El Parlamento cántabro reprueba al consejero de Salud
PRC y PSOE sacan adelante la reprobación –sin consecuencias jurídicas– con la abstención de Vox
Los grupos regionalista y socialista han unido sus votos para sacar adelante la reprobación del Parlamento cántabro al consejero de Salud, César Pascual (PP), por sus «continuas salidas de tono en declaraciones públicas». La aprobación de esa iniciativa ha sido posible también gracias a la abstención de Vox, con la que los ‘populares’ se han quedado solos votando en contra en minoría.
Así, el rechazo de los 15 diputados del PP no ha impedido que la Cámara haya aprobado en el Pleno de este lunes esta moción impulsada por el PSOE, que junto al PRC suma 16 escaños. Una propuesta que, además de reprobar al consejero, insta al Gobierno regional de los populares a garantizar la prestación sanitaria en todos los consultorios de Cantabria y que éstos no permanezcan cerrados por falta de médico más de 15 días.
Igualmente, pide incentivar tanto económicamente como mediante otros mecanismos acordados a través de la negociación colectiva la atención en consultorios rurales.
Y es que el PSOE ha llevado al Pleno esta moción a raíz de las declaraciones en las que Pascual afirmó que el modelo de gestión actual de los consultorios «no tiene ningún futuro» y que ningún médico se quiere «aislar» en los pueblos -aunque también ha afirmado en varias ocasiones que no tiene «ninguna intención» de cerrarlos-.
Además de estas afirmaciones, el defensor de la moción, el diputado socialista Raúl Pesquera, que también fue consejero de Sanidad la pasada legislatura en la que gobernaba el bipartito PRC-PSOE, ha sacado a colación otras «perlas» de Pascual como la comparación que hizo de la sanidad con viajar en business para explicar que «solo hay dos formas de gestionar las listas de espera: O te pones a la cola o copago»; o cuando señaló que la «cultura funcionarial» de la Administración es «un lastre» para la gestión y abogó en su lugar por pasar al Derecho mercantil para contratar a los profesionales sanitarios.
«Lo que nos preocupa es que el señor Pascual está verbalizando lo que piensa. Es un consejero que va por libre, con unos planteamientos que apuntan de forma preocupante a lo que apuntan, que ya conocemos tras su etapa de gerente en Valdecilla, y así lo deja ver en cada foro al que le invitan a participar. No nos gustan sus declaraciones ya reiteradas ni el modelo que esbozan», ha explicado Pesquera.
Además, ha criticado a los populares que «vinieron [al Gobierno] prometiendo el oro y el moro» pero «con su llegada la situación de la sanidad en Cantabria no ha mejorado, ha empeorado sustancialmente». En concreto, ha apuntado que el anterior Ejecutivo dejó las listas de espera «en 16.000 pacientes, en diciembre había 18.500 y ahora hay 18.700».
Algo con lo que coinciden los regionalistas, que han lamentado que el consejero «demuestra su ideología que cada vez se pronuncia» aunque creen que la presidenta, María José Sáenz de Buruaga, «piensa todo lo contrario».
«Creo que su presidenta defiende un modelo sanitario y usted defiende otro», ha dicho la diputada Paula Fernández, que ha señalado que Pascual «directamente ha tirado la toalla con la atención sanitaria» porque dice que «no hay médicos, no los va a haber» y que «el horizonte está muy negro».
Algo que entiende que supone en la práctica «cerrar los consultorios rurales este verano». De hecho, ha enumerado varios consultorios que han estado «más de seis meses» sin médico. «Ha demosteado con hechos y con palabras que no cree en este modelo de asistencia en los pueblos», ha reprochado Fernández a Pesquera.
Mientras, desde Vox han opinado que Pascual «lo tiene muy mal» por la «herencia recibida» en lo sanitario del Gobierno PRC-PSOE, pero entiende que «es lo que toca» y que «tampoco puede sacar pecho de su gestión».
Por ello el grupo se ha abstenido, pues está «totalmente de acuerdo» con que se le exijan soluciones y que se mantengan abiertos los consultorios, pero no con que lo hagan «los mismos que antes controlaban la sanidad» y encima «con premura».
En este sentido, la diputada Natividad Pérez ha considerado que «no ha transcurrido suficiente tiempo para dar un veredicto» sobre la labor de Pascual, a lo que ha añadido que los socialistas «tuvieron la responsabilidad de blindar los consultorios rurales y hacerlos crecer, cosa que es obvio que no hicieron».
En la misma línea se ha pronunciado el PP, señalando que «debería darles vergüenza» reprobar al consejero tras su «nefasta gestión de ocho años». «No tienen autoridad moral para reprobar a nadie, y mucho menos al señor Pascual», ha dicho María Jesús Susinos, lamentando que la oposición ha puesto el foco en el titular de Salud «desde el minuto uno», pretendiendo «lapidar» a quien está tomando decisiones para «revertir sus políticas nefastas».
También ha acusado a los grupos «manipular» los datos de las listas de espera y «tergiversar» las palabras de Pascual, así como de «falta total de lealtad» por utilizar la salud de los cántabros «como arma arrojadiza» contra el Gobierno.
Mientras, ha defendido que éste, en lo que lleva en el poder, ha aprobado un plan integral de listas de espera y retomado la actividad quirúrgica de tarde, con lo que en tres meses «se ha reducido en 700» el número de personas que esperan una prueba diagnóstica y en 1.171 los que esperan para una primera consulta.
LIMPIEZA DE VALDECILLA
Otro de los asuntos en materia sanitaria que ha venido abordándose en varios plenos es la limpieza del Hospital Valdecilla, en torno a la que este lunes se ha aprobado por unanimidad una moción del PRC para solicitar que se cumplan de manera íntegra las condiciones del contrato del servicio, exigiendo a la empresa que aumente la plantilla con el personal suficiente para poder desarrollar todas sus obligaciones.
Además, contempla que se desarrollen las obras necesarias en la nueva planta de residuos ubicada en el Pabellón 12 del hospital, pues se ha puesto en marcha el 1 de abril sin contar con toda la maquinaria necesaria, tal y como ha denunciado la portavoz regionalista.
Y en un tercer punto, la moción llama a comparecer en el Parlamento a un responsable del seguimiento del contrato de limpieza en un plazo de seis meses. Esta premisa ha salido adelante con una enmienda del PP, ya que los regionalistas pedían que compareciera el responsable del contrato por parte del Servicio Cántabro de Salud y los populares lo han modificado para que sea un representante de la Consejería de Salud.
La regionalista Paula Fernández ha defendido que esta propuesta busca «poner en orden» este servicio «abandonado, sin control y seguimiento» por parte de Salud, señalando que «es evidente que a día de hoy no se cumplen los estándares de calidad en la limpieza y desinfección» debido a que el personal está «sobrecargado» y ha aumentado la superficie a limpiar.
Sin embargo, el PP ha negado que haya un problema de limpieza, como ha venido haciendo el consejero, y ha pedido «no trasladar un mensaje que no es cierto y que puede crear una alarma social».
«Valdecilla está limpia», ha sostenido Susinos, detallando que al mes se producen cerca de un millón de actuaciones en limpieza y gestión de residuos en el hospital, y entre ellas solo se contabilizan «del orden de 25 a 30 incidencias».
Además, ha reiterado que la ampliación de las nuevas áreas en el hospital y la actividad extraordinaria que se está realizando por las tardes ha dado lugar a más superficies a limpiar, pero que el anterior Gobierno «limitó el alcance del contrato», por lo que la Consejería «se ha encontrado con un nuevo problema» al que «dará solución».
Pero ha pedido a la oposición que «no venga con premuras», porque la modificación de un contrato «exige tiempo».