Aprender a montar en bicicleta siendo adulto
Aprender a montar en bici es una experiencia única, La sensación de libertad y de moverse con rapidez es algo único. Ese momento deja huella en las personas y se recuerda toda la vida.
La edad más recomendable para aprender a montar en bicicleta es alrededor de los cuatro años, etapa en la que se desarrolla el sentido del equilibrio y resulta más fácil aprender. Pero por diversas circunstancias hay mucha gente que no tuvo la oportunidad de aprender en la infancia y no por ello tiene que renunciar a esta experiencia.
Siguiendo una serie de pautas y consejos se puede lograr aprender a montar en bicicleta en poco tiempo:
Tener la bicicleta adecuada. Debe ajustarse a la altura para proporcionar la seguridad y confianza necesaria. Por lo general una bicicleta con un cuadro más bajo, resulta más fácil de manejar.
Ajustar la bicicleta colocando el sillín a una altura que permita tocar el suelo ligeramente con los pies. Aunque esta no sea la posición óptima para un profesional, permite sentirse más seguro, fundamental en las primeras pedaladas.
Equipo de protección. Es imprescindible proteger la cabeza con un casco y muy aconsejable llevar guantes para evitar heridas en caso de caída.
Buscar el lugar adecuado para el aprendizaje. Debe ser amplio, llano y sin tráfico, como por ejemplo un parque, un parking vacío o algún carril bici con poca circulación. Los espacios con una sutil pendiente pueden ser muy útil para coger el primer impulso.
Familiarizarse con los frenos. Hay que presionarlos de forma suave con ambas manos. Saber cómo dominar y detener la bicicleta ayudará mucho a ganar confianza.
Aprender a equilibrarse. Hay que sentarse en la bicicleta y practicar el equilibrio sin pedalear, deslizándose con suavidad por una pequeña pendiente, para luego comenzar a pedalear.
En la actualidad, existen unos ruedines para bicicletas de adulto que por su estructura reforzada soportan el peso de una persona adulta y facilitan mucho el aprendizaje.
Estas ruedas estabilizadoras se pueden regular en altura para ir adaptándose al proceso del aprendizaje, de modo que al principio deben apoyar en el suelo completamente, y una vez se haya cogido confianza y se maneje la bicicleta con soltura, se pueden subir para que apoyen en momentos puntuales.
Estos estabiciclos de adulto, que se pueden adquirir en Ciclo-mania, también son ideales para personas que, aunque ya monten en bicicleta, necesiten un extra de equilibrio y la seguridad de no caerse cuando se detenga la bicicleta.
Probar giros suaves: Cuando ya se haya aprendido a equilibrarse, hay que practicar giros suaves para acostumbrarse a la reacción de la bicicleta al cambiar de dirección.
Practicar el arranque sujetando firmemente el manillar y colocando el pedal derecho (o izquierdo si es zurdo) apuntando hacia el manillar, y empujando hacia abajo a la vez que se empuja el suelo con la pierna contraria.
Tras esta preparación previa toca montar en la bicicleta, levantar la cabeza y mirar adelante, dirigiendo la mirada al lugar que se desee ir. Relajar cuerpo y brazos, para que los movimientos sobre la bicicleta fluyan con suavidad.
El último paso es ir ampliando los recorridos de forma progresiva y adaptándolos a la forma física.
Ya solo queda practicar y practicar para ir ganando cada vez más confianza. Hay que ser paciente y no desanimarse. Al principio resulta difícil, pero cuando se logra es muy gratificante.
¡Buena suerte en la aventura para aprender a montar en bicicleta!