Un puente cafetero hacia Etiopía
Café Doctor Luisito abre una tienda en Santander para la venta de café etíope y alimentos orgánicos
Socialiland, una cooperativa sin ánimo de lucro, se dispone a dar sus primeros pasos con la apertura de una tienda-degustación en Santander en la que el producto estrella será el café traído de Etiopía, una variedad poco conocida en nuestro país. Café Doctor Luisito, el nombre de la marca es, también, el de la tienda, en la que se venderán otros productos orgánicos y se impartirán cursos sobre alimentación saludable.
En la trayectoria profesional y vital de Maribel Morencia hay un antes y un después de su descubrimiento de Etiopía. Hasta allí le llevó en 2010 su trabajo como directiva en una agencia de adopción internacional y, tras varias visitas, acabó por conocer la práctica totalidad del país. En esos viajes descubrió una gran cooperativa cafetera que se convirtió en su mejor aliado para crear en España un proyecto que conjugase el cuidado del medio ambiente y los principios solidarios del comercio justo.
De este impulso nació Socialiland, una cooperativa sin ánimo de lucro fundada en 2014 e integrada por dos socios, Maribel Morencia y Zacarías Abebe, a quien conoció como responsable del departamento de exportación en la empresa etíope Oromia Coffee Farmers Cooperative Union.
La idea inicial de importar café etíope, un gran desconocido en nuestro país, se ha ampliado a la venta de productos orgánicos y, con el nombre de Café Doctor Luisito están a punto de abrir una tienda-degustación en la calle Tetuán, de Santander. Un lugar donde los amantes del buen café podrán descubrir una experiencia nueva y que quiere ser, también, un centro de divulgación de iniciativas ligadas a la alimentación saludable.
La cuna del café
Que Etiopía sea el país natal de la planta del café dice mucho de la calidad de una materia prima que goza allí de las condiciones ideales para su cultivo, tanto en altitud como en temperatura. Este hecho explica la existencia de macrocooperativas como la de Oromia, una inmensa región cafetera en la que trabajan más de 1,3 millones de familias, que viven del cultivo y comercio del café.
Socialiland importa el café directamente de estas cooperativas de campesinos, que reinvierten sus beneficios en proyectos sociales, como escuelas, centros de salud, pozos de agua potable y carreteras. “Solo compramos café certificado orgánico y lo hacemos como comercio justo”, señala Maribel Morencia. A su vez, la cooperativa cántabra prevé reinvertir los beneficios que obtenga en proyectos sociales y medioambientales, tanto en el entorno cercano como en la propia Etiopía.
Cuando surgió la idea de importar café, el primer planteamiento de esta emprendedora fue hacerlo en colaboración con Dromedario, la empresa cafetera de origen cántabro que fue adquirida en 2001 por el grupo Baqué. Fue esta misma firma la que animó a Maribel Morencia a lanzar una marca propia, aunque el tostado se seguiría haciendo en las instalaciones que Dromedario tiene en la recta de Heras. “Nosotros –explica Morencia– realizamos todo el proceso, salvo el tueste, aunque en el futuro pretendemos convertirnos también en microtostadores”.
En cualquier caso, la ejecución de este proceso en Cantabria asegura que el consumidor recibirá el café siempre fresco.
Una tendencia en alza
La degustación de lo que se conoce como ‘café de especialidad’ es una tendencia poco implantada en España pero que, como muchas otras, no tardará en llegar. Se trata de cafés de una calidad superior a la que se comercializa habitualmente, un producto pensado para gourmets o para quienes simplemente quieran disfrutar de una experiencia sensorial mucho más intensa y con matices que no se encuentran en las marcas generalistas.
En los países anglosajones, en los del Norte de Europa y en Japón proliferan los establecimientos dedicados a esta gama premium del café, que debe cumplir unas condiciones muy específicas, como ser del tipo arábica, cultivarse a más de 1.000 metros de altura, con una recogida selectiva y un tueste en función de las características particulares de cada origen.
Todas estas condiciones se dan en el café etíope que es la base del proyecto de Doctor Luisito, un nombre elegido en homenaje al médico de cabecera de Maribel Morencia, un gran aficionado a esta bebida, y un guiño a las propiedades saludables del café.
“De momento, el único origen que importamos es Etiopía, pero no descartamos ampliarlo en el futuro con otros cafés africanos”, señala Morencia.
Además de la tienda, el café de esta cooperativa se vende es tres comercios de productos delicatessen y ecológicos de Santander, pero la intención de sus promotores es la de no diversificar mucho su distribución, para que se vincule más a su tienda, y utilizar la venta on line para llevarlo directamente al domicilio del comprador.
Talleres sobre productos orgánicos
Como sostener este negocio sobre la única base del café será un proceso lento, Maribel y Zacarías han pensado en convertir la tienda en un lugar de degustación y venta de una amplia gama de productos orgánicos: Bebidas (tés, refrescos, zumos naturales, chocolate…), quesos, panes, comidas para llevar (sopas, cremas, ensaladas y sandwiches), lácteos, aceites, embutidos, conservas de pescado y muchos otros productos elaborados en distintos puntos de España pero siempre con certificaciones ecológicas.
El local, de 72 metros cuadrados, no servirá solo para la degustación y la venta. También se utilizará para la celebración de catas, cursos y talleres en torno a la alimentación y la salud, porque la idea motriz de todo el proyecto es el compromiso de esta licenciada en Psicopedagogía, cuya actividad profesional siempre ha estado ligada a la gestión de entidades sin ánimo de lucro, vinculadas con la mejora del entorno social y el medioambiente. Y de paso, acercarnos un poco más a la cultura del café de calidad, una experiencia desconocida para muchos aficionados a esta bebida.
Jesús Polvorinos