‘Inmobiliarias y promotoras serán los primeros en entrar en el metaverso’

La velocidad con la que la Inteligencia Artificial se está colando en todos los sectores productivos es vertiginosa, pero el crecimiento del metaverso tampoco parece tener límites. Así lo reflejó el protagonista de la última edición del Círculo Empresarial de Cantabria Económica, Francisco Calatayud. El fundador y director creativo de Binary Box Studios repasó algunos de los beneficios que puede suponer esta tecnología para las empresas y desgranó proyectos que ha llevado a cabo su compañía, como Singulive, un entorno virtual para disfrutar de conciertos en directo desde cualquier lugar, que se ha convertido en una línea de negocio paralela.

El mundo virtual es tan real como el físico. Esa fue una de las conclusiones a las que llegó Francisco Calatayud, fundador y director creativo de Binary Box Studios, en la última edición del Círculo Empresarial de Cantabria Económica, al analizar las infinitas posibilidades del metaverso. La realidad virtual borra los límites físicos. Permite participar en un concierto de música clásica, deambular por un museo, sentirse dentro de una discoteca o realizar simulaciones para aprender a manejar una máquina sin haber entrado en una fábrica. Solo es necesario equiparse con unas gafas especiales e inmiscuirse en ese mundo paralelo al de las cosas.

Este espacio tridimensional digital con el que es posible vivir experiencias con otros usuarios mediante avatares personalizados empieza a despertar el interés de las empresas, que vislumbran en esta herramienta oportunidades de negocio antes inconcebibles.

El metaverso permite ver un piso de forma virtual antes de ser construido

Calatayud analizó durante su exposición los sectores que primero se subirán al barco de los entornos virtuales: “Los estudios de arquitectura, decoradores e inmobiliarias van a ser de los primeros en entrar en el metaverso”, sostiene el fundador de la compañía.

Con esa herramienta, los potenciales clientes pueden ver en primera persona las viviendas en venta o alquiler y deambular por su interior virtualmente o visitar promociones inmobiliarias que aún no han pasado de ser un plano como si ya estuviesen construidas. Y lo pueden hacer desde cualquier rincón del mundo.

Se trata de un desarrollo interno que reconstruye al milímetro el aspecto real de las viviendas con la ayuda, también, de modelos 3D escaneados de los muebles y elementos decorativos. “Un comprador que está en Madrid puede quedar con un vendedor que está en Londres para ver el piso”, explicaba Calatayud en la charla mensual del Círculo Empresarial Cantabria Económica, que esta vez se desarrolló en las instalaciones de la destilería Siderit, en colaboración con el clúster TERA. 

Esta tecnología se podía disfrutar en ordenadores de sobremesa pero ya es posible hacerlo también con gafas de realidad virtual, que ayudan a una completa inmersión.

El nivel de interacción social va mucho más allá de lo que muchos atisban, debido a que las visitas incorporan chat de voz y avatares a los que poder dirigirse personalmente, detrás de los cuales hay personas reales. “Cuando hablas con el avatar del vendedor, el cerebro percibe esa realidad virtual como si fuese física”, explica.

Aplicaciones en industria

La industria también puede sacar mucho rendimiento del metaverso. Los operarios pueden utilizar esos entornos virtuales para aprender a manejar maquinaria complejas o peligrosas sin preocuparse por su integridad física. “Muchas escuelas ya lo están demandando”, indicó Calatayud.

Una clara demostración de su eficacia en la formación industrial es la app que ha diseñado este estudio cántabro para Beitxu Studios y Salesianos Deusto. Un simulador con el que los estudiantes aprenden a manipular una fresadora. Para conseguir la mayor fidelidad posible, Binary Box recreó una fresadora Kondia B500 y un panel de control Fagor.

Ese entorno virtual ofrece a los alumnos la posibilidad de realizar los ejercicios sin supervisión o en modo tutorial, ya que un monitor virtual les guía paso a paso en el desarrollo del ejercicio.

Una prueba de las muchas funcionalidades que ofrece el metaverso es el proyecto que ejecutó Binary Box para Talleres Oran. El estudio desarrolló un entorno virtual que permite visualizar los componentes diseñados por el equipo de producción antes de empezar a fabricarse.

Además, brinda la posibilidad de manipular las piezas por separado o por conjuntos, y está concebido para que varios técnicos puedan acceder simultáneamente a los modelos y compartir sus observaciones. De esa forma se facilita la detección precoz de los errores y una visión muy próxima al resultado físico final.

A raíz de la crisis sanitaria, Binary Box ideó una oficina virtual a la que se puede acceder con ordenadores de sobremesa. “Planteamos un espacio donde podíamos hacer sesiones de brainstorming en una pizarra virtual, presentaciones o ver modelos 3D. Lo desarrollamos para uso interno y resultó una respuesta ágil al confinamiento. La sensación que teníamos con nuestros avatares era la de estar trabajando junto a los demás compañeros”.

El responsable Binary Box está convencido de que muchas empresas comenzarán pronto a apostar por este modelo de oficinas digitales, como acaba de hacer recientemente Microsoft.

La ingeniería santanderina Acustican también ha encontrado la forma de sacar provecho al metaverso. La compañía de Francisco Calatayud le ha creado una app que combina realidad virtual y tratamiento acústico de salas y espacios. Se llama Ceronoise VR y permite mostrar a los clientes el funcionamiento de sus productos fonoabsorbentes como si ya estuviesen implantados en sus instalaciones.

Binary Box diseñó entornos con varios sistemas de audio holofónico con los que reproducir todas las fuentes de sonidos presentes en las estancias e incluyó algoritmos para el bloqueo y la atenuación acústica que producen tabiques y puertas. De esta forma, los usuarios pueden comprobar los cambios en el sonido ambiental que se producen al instalar los paneles fonoabsorbentes de la marca.

Singulive

La industria musical sufrió de lleno las consecuencias de la pandemia. Durante la cuarentena, el público tuvo que conformarse con ver a sus cantantes favoritos a través de una pantalla, pero Binary Box siempre creyó que podía ofrecer un plus y junto al promotor musical Javi Palacios creó Singulive, una plataforma nada convencional para disfrutar de conciertos en directo.

El proyecto revoluciona la manera en que se consume la música. No solo recrea con rigor los escenarios, sino que, con la ayuda de unas gafas de realidad virtual, simula a la perfección la experiencia de estar viendo al artista desde la primera fila de la sala. La experiencia inmersiva hace que los fans pueden sentir la música y el entorno de otros asistentes como si de verdad estuviesen en el concierto de forma física, aunque se encuentren sentados en el sofá de sus casas y en pijama. Además, pueden acudir a conciertos en compañía de sus amigos o de otros usuarios e interactuar con ellos.

En octubre, Singulive apareció como único producto de desarrollo español destacado en el apartado de realidad virtual en el prestigioso informe Entertainment and Media Outlook 2021-2025. RTVE Radio 3 ha sido uno de los primeros clientes en confiar en Singulive y Carolina Durante, Tanxugueiras, Victorias o Tremenda Jauría ya han mostrado su música a través de esta plataforma.

Para demostrar lo que implica usar Singulive, el director creativo de la compañía puso la herramienta a disposición de una asistente del Círculo Empresarial, que pudo disfrutar de una visita al teatro, a una discoteca, a un bar y a un concierto de música clásica sin moverse de la destilería de Siderit en Puente Arce. “Nosotros estamos proponiendo un modelo que consiste en cobrar por entrada, el mismo que se usa en salas de conciertos reales, y junto a esos tickets, vamos a vender merchandising, CD’s y vinilos”, explicó Calatayud.

Chef Virtual

Los propietarios de restaurantes y las escuelas de hostelería reúnen todas las papeletas para ser los siguientes en adentrarse en el metaverso. Binary Box ha desarrollado una plataforma de realidad virtual con la que se puede presentar su oferta culinaria a clientes interesados en planificar el banquete de una boda, comunión u otros eventos sin que tengan que acudir al establecimiento. Con ayuda de las gafas Oculus Quest, pueden resolver dudas y obtener una imagen cuidada de los platos, aunque no puedan catarlos.

A través de ese entorno virtual, las escuelas de hostelería pueden realizar presentaciones, cursos y masterclass. A su vez, los restaurantes pueden poner a disposición de los clientes una carta virtual con información detallada de cada plato.

La medicina tampoco se queda fuera de la ecuación. Una de las iniciativas que ha desarrollado Binary Box es un software para facilitar los diagnósticos a los médicos. Se trata de un gabinete virtual con el que se pueden revisar las resonancias magnéticas de los pacientes, observar recreaciones tridimensionales de los órganos o asistir a intervenciones quirúrgicas.

Si hay un sector en el que el metaverso cobra especial sentido es el cultural, donde el mercado pide cada vez más vivir experiencias innovadoras. Uno de los proyectos más significativos de Binary Box en este campo ha sido el Museo Virtual de Arte, dedicado a las grandes civilizaciones de Egipto, Grecia y Roma.

Los usuarios pueden caminar por el museo libremente y observar los lienzos, dibujos y esculturas con más detalle que en un museo físico. “Una de las obras que recreamos de forma virtual fue la Piedra Rosetta. La original, que está en el Museo Británico, se encuentra dentro de una urna. Como el museo nos proporcionó una digitalización en alta calidad, nosotros podemos exponer la piedra a un tamaño mucho más grande y sin urna. El que entra en el museo virtual ve la Piedra Rosetta con más claridad que en el museo real, y puede observarla de cerca sin que nadie le diga nada. Ya hay muchísimas empresas que se dedican a hacer exposiciones en el metaverso”, aclaró.

La compañía también desarrolló, en colaboración con el Ayuntamiento de Cangas de Narcea, un Museo del Vino virtual para su exposición en la Feria de La Ascensión. En aquel evento, el público pudo conocer todo el proceso de producción del vino con denominación de origen.

Los videoasistentes exploraron el museo original de forma totalmente virtual y pudieron contemplar el funcionamiento de las prensas de uva, escuchar el sonido de la fermentación al acercarse a la parte superior de los tanques y participar en el proceso de clarificación y filtrado del vino.

La plataforma también permitía vivir en primera persona el método tradicional de embotellado y el sistema automático actual.

Francisco Calatayud cree que el metaverso ofrecerá tantas posibilidades en el futuro que “incluso nosotros mismos tenemos dificultad para acotarlas”. Lo que tiene claro es que los avatares o identidades virtuales (ahora unos muñequitos) evolucionarán mucho en los próximos años y se ajustarán con gran precisión al aspecto real, y “nos vamos a ver en el metaverso con la misma naturalidad que nos vemos ahora”, vaticina.             

David Pérez