Guillermo Sistal (LIS Data): ‘El futuro será para los que se lleven mejor con los robots’
La primera edición del año del Círculo Empresarial de Cantabria Económica sirvió para divulgar los sorprendentes avances de la inteligencia artificial, en colaboración con Clúster Tera, que agrupa las empresas TIC de Cantabria. El responsable de desarrollo de negocio de Lis Data Solutions, Guillermo Sistal, expuso lo que está consiguiendo la inteligencia artificial en el funcionamiento de vehículos autónomos, en los procesos industriales o a la hora de recolectar y seleccionar automáticamente los tomates de un invernadero, y dejó claro que, grandes o pequeñas empresas, todas deberán tener en cuenta esta nueva realidad.
La Inteligencia Artificial (IA) y el análisis de datos han venido para quedarse y no solo en la robótica o en las tecnologías más disruptivas. Cada vez es más frecuente en la industria, la logística o la salud y las empresas que la desarrollan aumentan cada año su facturación y sus plantillas. Algunas están entre nosotros, como la consultora tecnológica cántabra Lis Data, que en dos años ha duplicado el número de empleados (ya tiene más de 80) y ha cerrado el último ejercicio con una facturación de cuatro millones de euros.
Su responsable de desarrollo de negocio, Guillermo Sistal, fue el protagonista de la primera edición del año del Círculo Empresarial de Cantabria Económica, que se celebró en las instalaciones de la destilería Siderit, en colaboración con Clúster Tera. Sistal desgranó el impacto que ya está teniendo la Inteligencia Artificial en muchos ámbitos y las expectativas de cara al futuro.
La IA contribuirá a la desaparición de tareas analógicas y por tanto, a la extinción de muchos de los perfiles profesionales actuales, pero Sistal se mostró convencido de que hará surgir otros empleos. “El trabajo del futuro será para las personas que mejor sepan llevarse con los robots y con la inteligencia artificial”, auguró.
Agricultura e industria
Puede que no coincida con lo que suponemos, pero uno de los sectores donde tiene más penetración la inteligencia artificial es el agrícola. Sistal puso como ejemplo las plantaciones de tomates, donde se usan máquinas capaces de moverse por invernaderos y recoger las hortalizas seleccionando las que mejor se ajustan a las necesidades de mercado, teniendo en cuenta parámetros como la colorimetría, el tamaño o el grado de madurez, para lo que utiliza sensores ópticos.
Una de las muchas aplicaciones de la inteligencia artificial es la detección de anomalías en procesos industriales. A mediados del año pasado, Lis Data comenzó a participar en el proyecto Innotwin, una iniciativa encabezada por un consorcio de cuatro empresas para desarrollar una plataforma con la que virtualizar todos los sistemas de una planta de fabricación en tiempo real, desde los acopios hasta la valorización de los residuos.
Su objetivo era medir y corregir su desempeño, así como anticiparse a posibles paradas inesperadas de producción o a tiempos de inactividad superiores a los previstos, que aumentan el coste del producto final. La labor de Lis Data consistió en establecer algoritmos y métodos para generar un perfil específico de maquinaria, crear metodologías predictivas para anticipar las averías y sugerir acciones de mantenimiento que ayuden a prevenirlas.
Lis Data ha diseñado un algoritmo para predecir el ictus y el párkinson
Con la ayuda de esta interfaz virtual, las plantas industriales pueden simular todo tipo de escenarios y comparar la repercusión de cada uno de ellos, una forma de facilitar las decisiones de gestión.
Guillermo Sistal hizo referencia también a las aplicaciones de la IA en el ámbito de la logística utilizando varios ejemplos: “Podemos procesar imágenes de manera automática, hacer conteo de materiales y realizar inventarios en almacenes. Además, nos ofrece la posibilidad de colocar los materiales de forma que aprovechemos mejor los espacios”.
También mostró las ventajas de aplicar IA en el diseño de piecería industrial: “Podemos escanear planos y generar una pieza tridimensional”.
Si hay otro sector que puede beneficiarse claramente de la inteligencia artificial es el sanitario. En su compañía han diseñado un algoritmo capaz de predecir el riesgo de padecer ictus o párkinson antes de que los pacientes lleguen a desarrollar dichas enfermedades. “Se analiza a través de una serie de mapeados cerebrales con la colocación de electrodos en el cerebro. Así podemos adelantarnos y saber cuándo pueden aparecer”, aseveró.
Las cirugías, según Sistal, también se verán beneficiadas. “En Valdecilla hay robots Da Vinci que permiten hacer operaciones muy complejas con una precisión altísima y, en el futuro, estas intervenciones se podrán hacer de forma autónoma”, auguró.
De hecho, consideró que en algún momento, probablemente dentro de diez o quince años, se harán descubrimientos de nuevas moléculas farmacéuticas “sin intervención humana”.
Un algoritmo desarrollado por Google ha calculado la forma de 200 millones de moléculas, algunas de ellas clave para entender enfermedades tan frecuentes como el alzheimer o el párkinson. “De esta manera se podrán comprender mejor las enfermedades, desarrollar nuevos medicamentos y aumentar su precisión”, explicó.
La inteligencia artificial también puede ser una herramienta efectiva en el abordaje de pacientes con esclerosis múltiple. El responsable de desarollo de negocio de Lis Data resaltó el caso de una mujer afectada por esa enfermedad a la que se le colocaron sensores por todo el cuerpo, que captan información sobre los movimientos que realiza. A través de “unos mecanismos configurados gracias a la inteligencia artificial” es posible enviar señales para que el movimiento sea mucho más fluido y natural y, a fin de cuentas, recupere paulatinamente su movilidad.
Vehículos autónomos
En el mundo de la automoción también se abre un futuro repleto de posibilidades para la IA. Sistal utilizó como ejemplo una tecnología que puede identificar vehículos en la carretera al tiempo que circulan, diferenciando los coches de los camiones, reconociendo las matrículas o la velocidad a la que circulan y aportando la cifra exacta de cuál es el flujo por hora en un tramo en concreto. “Estos programas avanzan muy rápido”, apuntó.
Ya nadie duda de que en un futuro próximo se puedan comercializar vehículos completamente autónomos, ya que hay varias marcas involucradas en este tipo de proyectos, entre ellas Tesla.
De hecho, los prototipos de la empresa de Elon Musk serán capaces, según Sistal, de aprender en base a su conducción, de forma que la compañía podrá generar actualizaciones a partir con esas experiencias y transmitirlas por internet a toda su flota de coches de manera simultánea.
Ante el debate ético que plantea la posibilidad de que los vehículos autónomos lleguen a provocar un accidentes y cómo atribuir la responsabilidad moral, Sistal se refirió a la marca italiana Ferrari: “Allí no solo trabajan ingenieros de desarrollo y científicos de datos. También incorporan a su plantilla filósofos para abordar estos temas”, dijo.
‘Cualquier empresa puede utilizar la inteligencia artificial’
Lis Data insiste en advertir que cualquier empresa, independientemente de su tamaño, puede usar tecnologías de inteligencia artificial. Como ejemplo, Guillermo Sistal se refirió, sin citarla, a una compañía de reparación de vehículos, a la que había sugerido el empleo de cámaras de visión artificial para detectar los rayones y abolladuras, complementado con un software que realiza los presupuestos de reparación del coche de forma automática.
También quieren desmontar la creencia de que se requieren grandes inversiones para acceder a estas tecnologías. “No hay por qué hacer ensayos a gran escala. Se pueden hacer pruebas de concepto, con inversiones mucho más asumibles”, dijo.
Al aventurar cómo van a ser los próximos años señaló que la industria conectada 4.0, que ahora está en el objetivo de todas las compañías del sector, “busca aumentar la productividad de la empresa con los mismos recursos o menos”. En la siguiente generación, la industria 5.0 “ya no bastará con que sean más eficientes y fabriquen más. Su actividad tendrá que suponer algún beneficio para la sociedad”, pronosticó.