El comercio de Santander crece en la periferia
Caen los locales de productos frescos en Santander y aumentan los de servicios inmobiliarios y deportivos
Santander cuenta con 2805 comercios activos (a cierre de 2023), lo que supone un incremento del 2,1% respecto a los 2.746 que funcionaban un año antes e incluso comparándolo con fechas prepandemia (un 6,4% más que en 2018, cuando había 2637 locales activos). En este crecimiento destaca el aumento de locales bajos comerciales fuera del centro de Santander, y más en concreto, en el barrio de El Alisal.
Así se desprende del Informe de Coyuntura del Comercio de Santander correspondiente al año 2023 que han presentado este viernes en rueda de prensa el concejal de Comercio, Álvaro Lavín; el vicepresidente de la Cámara de Comercio, Miguel Ángel Cuerno, y el responsable del departamento de Creación de Empresas de la Cámara, David Ramos.
Ramos ha subrayado que el comercio se ha «desplazado» para cubrir las necesidades de las personas y, cada vez, en esa zona se ocupan más oficinas y hay más actividad profesional como consecuencia del crecimiento urbanístico que está experimentando.
Además, tanto Ramos como Cuerno han remarcado que el precio de los alquileres de los locales en el centro de la ciudad cuyo precio –de unos 5.000 euros para un local de 30 metros cuadrados, estiman– es «difícil» de asumir por un pequeño comerciante. Por ello, justifican la presencia de cada vez más franquicias en el centro de la ciudad.
De ahí, tanto Ramos como Cuerno han justificado que el comercio de la ciudad es «dinámico» y han hecho hincapié en que, aunque «no lo veamos en el centro, no quiere decir que no esté».
Descienden los comercios que venden productos frescos y aumentan las inmobiliarias
El número de locales de comercio de productos frescos ha descendido en Santander en 2023, mientras que han aumentado los dedicados a las actividades deportivas y los servicios inmobiliarios.
En concreto, la presencia de carnicerías y pescaderías en la ciudad ha bajado un 21 por cierto, destruyéndose un total de 187 de estos negocios de los 1.285 existentes en la ciudad. En esta lista también figuran los dedicados a instrumentos musicales, con un 14% menos, y las lavanderías y tintorerías tradicionales con una bajada del 6%.
Por contra, los negocios que han experimentado un fuerte crecimiento han sido los dedicados a actividades deportivas, con un aumento del 76% en un año que ocupan un total de 967 locales, así como los destinados a la venta de bebida (67%), los servicios inmobiliarios (52%) y el tabaco (43%).
Ramos ha detallado que la destrucción de locales dedicados a los productos frescos se debe a que, cada vez, «consumimos más envasado», lo que conlleva un descenso de la actividad, ya que «parece que no tenemos esa necesidad de consumo».