinco han sido los cerditos producidos, valga la expresión, por la empresa PPL una rama comercial del famoso Instituto Roslin, y en los que se ha introducido el gen humano que induce a nuestro sistema inmunológico a rechazar los órganos de cerdo cuando se lleva a cabo un xenotrasplante (o sea el trasplante de órganos de animales a humanos). Este experimento tiene el loable propósito de contribuir a la lucha de enfermedades como la diabetes, el Parkinson o el Alzheimer. Por si a alguien le interesa, el gen transferido se llama alpha 13 galactosyl transferasa y los cerditos con este gen añadido, que nacieron el día de Navidad, se llaman Noel, Angel, Star, Joy y Mary.

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