La Universidad también gestiona la búsqueda de empleos
La UC se acredita para intermediar entre empresas y titulados universitarios
La Universidad de Cantabria se ha unido al pequeño grupo de universidades españolas que cuentan con una agencia de colocación. Desde el pasado mes de marzo, unas 137 empresas, entidades y departamentos de la propia UC se han dirigido a la agencia ofertando puestos de trabajo de perfil universitario, y sobrepasan ya el millar los demandantes de empleo que tiene registrados.
Cuando hace veinte años la Universidad de Cantabria dio el paso de crear un centro de orientación para sus estudiantes y titulados que buscan empleo, tendió un puente hacia el mercado laboral que el tiempo ha consolidado. Y lo hizo anticipándose a las normativas estatales y autonómicas que acabarían regulando las acciones formativas en las empresas. Hoy suma 1.414 convenios con empresas de dentro y fuera de la región y en el último año académico han sido más de 600 las que han acogido a estudiantes en prácticas.
Pero faltaba dar un paso más en esa tarea que la Universidad había asumido precozmente para asesorar a sus alumnos en el difícil tránsito hacia el mercado de trabajo. Quedaba convertirse en auténticos intermediarios entre las ofertas laborales de las empresas y los aspirantes a un empleo. Ese paso lo dio finalmente en marzo, acreditándose ante el Servicio Cántabro de Empleo como agencia de colocación.
Una iniciativa poco común
No son muchas las universidades que han llevado su implicación para facilitar trabajo a sus egresados hasta el punto de convertirse en agencia de empleo. En España, salvo las andaluzas y alguna catalana, ninguna otra ha tomado la iniciativa que ahora ha asumido la Universidad de Cantabria. Un paso lógico, porque responde al espíritu que animó en su día a la creación del COIE (Centro de Orientación e Información de Empleo). “Precisamente porque una de las funciones del COIE es la de colaborar en la búsqueda de empleo de nuestros estudiantes, no solo con el asesoramiento o la información sino también logrando la inserción laboral de manera efectiva. Y nada mejor que ser agencia de colocación para conseguir ese objetivo”, explica Consuelo Arranz, vicerrectora de Estudiantes y Emprendimiento”. “Ahora ya podemos canalizar ofertas de empleo que interesen a nuestros estudiantes y poner en contacto a la empresa con el estudiante para conseguir ese objetivo”, subraya.
El destinatario del nuevo servicio que de forma gratuita oferta la Universidad es muy amplio. “En principio, la agencia de colocación está abierta a todo tipo de titulaciones e incluso a gente sin estudios, pero está claro que tenemos un enfoque hacia nuestros universitarios”, señala José Vicente Fernández, director del COIE. “Sin embargo, entre los que ya se han registrado tenemos candidatos de todo tipo, incluso egresados de otras universidades. También tenemos con módulos profesionales. Lo que ocurre es que las empresas, al identificarnos como universidad, lo que vienen a ofrecer suele tener un perfil universitario”, concluye.
Los datos confirman el interés despertado por esta Agencia de Colocación de la UC, a pesar de la corta trayectoria. Desde su entrada en funcionamiento superan ya el millar los demandantes de empleo registrados y son 137 las empresas y entidades que se han dirigido a la agencia, incluyendo 23 departamentos de la propia Universidad que contratan personal para los proyectos de investigación. Hasta finales de septiembre había ofertados 392 puestos de trabajo, y eran 42 los contratos formalizados, de los que, siguiendo la tónica actual del mercado de trabajo, solamente uno ha sido de carácter indefinido.
La Agencia no se limita a cruzar la información entre las empresas que ofertan un empleo y los posibles candidatos a ocuparlo. También sugiere o recomienda posibles cambios en las ofertas para que se adecúen mejor a las necesidades que expresan las empresas en sus peticiones, informándoles de que se pueden cubrir también con otras titulaciones, o de que la oferta no está en el rango retributivo adecuado para el perfil profesional que se pide. Se trata, en definitiva, de lograr que la que la inserción laboral sea lo más exitosa posible.
Una Feria de Empleo
En esta misma línea de lograr una incidencia real sobre el mercado de trabajo se enmarca otra de las iniciativas que la UC va a poner en marcha el próximo mes de noviembre. Los días 15 y 16, los vestíbulos de las Facultades de Derecho y de Ciencias Económicas acogerán su I Feria de Empleo. Hasta ahora, lo que se venían realizando en el campus eran encuentros en los que las empresas participantes se daban a conocer a los estudiantes, para una futura demanda de empleo. Pero esta vez las empresas participantes deberán acudir con al menos una oferta de trabajo real. La Feria tendrá una prolongación virtual, a través de la web del COIE, hasta el 17 de noviembre.
Formar en habilidades
La Universidad es consciente de que la formación académica del candidato muchas veces no basta para ocupar eficientemente un puesto de trabajo y que las empresas valoran cada día más aspectos que tienen que ver con habilidades y competencias que van más allá de los conocimientos técnicos. Cuestiones como la creatividad, la capacidad de iniciativa y de liderazgo, adaptarse a trabajar en equipo o saber hablar en público son aspectos que pueden resultar determinantes para acceder a un puesto de trabajo o para proyectarse profesionalmente. Por ello, el COIE viene programando cursos y conferencias para formar a sus estudiantes en estas habilidades y competencias extraacadémicas. Hasta final de año, contempla la impartición de un curso sobre “Habilidades sociales para el empleo” y otro que lleva por título “La era de los valientes”. Esta formación en competencias se completará con dos conferencias, “Cómo liderar con el cerebro”, cuyo ponente será Leandro Fernández Macho, y “Querer es poder”, a cargo de Aitor Francesena. Se trata de dotar a los estudiantes de las herramientas adecuadas para hacer frente a una realidad en continuo proceso de cambio porque, como reconoce Consuelo Arranz, “estamos formando a personas que van a desempeñar en el futuro unos trabajos que ahora ni siquiera imaginamos”.