Empresarias e instituciones denuncian que la pandemia ha agudizado la discriminación de las mujeres
Representantes de las empresarias e instituciones de Cantabria han coincidido, en un acto celebrado este lunes en el Parlamento para conmemorar el Día Internacional de la Mujer (8M), en que la pandemia del coronavirus ha agudizado la discriminación de las mujeres y ha aumentado la desigualdad.
Así lo han señalado la presidenta de la Asociación de la Asociación de Mujeres Empresarias de Cantabria (ADMEC), organizadora del acto, Eva Fernández; el presidente regional, Miguel Ángel Revilla; la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones; la vicepresidenta primera del Parlamento, Emilia Aguirre; la directora general de Igualdad y Mujer, Consuelo Gutiérrez; la alcaldesa de Santander, Gema Igual; y el consejero de Industria, Javier López Marcano, entre otros.
En su intervención en el acto, bajo el título ‘¿Ha supuesto el COVID un paso atrás para las mujeres?’, la presidenta de las empresarias ha señalado que la situación de la mujer tras la crisis del coronavirus es «preocupante» y ha pedido ayudas al Gobierno.
«No nos engañemos, hace falta dinero. Las empresas necesitamos ayudas en este año clave. Necesitamos que el Gobierno nos sostenga hasta que pase esta pesadilla y podamos empezar a remontar», ha trasladado.
Según Fernández, la situación de la igualdad hace un año «no era real 100%» y en la actualidad es «verdaderamente preocupante».
Así, se ha referido al informe #EmpleoParaTodas realizado por la Fundación Adecco con motivo de este día, que revela que la crisis del Covid ha arrastrado al desempleo de larga duración a 700 mujeres en Cantabria en el último año y la cronificación del desempleo alcanza a 7.000 mujeres de la Comunidad, un 11,1 por ciento más que el año anterior.
Según este informe, las mujeres en Cantabria alcanzan el 63 por ciento del total de desempleados de larga duración, de las que el 43,8 por ciento lleva más de un año en desempleo, porcentaje superior al masculino, que se sitúa en el del 26,1.
Asimismo, apunta que de los 713 nuevos desempleados de la región
durante febrero, 579 son mujeres y en cuanto al empleo autónomo, Cantabria ha perdido 28 mujeres autónomas desde que comenzó la pandemia hace un año.
«Con los datos sobre la mesa, creo sinceramente que algo se nos está escapando y que hay un sector poblacional femenino que se encuentra desprotegido, y lo que es peor: siendo un objetivo vulnerable en todas las crisis», ha opinado la presidenta de la organización.
Por esta razón, Fernández ha pedido «compromiso y ayuda» para detectar entre todos dónde está «el agujero en el sistema que deja fuera a las mujeres».
Respecto a la corresponsabilidad, lema elegido para la campaña de este año del Gobierno regional, ha asegurado que las mujeres «sacrifican» en muchas ocasiones sus proyectos profesionales por su vida personal» y ha criticado que no hay «muchas alternativas con políticas de conciliación reales que ofrezcan herramientas para no tener que elegir entre vida profesional y familiar».
En este sentido, Fernández ha manifestado la necesidad de que la asociación forme parte de los órganos que aportan soluciones a los problemas de las mujeres.
Por su parte, Revilla ha coincidido con que la pandemia ha «agudizado» la discriminación de las mujeres y provocado en ellas «situaciones terribles» porque ocupan «los puestos más sensibles a perder la actividad».
En cuanto a la petición de ayudas realizada por la ADMEC, ha señalado que el Gobierno regional ha puesto a disposición de los sectores más afectados por el Covid ayudas por valor de 35 millones de euros para paliar los efectos de la crisis económica.
Del mismo modo, la delegada del Gobierno ha lamentado que la brecha de género en el empleo se ha incrementado hasta máximos de 2007, a cierre de 2020 la tasa de paro femenina estaba «cuatro puntos por encima» de la de los hombres y «hay un 15 por ciento más de mujeres que de hombres» en las listas de Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE).
También ha censurado que los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) afectan a entre un 1 y un 3,5 por ciento más de mujeres, a pesar de que en las plantillas de las empresas hay un 4 por ciento más de hombres, en el empleo a tiempo parcial las tres cuartas partes de los contratos están firmados por mujeres y la tasa de inactividad femenina supera en 10 puntos a la masculina.
Quiñones ha apostado por abordar las políticas públicas con perspectiva de género para acabar con «la discriminación que aún sufre la mujer» y que «se ha evidenciado de nuevo» en la crisis sanitaria, económica y social por la crisis sanitaria.
Por su parte, Aguirre ha denunciado que han surgido nuevos obstáculos a raíz de la pandemia, que ha aumentado las desigualdades, y la crisis ha afectado más a las mujeres, que han estado en primera línea de los cuidados.
También Consuelo Gutiérrez ha destacado «dos valores muy presentes en tiempos de Covid: el liderazgo femenino y el ‘trabajo invisible’ de las mujeres en el cuidado de la sociedad; y Marcano ha animado al colectivo feminista a mantener el «espíritu de arrojo y valentía».
Finalmente, Igual ha coincidido en que las mujeres han sufrido más la crisis de la pandemia «porque tenían peores empleos», ha reconocido que no se ha alcanzado la igualdad «aunque se están dado pasos», y ha abogado por «estar unidos» y «no ser conformistas» para alcanzarla.