UCEIF busca reconocimiento para su Instituto investigador
La banca y las finanzas son también un área de investigación, aunque no lo parezcan. Ambos son uno de los cinco ejes estratégicos con los que la Universidad de Cantabria consiguió hacer realidad el proyecto de Campus de Excelencia Internacional. Y lo hizo contando con una poderosa herramienta, la Fundación para el Estudio y la Investigación del Sector Financiero (UCEIF), promovida por la propia Universidad de Cantabria y el Banco Santander en 2006.
Es precisamente esa faceta investigadora la que, desde la Fundación, se quiere ahora potenciar con el reconocimiento oficial del Instituto universitario que creó en 2012, el SANFI, y con el que viene desarrollando una intensa actividad investigadora.
Ese reconocimiento es clave para que el Instituto pueda en el futuro acceder a convocatorias públicas de investigación, ampliando los recursos con que actualmente cuenta, y que proceden en buena parte del patrocinio del Banco Santander.
Una masa crítica de investigadores
Para lograr este objetivo, que confía en alcanzar en cuatro o cinco años, la Fundación ha puesto en marcha un plan de trabajo para dotar al SANFI de los grupos de investigación estables y del volumen de proyectos que justifiquen su reconocimiento por la Universidad de Cantabria como Instituto universitario de carácter mixto, como lo son, en otro ámbito, el IBBTEC o el IFCA. Para ello ha trazado una estrategia en que la convocatoria de ayudas a investigadores, basada en recursos propios, juega un papel muy relevante, dada la ausencia de financiación pública a la investigación en los últimos años.
Ya desde 2008, la Fundación venía convocando ayudas de 12.000 euros para proyectos dirigidos por investigadores menores de 40 años, así como premios a tesis doctorales, dotados con 4.000 euros. También ha venido colaborando con asociaciones académicas españolas como la de Profesores de Finanzas o la Asociación de Historia Económica. Pero tras la creación del SANFI, el objetivo es más ambicioso: no solo se trata de apoyar la investigación, sino de contar con investigadores propios.
La convocatoria del programa Augusto González Linares, dentro de las actividades del Campus de Excelencia, permitió a la Fundación traer a un investigador extranjero. Este, durante tres años, desarrolló en la Universidad de Cantabria un proyecto sobre mercados financieros, una de las tres áreas que el SANFI había elegido para delimitar su campo de investigación. Las otras dos son los procesos bancarios y la historia financiera.
Otra de las líneas de ayudas fue la de estancias cortas, que el Instituto aprovechó para tejer entre los departamentos universitarios de Económicas y Empresas y los investigadores extranjeros invitados una red de conocimiento y de intercambio de experiencias que fue la base para el siguiente paso: la convocatoria por el propio SANFI de un programa de ayudas.
Fruto de esa estrategia ha sido la creación de grupos de investigación en proyectos liderados por catedráticos extranjeros de gran prestigio, como Oliver Linton, en el campo de los mercados globales; y Carlos Marichal, en el de historia bancaria.
Esos grupos han sido ya adscritos provisionalmente al SANFI por la Universidad de Cantabria en ese proceso de reconocimiento oficial que persigue la Fundación para su Instituto, un esfuerzo al que viene dedicando cerca de 350.000 euros anualmente entre premios y ayudas.
El SANFI trabaja ya en una segunda convocatoria en la que el cambio de modelo de negocio bancario provocado por la digitalización, la reputación de la banca y el modo como se percibe por los usuarios y la educación financiera serán algunas de las líneas de investigación.