Campaña para que los cántabros ‘distingan’ su mesa con la excelencia de los alimentos de la tierra
La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Oficina de Calidad Ambiental de Cantabria (ODECA), ha lanzado una campaña promocional de alimentos de la tierra para que los cántabros «distingan» su mesa con la excelencia que ofrecen los productos que, «con tanto esmero y profesionalidad», elaboran los productores de la Comunidad Autónoma.
Bajo el título ‘Alimentos de Cantabria, distingue tu mesa’, la nueva campaña promocional del Ejecutivo autonómico pretende que el consumidor asocie los productos que se elaboran en la región a la calidad.
«Producimos poco pero excelente y con un gran valor añadido», ha subrayado el consejero del ramo, Guillermo Blanco, que ha insistido en el «empeño» de su departamento de transmitir el valor del producto de Cantabria para que el consumidor «lo detecte y lo aprecie».
«Son productos sencillos, sin complicaciones en su receta de elaboración, pero cuentan con unos ingredientes excepcionales y el saber hacer de los elaboradores que saben transmitir de generación en generación ese conocimiento inmaterial que da la tradición y las cosas bien hechas», ha afirmado en un comunicado.
En este sentido, ha remarcado la «apuesta decidida» de la Consejería por impulsar el sector agroalimentario, del que ha dicho que representa un sector estratégico «en auge» al suponer más del 22% de las ventas totales de la industria y una cifra de negocio superior a los 1.600 millones de euros, dando empleo a más de 6.500 personas y acogiendo más de 500 empresas.
«Nuestro compromiso es que los productores cántabros vivan dignamente y su esfuerzo se vea recompensado», ha aseverado el consejero, quien ha recordado que su departamento incrementará el año que viene de manera «notable» las partidas destinadas a un «sector clave» en la lucha contra el despoblamiento de las zonas rurales.
Ha insistido en el llamamiento a la ciudadanía para que consuman alimentos de Cantabria porque, en su opinión, «es la mejor manera que existe de reconocer el esfuerzo que realizan los productores agroalimentarios de Cantabria a la hora de elaborar unos productos que ha forjado la marca ‘Alimentos de Cantabria’ a base de excelencia y calidad».
«Vamos a seguir fomentando el consumo y el conocimiento de nuestros productos porque son el motor de la economía de nuestros pueblos y, por lo tanto, de la economía de nuestra región», ha asegurado.
Campaña
La nueva campaña de la marca ‘Alimentos de Cantabria’ se desarrolla en dos fases: la primera, que ha comenzado esta semana y se prolongará hasta finales de mes, está dirigida a promocionar los alimentos de Cantabria en términos generales, y una segunda, prevista para la primera quincena de diciembre, pretende fomentar el consumo de este tipo de productos en unas fechas tan señaladas.
Se difundirá entre más de cuarenta medios de comunicación de la región, entre periódicos, revistas, radios, televisiones y medios digitales, con banners publicitarios, publirreportajes, cuñas, anuncios y spots.
De esta manera, suma a las numerosas medidas de promoción y apoyo al sector agroalimentario que desarrolla la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, especialmente, desde que se inició la pandemia del coronavirus y el sector «más ha demostrado su valía como garantía del abastecimiento de la alimentación a la población’.
El consejero ha recordado que su departamento concedió ayudas para que las cooperativas agroalimentarias comprasen productos de primera calidad para su posterior donación al Banco de Alimentos y la Cocina Económica.
También puso en marcha una campaña para promocionar los alimentos de Cantabria en las grandes superficies comerciales de la región; una página web para facilitar el contacto entre productores y consumidores, y el fomento del consumo de productos de Cantabria en los centros escolares y sanitaros de la región, entre otras iniciativas.
Finalmente, ha garantizado que la Consejería seguirá apoyando en la medida de sus posibilidades al sector agroalimentario para que sus profesionales y la excelente actividad económica que generan se recupere «lo antes posible» de los efectos provocados por el COVID-19.