El sector francés del coñac dice ser «rehén» de la disputa comercial entre la UE y China

El Buró Nacional Interprofesional del Coñac (BNIC), organismo que vela por los intereses de la industria francesa del coñac, ha reclamado al Gobierno galo que tome «las medidas necesarias» para poner fin a la escalada en la crisis comerciales entre la Unión Europea y China de la que el sector se siente «rehén», después de que Pekín haya anunciado la imposición de aranceles provisiones desde este viernes a las importaciones de brandy procedentes de los Veintisiete.

Para el lobby del coñac francés, integrado tanto por viticultores como por comerciantes, el anuncio del Ministerio de Comercio de China representa una respuesta directa e inmediata de las autoridades del gigante asiático a las decisiones adoptadas por Bruselas el pasado 4 de octubre a favor de la imposición de impuestos a los coches eléctricos chinos.

El Ministerio de Comercio de China ha anunciado este martes que desde el próximo viernes se impondrán «medidas antidumping provisionales» sobre las importaciones de determinados brandys originarios de la Unión Europea, revirtiendo así la decisión de finales del pasado mes de agosto, cuando había descartado fijar aranceles sobre las importaciones de licor procedentes de los Veintisiete.

La postura del gigante asiático, anunciada después de que la semana pasada Bruselas decidiera seguir adelante con los aranceles al coche eléctrico chino, contempla la imposición desde este viernes de márgenes de entre el 30,6% al 39% a una serie de marcas europeas, principalmente francesas, aunque también afecta a las españolas Bodegas Osborne, Bodegas Fundador y Miguel Torres, a las que aplicará un 34,8%.

En este sentido, son las marcas francesas de coñac y armañac las principales señaladas por el Ministerio de Comercio chino, asumiendo en el caso de Hennessy, del grupo LVMH el mayor impacto, con una tasa del 39%, mientras que el menor corresponde a la también francesa Martell, con un 30,6%.

«Las autoridades francesas no pueden abandonarnos y dejarnos solos frente a una represalia china que no nos concierne», reclama BNIC, que advierte de que el impacto de estos impuestos sería catastrófico para la industria y las regiones.

«Hay que hacer todo lo posible para evitar este desenlace. Llamamos a nuestro Gobierno a tomar finalmente las medidas necesarias para poner fin a esta escalada, de la que somos rehenes y cuyo desenlace es ahora más amenazador que nunca», apostilla.

Las acciones de las principales destilerías francesas reflejaban en su cotización este martes el impacto del anuncio de Pekín, con caídas de más del 7% para Remy Cointreau, que cede más de un 45% desde que en enero China abriera su investigación al sector, mientras que los títulos de Pernod Ricard, dueño de Martell, bajaban más de un 3% en la sesión y pierden casi un 19% en lo que va de año.

De su lado, las acciones del grupo de lujo LVMH, propietario de Hennessy, cotizaban con un retroceso de más del 4% en la jornada y elevaban a casi un 10% su corrección en 2024.