César Díaz: ‘La actividad del Puerto de Santander es frenética’

El presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, César Díaz, presumió en el Círculo Empresarial de Cantabria Económica de que el Puerto batió su mejor marca de tráfico, con siete millones de toneladas de mercancías movidas en un año, gracias a numerosas inversiones que está haciendo en infraestructuras. Eso no le impidió señalar los obstáculos que tiene para seguir creciendo, desde la falta de espacio para almacenar más automóviles a la saturación de la terminal de ferrocarril de Muriedas y la constante acumulación de arena en el Puntal, que dificulta el acceso de los barcos al puerto y obliga a realizar dragados cada vez más frecuentes para mantener el calado.

La inmensa mayoría de los cántabros sabe de la existencia del Puerto de Santander pero muy pocos conocen el verdadero impacto que tiene en la economía regional. El presidente de la Autoridad Portuaria (APS), César Díaz, aseguró en la última edición del Círculo Empresarial de Cantabria Económica –celebrado en el Hotel Real– que “la actividad del Puerto representa el 13% del Producto Interior Bruto de la región”. 

El porcentaje puede parecer desmesurado para quien nunca ha accedido al recinto portuario, pero lo cierto es que en él se simultanean cada vez más operaciones de importación y exportación, que se unen a las tradicionales de cabotaje con otros puertos del país. “Once de cada 100 empleos generados en Cantabria están vinculados a la actividad del Puerto, según un estudio que encargamos a la Universidad de Cantabria”, comentó Díaz.

Uno de los mejores medidores de la salud financiera del Puerto es el tráfico anual de mercancías, que ha crecido de forma sostenible en los últimos ejercicios hasta superar el pasado año la histórica barrera de los siete millones de toneladas movidas, y la previsión, si no surge ningún contratiempo, es alcanzar los ocho millones en 2027. “La actividad que tenemos en el Puerto es frenética”, dijo. “El año pasado fuimos el puerto con más crecimiento de la fachada norte del país, con un avance del 9%, en un año en que el sistema portuario estatal redujo su actividad un 3,3%».

Díaz indicó que el Puerto cerró 2023 con una cifra de negocios de 25,1 millones de euros, un 15% más que el año anterior, y con unos beneficios de 4,1 millones, un 64% por encima de los de 2022.

Recordó a los empresarios presentes que “el Puerto se gestiona desde la autosuficiencia financiera”, lo que significa que no está financiado por el Ministerio de Transportes ni por Puertos del Estado. “Los recursos económicos que generamos son los que disponemos para invertir y poder prestar nuestros servicios”, explicó.

‘Estar conectados con Rotterdam es estar conectados con el mundo’

No obstante, aconsejó ser cauteloso, ya que gestionar los crecimientos de forma inapropiada puede llegar a ser contraproducente. Puso como ejemplo la nueva terminal de contenedores de Boluda, que “está experimentando un crecimiento exponencial, y puede llegar a morir de éxito”, advirtió.

Plan Estratégico 2030

En estos momentos, la APS trabaja en la elaboración de un Plan Estratégico hasta 2030 para configurar un puerto capaz de adaptarse a las constantes fluctuaciones del entorno económico, social y tecnológico. Díaz avanzó en el Círculo Empresarial que el documento estará listo en verano.

En este planeamiento, el presidente de la Autoridad Portuaria busca involucrar a todas las partes: “Queremos abrir un importante proceso de participación pública, no solo para empresas, sino también para agentes institucionales, económicos y sociales de la región. Queremos que sea un documento compartido con el resto de la sociedad”.

Fortalezas

Díaz destacó el tráfico ro-ro (mercancías que van sobre camiones o plataformas rodantes) como una de las principales fortalezas del puerto cántabro. Solo en el primer trimestre del año, se han movido 624.510 toneladas, prácticamente las mismas que en todo el 2000, el año de la pandemia. (664.648). “Somos líderes en la fachada cantábrica en mercancía ro-ro”, señaló. No solo se trata de cantidad, ya que Santander ha recuperado el primer puesto en el ranking de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) como mejor puerto del país para el tráfico de coches. “A ese liderazgo contribuye la nueva terminal de contenedores y la tercera línea semanal que nos conecta con Rotterdam y Tilbury”, explicó.

Esta última ruta con Países Bajos y Reino Unido, inaugurada en abril, tiene carácter semanal y abre una alternativa al transporte por carretera con el norte de Europa, y se suma a las líneas con portacontenedores que ya existían con Galicia, Canarias, Liverpool y Dublín. “Estar conectados con Rotterdam es estar conectados con el mundo. No es una simple conexión más, es la conexión, y estamos comprobando que cada vez adquiere mayor capacidad”, enfatizó Díaz satisfecho.

Inversiones

Las infraestructuras portuarias han evolucionado muy deprisa en los últimos años y este proceso va a continuar. A finales de 2023 se dio a conocer un nuevo plan de inversiones del puerto, por importe de 216 millones de euros, de los que 145 serán aportados por el Estado y 71 por la iniciativa privada, para culminar las obras de Raos 9, construir Raos 6, dotar los muelles de más rampas ro-ro, y concluir la terminal de sulfato y de fertilizantes, que estará operativa próximamente. “Tenemos que integrarnos en las cadenas de distribución y de aprovisionamiento de las empresas que hay en nuestro entorno y para ello, debemos ser capaces de generar infraestructuras y servicios que aumenten su competitividad”, explicó.

Díaz reconoció que la obra Raos 9 se ha enfrentado a muchas complicaciones, hasta ver la luz recientemente y, una vez en servicio, “nos va a permitir liderar ese posicionamiento en tráfico ro-ro, con más línea de atraque y más superficie logística”. 

‘Lo idea es que la terminal ferroviaria de Muriedas esté conectada al Puerto por una vía específica’

A su vez, la inversión en Raos 6, que se licitará en breve, permitirá añadir 200 metros más de línea de atraque para 2025, aunque exigirá un desembolso de 19 millones de euros. Ese muelle mejorará la atención a buques graneleros y de mercancía general.

También está prevista la ampliación del silo de automóviles, con dos plantas más, de 70.000 metros cuadrados cada una.

Cabía la duda de cómo recibiría el nuevo Gobierno regional del PP el proyecto de La Pasiega, impulsado por el anterior ejecutivo del PRC y el PSOE, pero no solo ha confirmado su interés en continuarlo sino que César Díaz está convencido de que ese polígono logístico puede catapultar las previsiones de tráfico del Puerto de Santander, que de por sí ya son buenas: “Todo lo que venga de La Pasiega mejorará las expectativas que manejamos en el plan de empresa”, vaticinó.

Aunque todas las perspectivas son halagüeñas para el Puerto, su presidente consideró necesario resolver potenciales cuellos de botella, como la terminal ferroviaria de Muriedas. “A diferencia del Ministerio [ADIF cree que no está suficientemente provechada] nosotros sí percibimos que cada vez está más congestionada”, comentó.

Advirtió que los nuevos tráficos, basados en la intermodalidad, pueden complicar más la situación: “Lo ideal es que la terminal esté conectada al Puerto por una vía específica”, dijo.

Santander ya es uno de los puertos españoles que más utiliza el ferrocarril, aunque matizó que los de Bilbao y Gijón cuentan con mejor acceso de vías “y tienen más superficie terrestre de almacenamiento. Es una realidad que está ahí y contra la que competimos diariamente, pero sin ningún tipo de resignación”.

‘La mercancía tiene que estar el menor tiempo posible en puerto. Todos tenemos que esforzarnos en esa rotación’

El responsable de la APS subrayó que estos dos puertos (sus principales competidores por el Este y el Oeste) tienen una actividad portuaria significativamente mayor que Santander, pero a la vez tienen una fuerte dependencia de productos muy concretos: el siderúrgico y el petrolífero. “En cambio, Santander es un puerto multiproducto, que tiene un poco de todo”, lo que diversifica los riesgos provocados por la decisión que pueda tomar un operador.

Díaz reconoció que el puerto santanderino no tiene un “grifo” ‘abierto con la refinería de Petronor, pero pronosticó que puede llegar a tenerlo, con el desarrollo de la planta de hidrógeno verde que se proyecta en la antigua fábrica de Sniace. “Si ese proyecto se llega a materializar y la exportación se hace por nuestro puerto, estaríamos hablando de entre 500.000 y 800.000 toneladas al año”, calculó.

El mayor hándicap del Puerto es la escasez de superficie para almacenamiento. Para solventarlo, Díaz consideró necesario “optimizar cada metro cuadrado” y conseguir que la mercancía tenga la mayor rotación posible. Este proceso de aprovechamiento de espacios afectará, incluso, a las dependencias administrativas. “Queremos concentrar nuestros servicios, que están dispersos, en una nueva sede, y eso nos permitirá destinar a otros usos el espacio que ahora ocupamos”, adelantó.

Destacó que el Puerto cántabro “está muy terminalizado”, lo cual es positivo, pero señaló que también se necesitan muelles públicos para agilizar el paso de la mercancía. “La mercancía tiene que estar el menor tiempo posible posada en el puerto, por eso es esencial que el ferrocarril, las grúas y camiones se sincronicen. Todos tenemos que esforzarnos en que esa rotación aumente, porque si no, el Puerto de Santander no podrá crecer», expuso.

Un ‘puerto laboratorio’

El Puerto también tiene la vocación de acoger proyectos de innovación de todo tipo, como el Bahía H2 Offshore, una barcaza que estará fondeada en las proximidades de Raos 9, donde transformará el agua del mar en hidrógeno y amoníaco verde. Un proyecto piloto de otro mucho más ambicioso, pero que ya generará por sí mismo 21 empleos directos.

Esta iniciativa, cuyo objetivo es instalar esta tecnología en plataformas flotantes que funcionen mediante energía fotovoltaica y solar, suscita un gran interés en el sector naval, ya que permitirá suministrar hidrógeno en alta mar a los barcos que van a utilizarlo como combustible, sustituyendo los actuales, muy contaminantes. 

“Tenemos las condiciones para ser un puerto-laboratorio”, aseguró Díaz, quien recordó que la APS también ha sido artífice de programas para promover la transformación digital de los puertos españoles. Bajo el mandato del anterior presidente, Francisco Martín, ya se presentó, junto con la Universidad de Cantabria, una cátedra institucional en Inteligencia Artificial aplicada a puertos.

Intrusismo bajo control

Los recintos portuarios son espacios vivos en los que hay cambios constantes. En 2018, la Autoridad Portuaria comenzó a instalar un vallado en su perimetro para impedir que los ilegales accedan a los ferris que parten de Santander con destino a Inglaterra e Irlanda, justo cuando el puerto se hallaba en pleno proceso de integración con la ciudad. 

La valla, de cuatro metros de altura y red metálica, fue una de las medidas puestas en marcha para reducir los casos de intrusismo, junto a las concertinas, que se empezaron a colocar tres años después. “Fue uno de los problemas más difíciles que tuvimos, pero ya ha dejado de serlo. En 2021, registramos 2.079 intentos  y en 2023, solamente 35”, recordó Díaz.

El Puerto va a concentrar sus servicios administrativos en una nueva sede

Aunque la situación parece bajo control, las medidas de seguridad continuarán desplegadas. «La tendencia es muy positiva, pero no podemos relajarnos”, dijo. Además de reforzar la policía portuaria y contratar vigilancia externa “queremos que todo el perímetro portuario tenga esa valla de cuatro metros, porque algunas zonas no tienen cerramiento”.

El presidente de la APS no quiso ponerse metas en la evolución de los tráficos “porque muchas veces sufren coyunturas que no dependen de la Autoridad Portuaria y no queda más remedio que asumirlas”, se justificó.

En cualquier caso, Díaz cree que el éxito dependerá de la capacidad del puerto para empatizar con la comunidad portuaria y con sus clientes. “Que sepan que si llaman, estamos ahí para preocuparnos de sus problemas e intentar resolverlos”.

David Pérez