La solidaridad de las compañías cántabras ha aterrizado en la Cocina Económica de Santander. Las empresas alimentarias Patatas Vallucas, regentada por David Fernández, Sobaos El Andral, por José Ángel Sáiz, y Chocolate Monper, por Borja Pérez, han donado sus productos para asegurar provisiones alimentarias a los más desfavorecidos. Los responsables de la empresas han enviado patatas crudas de Valderredible, bolsas de patatas fritas, sobaos y quesadas, tabletas de chocolate y cacao chocolate.
El hecho de que el coronavirus haya detenido la actividad de los tres obradores ha llevado a sus gerentes a dar salida a sus productos. En el caso de Sobaos El Andral, caducan al poco tiempo de ser elaborados y de no ser por esta iniciativa, Sáiz se vería obligado a desecharlos.
Cuando los responsables de Vallucas, El Andral y Monper hicieron llegar sus mercancías a la ciudad, abrieron la posibilidad a los organizadores de la Cocina Económica de seguir abasteciendo una vez se haya consumido la totalidad de sus productos. Según Fernández, el proyecto de colaboración ha surgido por la necesidad de ayudar en esta crisis sanitaria a quienes «más lo necesitan» y porque «somos muy amigos y hablamos casi todos los días entre nosotros tres». Además, Fernández ha donado algunos mandiles de plástico y mascarillas.