Ordenadores inviolables
Academias y cibercafés se suelen encontrar todos los días con el mismo problema de desconfiguración de ordenadores como consecuencia de su utilización por usuarios inexpertos. En las empresas tampoco es inhabitual que se produzcan pérdidas de información, instalaciones erróneas, contagios por virus o simplemente, asaltos a los archivos desde el exterior. A cada una de estas contingencias se le han buscado soluciones específicas a través del software, pero ahora ha comenzado a comercializarse una tarjeta que se instala en el hardware y aísla el disco duro de tal forma que basta con volver a encender el ordenador para que todo vuelva a su estado anterior.
La tarjeta protectora, denominada Angel Custodius ha sido desarrollada por un pool de empresas de varios países, con un papel muy significativo de la madrileña Arbor, que ha delegado en la cántabra KM–L&A su distribución en el norte del país y en Francia. Varias compañías de la región, entre ellas la fábrica de autobuses EvoBus han comenzado a utilizarla, después de someterla a un periodo de pruebas para comprobar su utilidad. Los fabricantes ya retaron en el último SIMO a cuantos se acercaban a su stand a desconfigurar un ordenador protegido con la Custodius, con el aliciente de regalarles un BMW si lo conseguían, un reto que siguen manteniendo, a la vista de que, al menos hasta el momento, nadie ha podido conseguirlo.
La tarjeta cuesta 94 euros, se instala en cinco minutos en uno de los slots libres del ordenador y tiene un efecto inmediato frente a desconfiguraciones accidentales o provocadas, ataques de virus, piratas informáticos, instalación de software no deseado, etc. Lo más llamativo es que permite apagar el equipo en caliente (sin cerrar el sistema operativo) con toda naturalidad.