Denaria denuncia las «constantes» dificultades de los ciudadanos «para acceder y pagar con efectivo»

El presidente de la Plataforma Denaria, Javier Rupérez, ha denunciado que los ciudadanos españoles continúan presentando «constantes dificultades para acceder y pagar con efectivo».

Así se ha expresado este martes durante su comparecencia ante la Comisión de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 del Senado, donde ha señalado que los ciudadanos perciben un acceso cada vez más limitado al efectivo, según reflejan los estudios de GAD3 y el Banco de España (BdE), así como las denuncias recibidas en el canal de denuncias de Denaria.

En concreto, según el Estudio sobre hábitos en el uso del efectivo del BdE, un 59% de la población utiliza el efectivo como medio de pago principal, y un 57% lo usa diariamente, además, el 66% de los encuestados cree que su uso del efectivo se mantendrá igual en un año.

EL 80% DE LOS ESPAÑOLES ESTÁ EN CONTRA DE DESAPARICIÓN DEL EFECTIVO

Asimismo, el informe indica que tanto el cash-back (retirada de efectivo en comercio asociada a compra) como el cash-in-shop (retirada de efectivo en comercio no asociada a compra) son cada vez más conocidos por la población, lo que refleja el hecho de que el 20% de la población conoce dichos servicios en 2024, frente al 14% en 2023, así como que el 4% de la población ha usado estos servicios en 2024, frente al 3% en 2023.

Adicionalmente, la encuesta sobre Accesibilidad y permanencia del dinero en efectivo en España elaborada por GAD3, revela que cada vez más españoles encuentran dificultades para acceder a cajeros, alcanzado la percepción de dificultad su nivel más alto en el pasado año 2024, con un 61%.

Además, el 80% de los españoles está en contra de la desaparición del efectivo, un sentimiento «especialmente fuerte» entre los mayores (89%), las personas con menores ingresos (88%) y los usuarios habituales de efectivo (96%).

En este sentido, el presidente de la plataforma ha defendido que «una parte significativa de la población considera que el acceso al efectivo sigue siendo insuficiente y enfrenta múltiples obstáculos», al tiempo que ha subrayado la preocupación de «amplios sectores de la sociedad ante la progresiva desaparición del acceso a este medio de pago». En esta línea, uno de los problemas «más graves» expuestos ha sido el descenso continuado del número de oficinas bancarias y cajeros automáticos, especialmente en zonas rurales, lo que afecta de manera directa a colectivos vulnerables y contribuye a la exclusión financiera.

«Cada vez hay menos sucursales y cajeros, y aunque se han mejorado las cosas, todavía muchos ciudadanos se ven obligados a recorrer kilómetros para disponer de su propio dinero en efectivo», ha explicado Rupérez.

TRABAS AL PAGO EN EFECTIVO EN LAS ADMINISTRACIONES PÚBLICAS

Asimismo, ha denunciado que las administraciones públicas «siguen imponiendo» trabas al pago en efectivo, a pesar de las leyes que garantizan su aceptación, lo que se comprueba a partir de los datos recopilados a través del canal de denuncias de Denaria, y de los que Rupérez ha resaltado que «los ciudadanos envían quejas por las negativas a aceptar efectivo en servicios esenciales como el transporte público, la administración, los peajes y algunos establecimientos comerciales».

Igualmente, ha destacado que muchas de estas restricciones provienen de entidades públicas, lo que, a su juicio, genera una contradicción con el marco legal vigente. En su comparecencia, el presidente de Denaria ha insistido en la necesidad de garantizar la accesibilidad y la neutralidad de los medios de pago, evitando que se impongan barreras al uso del efectivo.

Para ello, ha defendido una serie de propuestas, entre las que figuran ampliar la red de cajeros y puntos de acceso al efectivo, con especial atención a las zonas rurales o mayor transparencia en los costes de los distintos métodos de pago, asegurando que los ciudadanos conozcan el impacto real de las transacciones digitales. Asimismo, el máximo representante de Denaria ha sugerido endurecer las sanciones para quienes se nieguen a aceptar efectivo, en cumplimiento de la normativa vigente.

Por último, Rupérez ha concluido su intervención advirtiendo que, si no se toman medidas urgentes, la desaparición del efectivo podría convertirse en una realidad irreversible, «afectando la libertad de elección de los consumidores y dejando a miles de ciudadanos en situación de vulnerabilidad».