El sector del embalaje busca alternativas inteligentes y más sostenibles
En España, hay más de 2.100 empresas que se dedican a esta actividad
El embalaje de un producto es tan importante como el mismo producto. En cuestiones de marketing, decir categóricamente que lo que de verdad importa es el interior sería pecar de imprudente. Los clientes son cada vez más exigentes y ya no se conforman con que los productos que adquieren por Internet sean de calidad y lleguen en perfectas condiciones a su domicilio. Ahora más que nunca se juzga el libro por la portada y las empresas empiezan a ser conscientes de ello. De ahí que hayan encontrado en el packaging, además de una herramienta de protección en los envíos, una forma poderosa y eficaz de potenciar su imagen como marca.
Prueba de ello es el auge que está experimentando año tras año el sector del embalaje. Según un informe elaborado por el salón Hispack de Fira de Barcelona, el sector facturó en España más de 20.000 millones de euros en 2016, una de las mayores cifras de la última década.
En el país, hay más de 2.100 empresas que se dedican a esta actividad y emplean a 73.535 trabajadores. La maquinaria, los envases metálicos y los plásticos son los subsectores en los que más ha crecido el número de compañías y concretamente, el sector de plásticos para packaging es el que más personas tiene contratadas (19.000).
Las posibilidades en el mundo del packaging son muy variadas. Algunos proovedores de embalajes como Embaleo ofrecen todo tipo de soluciones y ponen al servicio de cliente una gran oferta comercial. Se pueden comprar sobres de cartón, bolsas y fundas, cajas de cartón, relleno y protección, envases alimentarios, productos de equipamiento e higiene, adhesivos y etiquetas, film y protecciones, paletas y accesorios y cierres y flejados flejes.
El futuro del packaging
Entre el 12 y 14 de febrero, se celebró en Barcelona el Pick&Pack 2020, una de las citas más importantes para los profesionales del embalaje. En este encuentro anual, al que asistieron más de 7.000 profesionales y más de 150 empresas, se debatió sobre cuáles son los últimos avances en materia de fabricación, impresión y materiales.
Uno de los temas que más entusiasmo despertó fue el de los embalajes inteligentes. Los envoltorios evolucionan al ritmo que lo hacen las nuevas tecnologías. Cada vez son más visuales, ergonómicos e informativos y el objetivo de las compañías de cara al futuro es conseguir que también sean inteligentes. Una idea que ya se está empezando a gestar y que sirve de ejemplo para comprender hacia dónde se dirige el sector es la de conseguir que los embalajes de los productos lácteos sean capaces de advertir a los consumidores si se encuentra en buen estado o no, indepedientemente de la fecha de caducidad.
Sin embargo, existen otros desafíos que el gremio tendrá que afrontar de ahora en adelante. Los movimientos ecologistas reclaman medidas para detener los mecanismos de activación del calentamiento climático, como la de reducir la producción de materiales contaminantes como los plásticos que pueden llegar a tardar un milenio en desintegrarse. En este sentido, la industria del packaging se verá obligada a buscar estrategias para desarrollar su actividad desde el compromiso con el medio ambiente y materiales más sostenibles.