Vueling ha cancelado el 1% de los vuelos y Cantabria no puede sancionar hasta el 10%
Vueling ha cancelado hasta agosto de este año siete de los 680 vuelos previstos en Cantabria, que suponen el 1,02 por ciento del total, pero el Gobierno regional no puede «hacer nada» -como sancionar a la compañía- hasta que las supresiones supongan el 10% de todas las conexiones, según el convenio firmado entre ambas partes en su día y vigente en la actualidad.
«Estamos atados de pies y manos con los contratos que tenemos», ha lamentado el consejero de Fomento, Roberto Media (PP), este jueves a preguntas de los periodistas sobre la suspensión, ayer miércoles, de la única ruta entre Barcelona y Santander y sin explicaciones -todavía- de la aerolínea, a pesar de que el avión que debía realizar esa operación sí voló de la ciudad condal a Málaga.
«Hasta que tengamos otros contratos, tenemos que aplicar los que alguien firmó y me dejó en el cajón», se ha quejado el titular de la Consejería, que ha destacado que desde el Ejecutivo han pedido «reiteradamente» explicaciones de lo ocurrido a Vueling, que en 2023 también canceló siete conexiones con Cantabria de las 1.052 programadas, un 0,67%, de nuevo lejos del 10% necesario para sancionar.
Y aunque «muchos» de esos percances obedecen a temporales y están «perfectamente justificados», lo que sí ha hecho la administración autonómica en este último caso es, además de pedir las citadas explicaciones, abrir expediente para esclarecer lo ocurrido con el vuelo Santander-Barcelona.
Pero «los contratos están firmados por quienes están firmados y permiten lo que permiten», ha insistido el consejero ‘popular’, que se ha mostrado así «sorprendido» por la reacción del PRC, que gestionó la pasada legislatura Transportes y Turismo, y que a través de su diputado y exconsejero del ramo, Javier López Marcano, ha instado al Gobierno del PP a «hacerse respetar» con «posturas más firmes» para poner fin a las supresiones de vuelos en el Seve Ballesteros «sin motivo justificado», como al parecer ha ocurrido en este caso y también recientemente con otra conexión de Air Nostrum.
Media considera «intolerable» lo sucedido y «cualquier perjuicio que se le causa sin motivo a un ciudadano», y ha aseverado que el Ejecutivo «no va a permitir, siempre que pueda, con los contratos que hay en vigor, que esto ocurra».
Tras la supresión del vuelo Santander-Barcelona, Vueling fletó varios autobuses para transportar a los pasajeros afectados, que tuvieron así que realizar el viaje entre las dos ciudades -separadas por 700 kilómetros- por carretera.