Calvo dice que ‘a veces la mejor justicia es la peor política’ y defiende el indulto como contrapeso entre poderes
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha defendido este miércoles la constitucionalidad de la figura del indulto como instrumento también para «contrapesar» los poderes del Estado. Además, ha reivindicado la obligación del Gobierno de defender «el interés general» de todos los ciudadanos y ha avisado de que, cuando «un territorio presenta problemas», eso no se resuelve «solo con normas jurídicas» porque «a veces la mejor justicia es la peor política».
«El interés general es un concepto indeterminado, hay que construirlo con criterios flexibles, pero sobre todo con actitudes», ha asegurado durante el Foro de la Cadena SER Cantabria sobre ‘Equilibrio territorial y cohesión social’, en clara alusión al conflicto catalán, aunque en ese momento sin hacer referencia expresa a ello, ni a los a los indultos que el Gobierno está estudiando para los independentistas condenados por el procés, sobre los que el Tribunal Supremo se ha posicionado en contra.
En su reflexión sobre cómo lidiar con los problemas territoriales de un Estado compuesto como el español, la vicepresidenta ha defendido que no hay que tratar de solucionarlos buscando la «uniformidad», confrontando, ni eliminando las discrepancias, sino mediante la «lealtad» y la búsqueda del «interés general».
REIVINDICA EL CÓDIGO PENAL CUANDO ALGUIEN SE SALTA LA CONSTITUCIÓN
A este respecto, ha avisado de que cuando uno cree que su derecho a la autonomía política «está por encima», hasta el punto de saltarse la Constitución, se encuentra el Código Penal. «Lo hemos visto, es un país que sabe reaccionar en momentos delicados», ha reivindicado.
Eso sí, ha continuación ha criticado la postura de aquellos que, en defensa de la «unidad del Estado», ignoran a los que les «molestan». «Pues ese no es el interés general del Gobierno de España cuando un territorio tiene problemas, porque el interés general también pasa por los españoles que viven en ese territorio», ha justificado.
«Esto no se resuelve siempre solo con normas jurídicas. Decía el presidente Franklin que a veces la mejor justicia es la peor política, para tantos temas de la vida. A veces requiere actitudes de lealtad», ha explicado.
Aunque ha señalado que la primera de esas actitudes es «cumplir las normas», y que todo el mundo se sitúe «por debajo de la ley», ha añadido que «a partir de ahí, hay un elemento indeterminado que requiere actitudes», porque si no, «no hay forma absolutamente ninguna de seguir sacando nuestro país adelante».
Ya en el turno de preguntas, Calvo ha defendido que la figura jurídica del indulto es constitucional y que «existe para equilibrar y contrapesar poderes del Estado». «Los gobiernos llevan indultado desde que está en vigor la Constitución. Todos los días se indulta, en todas las democracias», ha afirmado.
Por ello, ha criticado que la oposición tache de «tropelía» los indultos, y ha asegurado que el motivo en realidad es que no reconocen la legitimidad del Gobierno para sus decisiones dentro de la legalidad. «Aquí hay todavía un déficit de soportar cuándo pierdes elecciones», ha apostillado.
LA SOLUCIÓN DEL PP FUE «EL DESASTRE DE LOS DESASTRES»
Además, ha argumentado que «la política debe afrontar la situación de Cataluña», de la que ha responsabilizado al PP, empezando por su campaña para recoger firmas contra el Estatut en 2006. «El PP tiene que afrontar la política en serio, no se puede tirar a la calle cuando las cosas no le gustan», ha denunciado.
Sobre todo, según Calvo, cuando fue esa campaña contra el Estatut la que comenzó a dar alas al independentismo, que ha derivado ahora, tras el referéndum ilegal del 1 de octubre, la declaración unilateral de independencia y las sentencias contra sus organizadores, en una situación que está «timoneando» el presidente Sánchez sin haberla provocado.
«Aquello no era nuestro, pero no escurrimos el bulto», ha asegurado, para añadir que el Gobierno ha «huido ni un solo minuto» de la situación que existe en Cataluña, e intenta que sus obligaciones políticas no estén «sobre los hombros del poder judicial sino de la política».
Posteriormente, en una comparecencia ante los medios, Calvo ha vuelto a defender que para resolver este conflicto «no hay más vías» que el diálogo, porque ya se ha demostrado que la alternativa que defendió el PP «no ha funcionado». «Ha sido el desastre de los desastres.
Además, ha recriminado al PP que a pesar de ser «parte del problema», no quiera ser «parte de la solución». «Es una desgracia, en lugar de hacer lo que hace el PSOE que tenemos acreditado que sabemos movernos en las horas importantes», ha defendido.
«El PSOE está en las antípodas del independentismo y aún así tenemos que seguir haciendo algo y es que queremos la unidad territorial de nuestro Estado, una Cataluña en España», ha enfatizado.
EL PSOE, DETRÁS DE SÁNCHEZ
Asimismo, sobre las discrepancias internas en el PSOE, Calvo ha asegurado este miércoles que no le preocupan porque más allá de las opiniones libres de cada uno, todo el mundo sabe «perfectamente cómo funcionan las cosas», y que «primero están los órganos» del partido».
«Nuestro secretario general es el presidente del Gobierno, y en situaciones muy complejas, el PSOE está detrás de lo que es una competencia del Gobierno de España cuando toque decidirla, como ha dicho el presidente», ha garantizado.
Así, ha recalcado que en su partido saben que aunque cada uno opine lo que quiera, luego hacen lo que digan los órganos. «Y mucho más cuando nuestro secretario general es el tercero que tenemos presidiendo el Gobierno», ha insistido.
En este sentido, ha asegurado que aunque hacen primarias durísimas que «duelen» y se enfrentan porque son «a raja tabla democráticos», luego cierran filas cuando toca y se ponen todos detrás de Sánchez. «Sabemos perfectamente cómo funciona la cosa», ha aclarado.