El paro baja en 1.333 personas en julio en Cantabria, un 3,4%
Los trabajadores en ERTE se reducen en 1.718 personas
El número de parados registrados en las oficinas de empleo en Cantabria cayó en 1.333 personas en julio, un descenso del -3,4% respecto al mes anterior, dos puntos inferior a la bajada media nacional del -5,4%
La bajada del paro en Cantabria es la quinta más moderada de las comunidades, todas con descensos en el desempleo en el séptimo mes del año.
Además, en Cantabria hubo 1.830 parados menos, un -4,6%, en relación con julio de 2020, nuevamente por debajo del recorte medio del -9,45%, y el cuarto descenso más contenido de las regiones.
De este modo, Cantabria cuenta con 37.877 desempleados en el séptimo mes del año, según ha informado este martes el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
En España, el número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) bajó en 197.841 desempleados en julio (-5,47%), lo que supone la mayor caída en cualquier mes de la serie histórica y supera las de los meses de mayo y junio que también cerraron con caídas récord.
Así, se trata del tercer mes consecutivo en el que el paro registra récord de descensos. En mayo se había experimentado la mayor caída de la serie, de 129.378 personas, junio superó esta cifra, acercándose a una reducción de 167.000 personas, y ahora julio lo ha vuelto a hacer.
En julio, el paro en Cantabria bajó en todos los sectores económicos, fundamentalmente en servicios, con 977 desempleados menos. Más moderadamente lo hizo en la industria (-158), construcción (-51) y agricultura (-27), así como en el colectivo sin empleo anterior (-120).
Con todo, el sector servicios sigue aglutinando al 75% de los demandantes de empleo en la región al sumar esta actividad económica 28.090 desempleados, seguido del colectivo sin empleo anterior (3.505), la industria (con 2.854 parados), la construcción (2.753) y la agricultura (675).
Más de la mitad de las personas apuntadas al paro en Cantabria en el séptimo mes del año eran mujeres, 21.487, frente a 16.390 hombres, y el grueso del total tenían más de 25 años (36.266, respecto a 2.611 menores de dicha edad).
Entre el primer grupo, los mayores de 25 años, eran más numerosas las mujeres (20.321 frente a 14.945 hombres), mientras que en el segundo (los menores de 25), eran mayoría los hombres aunque con menor diferencia (1.445 respecto a 1.166).
Cantabria gana 6.062 afiliados a la Seguridad Social
La Seguridad Social ganó 6.062 afiliados en Cantabria en julio respecto al mes anterior, una subida del 2,7%, la segunda mayor por comunidades tras Baleares (4,4%) y superior a la media del país del 0,47%, según ha informado el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
En términos interanuales, Cantabria registró una subida del 4,1%, correspondiente a 8.960 afiliados más, en este caso en línea con el conjunto nacional (4,29%).
Con estos datos, el número global de ocupados se situó en la región en el séptimo mes del año en 227.230.
Del total de afiliados a la Seguridad Social en Cantabria, el grueso –184.124– pertenecen al Régimen General, de los que 775 se incluyen en el sistema especial del sector agrario y 4.884 en el del hogar.
En cuanto al resto de cotizantes cántabros, 41.800 son autónomos y 1.306 trabajadores del mar.
2.357 trabajadores en ERTE
El número de trabajadores en expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en Cantabria alcanzó a último día de julio los 2.357, lo que supone 1.718 menos que en junio, según ha informado este martes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Del total de trabajadores afectados por ERTE al cierre del mes en la comunidad, 1.337 son mujeres y 1.020 hombres. Por tipo de suspensión, 1.469 se vieron afectados por una total y 888 por parcial.
En España, el número de trabajadores en ERTE se situó a 31 de julio en 331.486 personas, lo que supone 116.439 trabajadores menos que en junio según la fecha de alta del expediente y 54.719 menos en función de la fecha de solicitud del mismo.
El Departamento que dirige José Luis Escrivá ha explicado que las fechas de solicitud del ERTE y la de sus efectos pueden ser distintas debido a que existe una «cierta disparidad» entre la fecha de notificación y la fecha en la que produce efectos. Así, puede ocurrir que una empresa comunique a la Seguridad Social un ERTE para su plantilla en el mes de julio, aunque tenga efectos en una fecha anterior, por ejemplo en mayo.
En todo caso, el Ministerio ha destacado que las cifras de trabajadores en ERTE asociados al Covid se situaron en julio en su menor nivel desde el inicio de la pandemia. Desde mayo de 2020, cuando 3,6 millones de trabajadores estaban en ERTE, más del 90% ya lo han abandonado.
De los 331.486 trabajadores que estaban en un ERTE en julio, 97.586 estaban suspendidas a tiempo parcial. Por su parte, cerca de dos tercios de los trabajadores en ERTE registrados el último día de julio (216.695 trabajadores) están incluidos en las modalidades de ERTE que conllevan exoneraciones en las cotizaciones.
Dentro de esas nuevas modalidades, 147.376 trabajadores se encuentran en ERTE con exoneraciones especiales para sectores ‘ultraprotegidos’ y su cadena de valor, mientras que 62.823 se encuentran en un ERTE de limitación de la actividad y 6.496 en un ERTE de impedimento de actividad.
Según Seguridad Social, todas las modalidades han terminado el mes de julio con la cifra más baja desde que comenzó la pandemia. Fuera de estas modalidades, ya sin exoneraciones, hay otras 114.791 personas que siguen en ERTE de fuerza mayor o ERTE por causas organizativas o de producción.
SE CONCENTRAN EN HOSTELERÍA Y ALOJAMIENTO
Dos actividades, de las cien registradas, concentran el 40,3% de las personas en ERTE: servicios de comida y bebidas (hostelería), con 78.015 trabajadores en ERTE, y servicios de alojamiento, con 55.443 trabajadores protegidos.
En total, el número de trabajadores que figuraban en un ERTE en el mes de julio representaban el 2,2% del total de afiliados al Régimen General, sin contar sus sistemas especiales.
Las actividades con mayor porcentaje de sus afiliados en ERTE son las agencias de viaje (39,77% del total de sus afiliados); el transporte aéreo (22,4%) y servicios de alojamiento (16,3%), todas ellas incluidas entre los sectores ‘ultraprotegidos’ por los ERTE.
En términos absolutos, la actividad con mayor número de trabajadores en ERTE es el servicio de comidas y bebidas (hostelería), con más de 78.015 afectados, seguido de los servicios de alojamiento (55.443), del comercio minorista (28.661 empleados), del comercio mayorista (17.183), agencias de viaje (15.536), actividades deportivas y de entretenimiento (12.857 afectados) y transporte aéreo (7.915 trabajadores en ERTE).
Por regiones, Las Palmas es la provincia que presenta un mayor porcentaje de afiliados bajo alguna modalidad de ERTE, con el 8,6% de sus afiliados protegidos. Le sigue Santa Cruz de Tenerife, con un 7,23%, y Baleares, con un 5,4% de sus trabajadores en ERTE.
En el otro extremo se sitúan las provincias de Castellón, Guadalajara, Murcia, Ciudad Real, Huelva y Cuenca, que cuentan con menos de un 1% del total de sus afiliados en un ERTE.
CONTRATOS
La bajada del desempleo en julio se vio acompañada de un aumento de la contratación del 3,18% ya que se rubricaron en la región 26.277 contratos, lo que supone 811 más que en junio, superior a la media nacional (2,2%).
Además, Cantabria sumó 3.780 contratos más que en julio de 2020, un 16,8% más, en este caso por debajo del conjunto del país (19,67%).
De los 26.277 contratos rubricados en junio, solo el 5,6% fueron indefinidos (1.479) mientras que el resto, 24.798, el 94,37%, tenían carácter temporal.
La contratación indefinida cayó un -3,5% en Cantabria en términos mensuales, con 54 contratos menos, menos que en todo el país (-4,2%); mientras que en comparación con julio de 2020 se incrementó un 7,49%, con 103 contratos más, diez puntos menos que en el Estado (17,29%).
Por su parte, los contratos temporales repuntaron un 3,6% en julio en Cantabria respecto a junio, con 865 más, más que la media nacional (2,9%). En el interanual, la subida de la comunidad fue del 17,41%, con 3.677 contratos más en la región, nuevamente inferior a la del conjunto de España (19,9%).