Sabores ‘infinitos’
La filosofía de los treinta restaurantes que permanecen o acaban de incorporarse al selecto club Cantabria Infinita es la de “hacer habitual lo extraordinario” para continuar despertando admiración y sorpresa entre los comensales que acuden a su casa en busca de una cocina de calidad. De otros se diferencian por la selección de las materias primas, la innovación en técnicas, el servicio al cliente y otros detalles no menos importantes como las instalaciones, la puesta del producto en el plato, el equipamiento, el personal, la variedad de la carta, el mobiliario o la vajilla.
El hecho de que algunos establecimientos hayan desaparecido de la guía editada por la Consejería de Turismo no significa que su nivel de calidad haya bajado sino que la empresa encargada de auditarles les exige una serie de criterios que quizá no se adaptan a su línea profesional. Tampoco todos los restaurantes cántabros de calidad están incluidos en la lista porque la pretensión del Gobierno cántabro es renovarla periódicamente, como acaba de hacer, para que tenga una cierta variedad y dar cabida a un mayor número de restaurantes.
Este año, los elegidos son el restaurante Fausto de Santander y Lino´s de la Real Labranza de Villasevil de Toranzo.
La guía de restaurantes se ofrecerá al futuro visitante junto al Club de Calidad de Alojamientos que nació hace seis años y ya ha distinguido a 49 alojamientos regionales.
