‘El PP está en las mejores condiciones para ganar las elecciones’

Tras la intervención del vicepresidente cántabro Pablo Zuloaga en el Círculo Empresarial de Cantabria Económica, llegó el turno de la presidenta del PP local, María José Sáenz de Buruaga que, según muchas encuestas podía convertirse en la candidata más votada en las próximas elecciones regionales. En la charla, aclaró que su objetivo es doble: ganar los comicios y gobernar en solitario, e impedir que se repita una nueva coalición PRC-PSOE. En cuanto a su propuesta de gobierno, sostuvo que los Presupuestos de Cantabria dan para mucho más, entre otras cosas, para bajar impuestos.

Tras dos etapas consecutivas de gobierno de coalición PRC-PSOE bajo la presidencia de Miguel Ángel Revilla, el optimismo ha resucitado en el Partido Popular cántabro, aunque con muchas cautelas. La candidata popular, María José Sáenz de Buruaga aventuró en la última edición del Círculo Empresarial de Cantabria Económica que los próximos comicios supondrán el “ocaso político” de Revilla, respaldada por los sondeos electorales de los que dispone su partido, como el confeccionado por Metroscopia, que prevé que el PP obtendría el 34,9% de los votos en Cantabria, un porcentaje que le depararía entre 13 y 14 escaños, recuperando el carácter de primera fuerza. “Puedo asegurar en este momento que el Partido Popular está en las mejores condiciones para ganar estas elecciones”, dijo.

De confirmarse los resultados de esta encuesta, los regionalistas cosecharían su peor resultado en las urnas desde hace dos décadas, aunque mantendrían una base solida del 23,4% (unos nueve escaños, según los datos del PP), que podrían serle suficientes para gobernar si el PSOE saca algún escaño más de los que tiene ahora (la encuesta indica que obtendrá entre uno y dos más) y entra en la Cámara regional la coalición Podemos-IU, que está al borde del 5%, el umbral mínimo para acceder.

Buruaga se apoyó en otro dato para avalar el supuesto deseo de cambio político en la región: “El 80% de los ciudadanos de Cantabria considera que el tiempo de Revilla en política ya ha terminado. Cuando la sociedad piensa eso de un líder, creo que hay que saber irse”, sostuvo.

El resurgir de los populares en Cantabria sería producto de varias circunstancias. El PP absorbería casi todos los votos de Ciudadanos –los naranjas dejarían de tener representación en el Parlamento regional– y se contendría el crecimiento de Vox, que pasaría de tener dos escaños a cuatro como máximo.

Los datos que manejan los populares prevén que el PP también recibirá el apoyo de votantes anteriores del PRC, especialmente en las zonas más rurales. “La Cantabria rural está muy cansada, muy agotada y muy decepcionada con el PRC”, aseguró.

En cualquier caso, las posibilidades de gobernar del PP pasarían por sumar los escaños de Vox, si fueran suficientes, o conseguir el apoyo o la abstención del PRC, algo que no parece fácil, habida cuenta de que la presidenta del PP no dio ninguna verosimilitud a la hipótesis de pactar con el PRC entregándole a Revilla la presidencia.

Buruaga subrayó que la situación del PP tanto en Cantabria como a nivel nacional es “muy diferente” a la de los últimos comicios. “Cuando vienen curvas, los ciudadanos necesitan referentes de estabilidad, moderación, seguridad, certeza y gestión, y quien mejor representa eso ahora es el Partido Popular”, dijo.

Preguntada si para alcanzar esa mayoría absoluta que ser necesita para la investidura recurriría a VOX, Buruaga aseguró ser una persona a la que no le gusta el extremismo ni las posiciones radicales, pero tampoco los discursos del miedo, especialmente cuando “son entonados” por líderes políticos que llegan a acuerdos con los “enemigos” del país, “A mí no me va a decir Pedro Sánchez con quién puede pactar el Partido Popular, cuando ha pactado con Bildu y Esquerra Republicana”, exclamó.

‘Hay margen económico’

L candidata del PP quería exponer ante los empresarios su visión de Cantabria y su programa, bajo la tesis de que el desenlace en una partida de cartas no viene determinado por las que se reciben sino por cómo se administran. Recordó que Cantabria es la comunidad más beneficiada por el actual modelo de financiación autonómica y sostuvo que hay margen de maniobra suficiente para gobernar mejor. “Madrid recibe menos para sostener sus servicios que lo que recibe nuestra comunidad. No creáis a aquellos políticos que os dicen que no se pueden bajar los impuestos mientras no recortan en gasto público”, aseveró María José Sáenz de Buruaga.

La presidenta del PP de Cantabria explicó que el Gobierno regional dispone ahora de casi 1.300 millones de euros más de los que manejó el Gobierno del PP hasta 2015 en el que ella fue vicepresidenta. Puso como ejemplo las contrataciones del Servicio Cántabro de Salud, que administra 1.100 millones de euros, frente a los 800 de los que ella dispuso como consejera de Sanidad, una época en la que, comparó, había listas de espera más reducidas, la Atención Primaria estaba más descongestionada y había un programa de cribado de cáncer de colon “que funcionaba”. “La financiación es importante, pero a pesar de que ahora es mayor, las cosas no se hacen mejor”, insistió.

‘No creáis a aquellos políticos que os dicen que no se puede bajar los impuestos’

También dio por sentado algo que reconoció Revilla en su momento, que la autonomía cántabra sería imposible si se aplicase la fórmula del primer borrador de expertos solicitado por la ministra Montero para sustituir el actual marco financiero, “que quitaba 400 o 500 millones de euros al año” a la región.

Entre sus objetivos mencionó agilizar y simplificar los procedimientos para quienes pretendan ampliar o montar una empresa, algo completamente distinto a lo que, según ella, promueve el PRC tras el escándalo por la trama de Carreteras. Mostraba así su escasa conformidad con las medidas que ha puesto en marcha el Ejecutivo regional para reforzar el control sobre los expedientes de contratación y evitar el fraude.

Buruaga reiteró que Cantabria debe impulsar “de una vez por todas” proyectos estancados, como la variante de Torrelavega, entre Barreda y Sierrapando, que debería haber concluido en 2021, lo que impide resolver los atascos veraniegos en el kilómetro de calzada que comparten la Autovía del Cantábrico y la de la Meseta. “No podemos tardar cinco años en hacer eso”, dijo. “Y todavía seguimos sin tener el tercer carril de la A-8 con Bilbao”, añadió.

Para avalar su capacidad de impulsar proyectos de gran envergadura, mencionó la solución buscada en su etapa de consejera de Sanidad para finalizar la última fase de Valdecilla, una obra que se había enquistado y que las adjudicatarias se negaban a continuar si no cobraban un sobrecoste muy importante. Recordó que tuvo la valentía de rescindir aquel contrato y buscar una solución a través de una colaboración público-privada que se adjudicó la UTE formada por Ferrovial y SIEC. Ambas financiaban la obra restante a cambio de un canon anual durante veinte años y la explotación de una veintena de servicios no sanitarios que ya estaban en manos privadas.

Según la candidata del PP, de no ser por la insistencia y la labor de su partido, las reformas del hospital no se habrían acabado nunca. “No se hizo en tres legislaturas, sino en 16 meses. Es el contrato mejor hecho en la historia de esta autonomía”, enfatizando que se había realizado solo con personal del Gobierno, sin acudir a ningún despacho especializado externo.

‘Queremos hacer un programa electoral en el que Cantabria se reconozca’

La presidenta del PP resaltó en su charla en el Círculo Empresarial de Cantabria Económica que “las infraestructuras de comunicación siguen siendo el talón de Aquiles de nuestra economía. ¿Cómo hablar del tren Santander-Bilbao si no estamos ni en el Corredor Atlántico, uno de los nueve que forman la red transeuropea de transportes? No hemos hecho los deberes. Además, llevamos años sin resolver el tren del AVE con Madrid y la autovía Aguilar-Burgos”, enumeró.

En materia fiscal, concluyó que la región tiene margen para reducir progresivamente el impuesto de patrimonio hasta suprimirlo, asegurando que tiene un impacto recaudatorio “prácticamente nulo” (18 millones de euros) y, sin embargo, “ahuyenta la inversión”. En su opinión, todos los estudios de competitividad fiscal dicen que “nos interesa [suprimirlo] estando al lado del País Vasco y cerca de Navarra”.

Aspla: ‘El Gobierno no se puede quedar mirando’

Buruaga cree que hay gobiernos que “están inmersos en una carrera para desprestigiar a la empresa y al empresario”, cuando la estrategia debería pasar, en su opinión, por ayudar a crear un entorno que favorezca la actividad productiva, la inversión, el emprendimiento y la innovación. “La Administración no puede ser un freno ni un detractor”, resumió.

En la charla criticó que el Gobierno cántabro haya “asistido como un agente pasivo en un conficto como el que ha vivido Aspla”. La empresa, perteneciente al Grupo Álvarez ha sufrido recientemente una huelga que duró 50 días en la que los trabajadores buscaban mejorar las condiciones laborales. “No puede ser que un gobierno se quede mirando a ver qué pasa. El diálogo social es muy importante, pero algún papel hay que adoptar”, defendió.

En su charla remarcó que Cantabria cuenta con empresas “extraordinarias” y con una industria “potentísima”, pero el problema, dijo, radica en que no dispone de política empresarial ni industrial. “Debemos trabajar juntos en eso porque no veo apoyo a los empresarios en nada, ni en impuestos ni en formación de recursos humanos, ni en espacios o dotaciones industriales”, reprochó.

De acuerdo con su análisis, Cantabria es una comunidad autónoma “maravillosa” y “con recursos”, pero que está “en desventaja competitiva con el resto del país” y aseguró que, en PIB por habitante es de las regiones que peor evolución han tenido en este siglo. “Todas las previsiones dicen que en 2023 tampoco va a recuperar el nivel previo a la pandemia”, comentó.

Pese a las desavenencias con el gobierno cántabro formado por PRC y PSOE durante la legislatura que está por terminar, Buruaga reconoció en el Círculo Empresarial que al inicio de la crisis sanitaria hubo sintonía. “Lo primero que hice cuando empezó la pandemia fue llamar a Revilla para hacerle llegar que aquí me tenía para lo que necesitase”, recordó. De hecho, confesó que en ese momento, por parte del presidente hubo comunicación, diálogo y disposición a escuchar al PP.

De cara a las elecciones, Sáenz de Buruaga reveló que los populares están haciendo un esfuerzo por escuchar a la sociedad. “Queremos hacer un programa en el que Cantabria se reconozca. Estamos recogiendo aportaciones de todos vosotros”, finalizó.

David Pérez