La osteopatía en el siglo XXI, ciencia, investigación y práctica clínica
La osteopatía se ha consolidado como una disciplina sanitaria que combina ciencia, evidencia y práctica clínica para abordar las disfunciones del cuerpo humano. En este contexto, la Escuela de Osteopatía de Madrid (EOM) desempeña un papel clave en la formación de profesionales especializados en terapia manual, aportando más de tres décadas de experiencia y un enfoque integral que une conocimiento científico e innovación.
Formación académica basada en la ciencia y la evidencia
La EOM ofrece un programa académico para fisioterapeutas, diseñado para garantizar una formación basada en la evidencia. Este plan de estudios, estructurado en 34 seminarios, aborda desde las bases científicas de la osteopatía hasta su aplicación clínica avanzada. Los estudiantes, además de obtener el título de D.O en Osteopatía, reconocido internacionalmente, adquieren dos másteres en formación permanente.
La escuela, certificada por ACCM bajo la Norma UNE-EN 16686:2015, asegura que su metodología cumpla con los más altos estándares europeos, integrando ciencia y práctica en la enseñanza de la osteopatía.
Innovación e investigación al servicio de la terapia manual
La investigación es uno de los pilares fundamentales de la EOM. Con un departamento dedicado al I+D+i, la escuela fomenta el avance en el campo de la osteopatía, promoviendo estudios que validan científicamente las técnicas de terapia manual utilizadas en el tratamiento de disfunciones musculoesqueléticas, viscerales y craneales.
Este compromiso con la innovación se complementa con una sólida práctica clínica. Las clínicas propias de la EOM en Madrid, Sevilla, Valencia y Barcelona permiten a los estudiantes aplicar sus conocimientos en pacientes reales, integrando la teoría con la experiencia práctica en un entorno supervisado.
La osteopatía, como ciencia y método de tratamiento manual, sigue ganando reconocimiento en el ámbito de la salud. Gracias a instituciones como la Escuela de Osteopatía de Madrid, se garantiza que los futuros profesionales cuenten con las herramientas necesarias para ofrecer tratamientos efectivos, basados en la evidencia, y centrados en el bienestar del paciente.