La Caja vende a sus socios la participación del 45% en Candemat
Caja Cantabria ha vendido a sus dos socios en Candemat –Víctor Picó y José Francisco Pardo– la participación que tenía en la empresa de Maliaño dedicada a la fabricación de troqueles para piezas de carrocería de automóvil. La Caja entró en Candemat hace tres años, de la mano de Sodercan con vistas a diversificar su negocio (hasta ese momento sólo tenía una empresa industrial, Steel Betton) y para apoyar una estrategia de despegue de Candemat auspiciada desde la Consejería de Economía del Gobierno regional.
A través de una ampliación de capital de 350 millones a la que no acudieron los socios, la Caja y Sodercan se hicieron con el 50% de las acciones de la compañía. La Caja aportó 315 millones, que le otorgaba el 45% del capital final, y Sodercan los 35 restantes, que le permiten controlar el 5%. Caja Cantabria ha vendido ahora su participación a los dos socios tradicionales de la compañía en 410 millones de pesetas, con una plusvalía superior al 30%.
Candemat facturó el pasado año 23 millones de euros (unos 3.800 millones de pesetas) y cuenta con más de 300 empleados.
La situación de la empresa de matricería se ha fortalecido mucho en los últimos años, gracias a sus resultados positivos (en el 2000 superó los 300 millones de beneficio neto), y en este momento sus fondos propios son un 88% superiores a los que tenía en 1999, por lo que la presencia de la Caja, que entonces aportó el músculo financiero que necesitaba Candemat tras absorber las pérdidas anteriores, ha dejado de resultar estratégica.