Andreu R. Casas publica, una novela policíaca, ‘Sentimientos que ciegan’
Andreu R. Casas reconoce que la poesía no es su fuerte, sin embargo, confiesa: “al escribir, hay cierto tono artístico al relatar las escenas, inundándola de detalles que, a mi modo de ver, permiten al lector sumergirse en la escena, sentirla muy de cerca. Para mí es lo que, cuando leo, me asegura abstraerme del entorno, evadirme. Es lo que puedo ofrecer a aquellos que quieran leer Sentimientos que ciegan”,
Publicada en Círculo Rojo, Grupo Editorial, el lector va a encontrar, según las palabras del autor, “una novela en la que la trama de los protagonistas y su entorno transcurre con un fondo de eventos reales contemporáneos, en cierto modo, lo que ocurre podría haber ocurrido en la realidad, aunque nadie lo confirmará, naturalmente. El debate sobre la aparente actividad de los gobiernos y organizaciones internacionales contra el tráfico de armas, también está servido en varios puntos de la novela e interfiere la vida sentimental entre Mikel y Serena”.
Sinopsis
Las vidas de una agente de importación y exportación y su pareja policía se entrecruzan emocional y profesionalmente cuando se ven envueltos en una compleja trama de tráfico de armas vinculada con tensiones geopolíticas en Oriente.
Autor
Nacido en Barcelona en 1958, Andreu R. Casas pasó su infancia y juventud en la ciudad, obteniendo el título de licenciado en Químicas, con el que empezó su vida profesional. Después de un breve periodo de trabajo en la Ciudad Condal, el destino le llevó por razones profesionales a Orihuela en 1983 y a Murcia en 1985, donde ha transcurrido su vida, dedicada a formar una pequeña familia (Anabel, Ana y Julia) y a las actividades como director de operaciones en una conocida empresa alimentaria. Durante su etapa activa, su gusto por la lectura, la escritura y la fotografía se ha visto relegado a un último plano y es ahora, una vez jubilado, cuando Andreu encuentra el gobierno de su tiempo para dosificar la inspiración, la creación y la escritura. También es ahora cuando sabe apreciar las duras clases de literatura del Sr. Garrido («El apache») en bachillerato y COU. Un ejercicio intenso de práctica del lenguaje que de siempre le ha reportado una fluidez verbal que ahora intenta aplicar en esta nueva faceta de la vida.