Fedea defiende suprimir impuesto a generación eléctrica y sustituirlo por un aumento temporal de los cargos

El aumento temporal de los cargos tendría un impacto negativo en los consumidores domésticos, con un aumento del 2% en la factura anual

Fedea ha defendido que la supresión del Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica (IVPEE), sustituido por un aumento de los cargos durante un corto período -algo que sería previsiblemente necesario para el mantenimiento del equilibrio financiero del sistema eléctrico- tendría efectos favorables para la mayoría de grupos tarifarios, permitiendo una reducción del coste del suministro eléctrico.

En un informe, el think tank de la CEOE considera que este aumento de los cargos sería temporal, ya que la reducción de los costes distintos a los de las redes «va a ser muy acusada en los próximos años en el contexto de finalización del pago de la deuda del sector eléctrico».

De esta manera, indica que la desaparición del IVPEE permitiría terminar con la paradoja de la existencia de un impuesto «circular» que pagan los consumidores eléctricos a través del coste de la energía consumida y que se utiliza para cubrir parcialmente los costes hundidos del sistema.

No obstante, advierte de que esta sustitución del gravamen por ese aumento temporal de los cargos supondría un impacto negativo en el grupo de consumidores domésticos, aunque de una «muy pequeña magnitud», con apenas un aumento del 2% en la factura anual.

A pesar de ello, Fedea recalca en su documento más ventajas con la desaparición del IVPEE, como el poder poner fin a la distorsión competitiva en los intercambios de energía con los países vecinos, en los que no existe un impuesto a la generación que las empresas incorporan como un coste variable más en las ofertas que realizan al mercado.

Adicionalmente, estima que el impuesto a la generación permite reducciones de costes regulados del sistema, al constituir parte de los costes reconocidos a las plantas de generación acogidas el sistema de retribución específica de renovables, cogeneración y residuos, así como a las plantas de generación térmica en los sistemas no peninsulares.

Igualmente, remarca que su propuesta satisface el mantenimiento del equilibrio financiero del sistema eléctrico. «En cualquier caso, se recomienda también estabilizar en los próximos años los flujos percibidos por el sistema, tanto en relación con otras figuras tributarias recogidas en la Ley 15/2012 como, sobre todo, en relación con las transferencias percibidas por los ingresos asociados a las subastas de derechos de emisión», dijo.

VIGENTE DESDE HACE MÁS DE UNA DÉCADA.

La Ley 15/2012, de 27 de diciembre, de medidas fiscales para la sostenibilidad energética, introdujo una serie de nuevos impuestos para contribuir al equilibrio presupuestario del sistema eléctrico, entre los que figuraba el IVPEE, conocido como el impuesto a la generación y que grava con un tipo del 7% el importe recibido por las empresas de generación por la venta de su energía.

Este impuesto estuvo suspendido desde el 1 de julio de 2021 hasta ya entrado el año 2024, cuando se fue recuperando de modo paulatino a lo largo del ejercicio.

A finales del año pasado, PP y Junts acordaron una enmienda para la suspensión de este impuesto a la generación eléctrica, aunque, finalmente, PSOE y Sumar lograron un aplazamiento de la Comisión en la que se debía abordar este tema.