Digitalizar las pymes y mayor formación digital, claves para reactivar la economía y el empleo tras el Covid

Según Fundacion Telefónica

La aceleración de la digitalización de la industria, sobre todo de las pequeñas y medianas empresas (pymes) y los autónomos, y una mayor formación digital de los españoles son dos factores clave para reactivar la economía tras la crisis del Covid-19 y generar empleo, según recoge un informe elaborado por la Fundación Telefónica.

En la presentación del estudio La Sociedad Digital en España 2019 , la directora general de Fundación Telefónica, Carmen Morenés, ha señalado que la crisis del Covid-19 ha supuesto «un punto de inflexión muy potente» en el campo de la digitalización, que se ha convertido en parte de la solución a las consecuencias que generará la emergencia sanitaria en el ámbito económico y laboral.

A este respecto, ha remarcado que, una vez superada la crisis sanitaria, vendrán «momentos difíciles» con una crisis económica que puede ampliar las brechas sociales. Por ello, ha defendido la necesidad de apostar por la digitalización, ya que es la «única manera de salir de esa situación» y volver a tener la capacidad de crear empleo y recuperar el tejido productivo y empresarial.

En este contexto, ha apostado por una alianza entre todos los sectores de la sociedad, gobiernos, empresas y sociedad civil, para formar a las personas en todas sus etapas, desde la educación infantil hasta la formación durante su vida laboral, con el objetivo de que «nadie se quede atrás».

CUARTA REVOLUCIÓN

El informe apunta que España se encuentra inmersa en la cuarta revolución basada en la digitalización y en los datos, lo que implica «cambios radicales» en la vida de las personas, en las formas de trabajar y producir y en el desplazamiento de algunos modelos de negocio tradicionales a otros completamente novedosos.

Así, remarca que esta transición digital presenta retos e incertidumbres, pero también tiene efectos muy positivos y ofrece grandes oportunidades. «Sin ir más lejos, la presente crisis del Covid-19 nos ha obligado a repensar de la noche a la mañana la manera de vivir, estudiar, trabajar y disfrutar, y aquí la elevada digitalización de España ha hecho que la adaptación haya sido rápida y ha permitido la continuidad de muchas actividades esenciales», remarca.

A este respecto, la Fundación incide en que esta digitalización deberá estar «centrada en las personas», que serán las beneficiarias de estos avances, y advierte de que «nadie debe quedarse atrás». «Un reto que pasa por la formación en competencias digitales, con una visión humanista y donde se proteja a las personas con un marco ético y un nuevo contrato social», incide.

En la presentación del informe, el responsable de Cultura Digital y Espacio Fundación Telefónica, Pablo Gonzalo, ha remarcado que la principal brecha que existe actualmente en España es este campo reside en la adopción de los servicios digitales, tanto en el ámbito de la empresas como en el de los ciudadanos.

En este sentido, ha incidido en que, si antes de que empezara la crisis del coronavirus este aspecto ya era «muy relevante», ahora se ha convertido en algo «fundamental», ya que se ha visto que las empresas más digitalizadas son las que mejor están afrontando la crisis y los ciudadanos con más competencias lo que están pudiendo seguir formándose o trabajando desde sus casas.

DIGITALIZACIÓN DE LA ECONOMÍA

El informe señala que España progresa en su transición digital y se encuentra a la cabeza en conectividad con infraestructuras de primer nivel, como refleja el hecho de que tres de cada cuatro hogares del país tienen cobertura de fibra óptica y nueve de cada diez españoles son usuarios de Internet.

Respecto a la transformación digital de la industria, indica que España supera la media europea, «aunque está lejos de ser líder». El principal reto lo tienen las pymes y los autónomos, que deben acometer un esfuerzo para su digitalización, proceso en el que dos de cada tres empresas españolas se están quedando rezagadas.

Así, el informe indica que en un plazo de cuatro años, las empresas industriales españolas esperan que, fruto de la digitalización, aumenten sus ingresos en torno al 11% y se reduzcan los costes casi en una quinta parte, pero, en cambio, las pymes «aún tienen que recorrer un largo camino hacia la digitalización».

El informe apunta que, antes de que empezara la crisis del Covid, PwC estimaba que la reinvención digital de España podría tener un impacto que podría alcanzar un valor anual equivalente al 1,8% del PIB hasta 2025. Sin embargo, Gonzalo ha añadido que, en el actual contexto, la digitalización se ha convertido en una «palanca fundamental» y no se puede desaprovechar la capacidad que tiene para generar riqueza y empleo.