Hampa Studio y Mironins; cómo la animación infantil puede divertir y enseñar al mismo tiempo
En la búsqueda de un contenido capaz de entretener y educar al mismo tiempo, la animación infantil surge como la opción perfecta. La serie española Mironins, coproducida por Hampa Studio, es un ejemplo reciente de cómo las historias animadas pueden ser una herramienta educativa sin perder su esencia como entretenimiento.
¿Es posible aprender y divertirse al mismo tiempo? Parece una pregunta sencilla, pero en realidad no lo es. En los últimos tiempos vienen surgiendo multitud de debates en torno a esta cuestión: libros, talleres, charlas… Todos se preguntan qué hay de cierto en ese viejo dogma que asegura que el aprendizaje debe ser una tarea seria y la diversión pertenece exclusivamente al reino del entretenimiento. En esa búsqueda de respuestas, un medio emerge como un puente mágico capaz de conectar dos mundos aparentemente opuestos: la animación infantil.
Hoy existen series animadas, principalmente dirigidas al público preescolar e infantil, que consiguen crear un contenido especial que mezcla entretenimiento y aprendizaje. No hace falta viajar fuera de España para encontrar ejemplos. Uno de ellos es la serie Mironins, estrenada en 2021 y coproducida por la empresa de animación valenciana Hampa Studio, ganadora del Goya por la película Buñuel en el laberinto de las tortugas. Para Mironins, el estudio que dirige Álex Cervantes quiso ayudar a crear un proyecto donde la animación no solo entretiene, sino que se convierte en el cómplice perfecto para el aprendizaje. Y es que, desde luego, el argumento de la serie se presta perfectamente a ello.
Mironins narra las peripecias de tres gotitas de pintura: Ro, Blu y Low, quienes cada noche cobran vida y se escapan de uno de los cuadros del artista Joan Miró. Los tres protagonistas, ansiosos por la aventura, se dedicarán a partir de ahí a pulular por el museo y a colarse en distintas obras del pintor catalán, explorando así todo su imaginario artístico mientras se divierten jugando. Esto último es precisamente lo que pretende la serie con sus jóvenes espectadores, invitándoles a vivir un viaje en el que la imaginación y el arte se convierten en poderosas herramientas para enseñar y guiar a los niños. Pero la exploración no acaba aquí, pues el proyecto esconde muchas más ideas.
Para potenciar el aprendizaje, Hampa Studio y el resto de coproductores decidieron expandir el concepto de Mironins al transmedia para conectar e involucrar a los niños y sus familias de una manera más innovadora. Entre las ideas que recoge el proyecto destaca una plataforma de realidad aumentada e interactiva que crea un nuevo entorno digital dentro de la Fundación Joan Miró, donde los propios Mironins motivan a los niños a descubrir el mundo del arte mientras juegan. En la misma línea está la iniciativa ArtLab, una serie de talleres organizados con museos, escuelas y librerías, con actividades para que los más pequeños desarrollen sus habilidades artísticas.
Hasta ahora, la serie, disponible en la web de Clan en RTVE, ha incorporado también la idea de un juego interactivo titulado Los desafíos del arte, o incluso la novela infantil Mironins, un libro para jugar y aprender con Joan Miró, traducido a cinco idiomas y con más de 10.000 ejemplares vendidos hasta la fecha. Con todo, Hampa Studio y la serie Mironins destacan como uno de los grandes exponentes de cómo la animación infantil española puede producir contenido de valor sin disminuir los niveles de diversión y risas.