Francia, un verdadero museo al aire libre con infinitos atractivos
/COMUNICAE/
2024 es un año excepcional para Francia por la celebración de grandes acontecimientos de repercusión mundial como Los Juegos Olímpicos de París o la reapertura de la Catedral de Notre-Dame; eventos que van a permitir mostrar al mundo la gran diversidad y calidad de la oferta turística del país, comprometida siempre con la sostenibilidad, según explica ATOUT FRANCE
Francia es el primer destino turístico mundial, un verdadero museo al aire libre gracias a sus infinitos atractivos. Paisajes naturales excepcionales, patrimonio, cultura, el tan característico art de vivre, gastronomía exquisita y ecoresponsable, turismo y alojamientos sostenibles, recorridos interactivos e innovadores y reconocidos acontecimientos internacionales como los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024 o la reapertura de la Catedral de Notre-Dame; un año excepcional para Francia que va a permitir al mundo mostrar la diversidad y la calidad de la oferta turística francesa, una oferta que innova y se renueva para responder a la demanda de los viajeros, especialmente en materia de sostenibilidad.
Los amantes de la naturaleza pueden contar con 11 parques nacionales y 58 parques naturales; mientras que los apasionados de la cultura y el arte se deleitarán en más de 8.000 museos y 46.300 monumentos, parques y jardines y los 52 lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Además, 6.000 festivales a lo largo del año, 17 viñedos de renombre mundial o 19.000 kilómetros de rutas ciclistas aportan a ese savoir-faire regional y hacen del país un destino auténtico y sostenible.
Francia es una tierra de convivencia y experiencias compartidas, un viaje donde mar y montaña se encuentran, ciudades y campo se entremezclan y bosques y campos se funden en uno.
Eventos especiales
Francia está viviendo los Juegos Olímpicos y Paralímpicos; 100 años después de los Juegos Olímpicos de verano de París, Francia vuelve a ser el centro de todas las miradas con el acontecimiento deportivo más reconocido del mundo. Del 25 de julio al 8 de agosto, la capital francesa, acoge 15 días de competiciones seguidos de 10 días de pruebas paralímpicas. Dos citas donde Francia está demostrando su gran experiencia en la organización de eventos a gran escala y pone de manifiesto su compromiso con la sostenibilidad y la inclusión. Estos juegos tienen un enfoque único ya que la inmersión en el patrimonio histórico y cultural de Francia es total.
El país ha vibrado o vibrará también con otros reconocidos eventos como el Tour de Francia, la reapertura de la Catedral de Notre-Dame, joya de la corona del patrimonio histórico mundial, los 150 años del nacimiento del impresionismo o el 80ª aniversario del día D y de la batalla de Normandía.
Movilidad sostenible
Francia lo tiene claro, la movilidad sostenible es vital para el turismo en el país, ya que reduce el impacto ambiental de los visitantes y preserva los destinos naturales y urbanos. Este hecho mejora la calidad del aire y la experiencia turística. Francia promueve el uso de transporte público, bicicletas y vehículos eléctricos y ofrece opciones ecológicas a los turistas como:
- Cicloturismo. Con 21 grandes itinerarios señalizados, rutas urbanas cuidadosamente diseñadas, una selección de grandes travesías de montaña, sin olvidar los legendarios puertos del Tour de Francia, el país ofrece 20.755 km de rutas ciclistas, teniendo como objetivo convertirse en el primer destino mundial del cicloturismo en 2030.
- Senderismo. Es la disciplina deportiva más popular de Francia, practicada por más de 27 millones de personas, destacando por su accesibilidad, su aspecto intergeneracional y sus beneficios para el bienestar. Francia ofrece una gran diversidad de paisajes para explorar que conectan con la naturaleza.
- Paseos fluviales. Con 8.500 km de vías navegables, Francia cuenta con la mayor red fluvial de Europa, un auténtico hito de ingeniería y de organización del territorio.
Visitas en plena naturaleza
Para una estancia en la que se busca disfrutar de la naturaleza en Francia las opciones son infinitas.
- La gran travesía del Jura, con 380 km de rutas diseñadas para los entusiastas del gravel.
- Noches insólitas en los faros de Bretaña, como el gran faro de la isla de Sein, joya histórica en el extremo de Bretaña, que se ha transformado en una acogedora casa rural con vistas panorámicas al océano Atlántico.
- La isla de Córcega que atrae por su belleza natural, patrimonio cultural, gastronomía o magníficas playas, pero también por el ciclismo, con itinerarios permiten recorrer la zona en bicicleta y combinar paseos y visitas a lugares notables.
- La región del Gran Este enclavado entre Champaña y Alsacia, propone Mosa, una joya escondida del turismo francés ideal para deslizarse por las tranquilas pero revitalizantes aguas del río en una canoa-kayak.
- Ruta ciclista La Vélo-Maritime en los Altos de Francia con un espectacular recorrido de 1.500 km de costa del norte de Francia. Una aventura ciclista única, con tramos adecuados tanto para trayectos largos como para escapadas cortas. Paisajes espectaculares, ciudades históricas y pintorescas y estaciones balnearias.
- En Normandía, a pocos kilómetros de Dieppe, puede vivirse una experiencia única al aire libre: un paseo en patinete eléctrico todoterreno. El recorrido comienza en Quiberville y termina en Sainte-Marguerite-sur-Mer con un aperitivo y una degustación de productos locales con el atardecer de fondo.
- El Marais Poitevin recibió la prestigiosa etiqueta Ramsar, una distinción internacional que subraya la importancia ecológica de este humedal. Con 337 especies de aves y más de 1.000 especies vegetales, es una zona de biodiversidad extraordinaria.
- París y su región a través del agua. Navegar por el Sena es una forma privilegiada y relajante de descubrir el corazón histórico de París y las riquezas de la región que la rodea. Esta experiencia, única, permite bajar el ritmo, y adoptar una forma de movilidad sostenible para apreciar los paisajes y el corazón del destino.
- Ruta en bicicleta siguiendo el curso del río más caudaloso desde los Alpes del Sur hasta la Provenza. A lo largo de 170 kilómetros, la ruta ciclista del Durance recorre lugares históricos y paisajes extraordinarios.
Escapadas culturales
La cultura francesa es una fuente inagotable de inspiración para el viajero, que cuenta con un sinfín de experiencias entorno al arte, la música o el legado patrimonial:
- El Monasterio Real de Brou, construido en Bourg-en-Bresse, es una obra maestra de la arquitectura. Cada elemento, sumerge a los visitantes en una época en la que los sentimientos reales superaban todos los obstáculos.
- En el suroeste de Touraine, el Château du Rivau es una página viva de historia, que combina majestuosamente el patrimonio medieval con el encanto renacentista. Para proteger el medioambiente, Le Rivau cuenta con dos conservatorios dedicados a la preservación de la biodiversidad y no utiliza productos fitosanitarios en sus jardines.
- Entre las figuras emblemáticas que han dejado huella en Córcega, Napoleón Bonaparte es el protagonista. A dos pasos de la Maison Bonaparte, se encuentra la Cueva de Napoleón. Este edificio intimista de piedra transporta a los visitantes a la juventud de uno de los mayores líderes de la historia de Francia.
- La casa Taittinger invita a los visitantes a explorar sus históricas crayères a través de un nuevo itinerario que revela los secretos de sus bodegas centenarias. Por su parte, la casa Ruinart, ha abierto las puertas de una sala de degustación diseñada por el famoso arquitecto Sou Fujimoto. Arraigadas en la tradición desde hace casi un siglo, siguen revolucionando el sector vitícola combinando herencia y vanguardia
- A pie, en bicicleta, en autobús o en tren, una escapada a La Rochelle une historia, naturaleza y cultura y permite conocer desde sus barrios históricos hasta los impresionantes acantilados del Pertuis Breton.
- Nimes brilla con luz propia en la escena internacional con la inclusión de la Maison Carrée en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Este templo, el mejor conservado del mundo antiguo, añade prestigio a la ciudad apodada la «Roma francesa», junto a tesoros como la Arena, la Torre Magna y el Templo de Diana.
- Fundada en el siglo XII por Robert d’Arbrissel, la Abadía Real de Fontevraud destaca como una de las mayores ciudades monásticas de Europa, marcando profundamente la historia medieval. Única en su género, estaba dirigida por abadesas, varias de las cuales procedían de familias reales. Transformada en prisión durante la Revolución Francesa, ha sobrevivido a los avatares de la historia para ser restaurada y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
- Después del Palacio de los Papas de Aviñón, el Hôtel-Dieu de Carpentras es el segundo gran monumento histórico del departamento de Vaucluse, en la Provenza. A partir de abril de 2024, este edificio se transformará en una biblioteca-museo para mostrar toda su riqueza cultural.
Descubrir l’art de vivre francés
En Francia, l’art de vivre se expresa a través de los sabores, la gastronomía y la propia la tierra. Para descubrirlo las siguientes propuestas son ideales:
- Escapada Gastronómica de Beaujolais al Valle del Ródano, Valle de la Gastronomía, que se extiende desde Dijon hasta la Provenza. El recorrido incluye visitas al Château de la Chaize, donde se puede explorar una bodega reconocida como Monumento Histórico y los jardines diseñados por Hardouin-Mansart. En Lyon, reconocida como Capital de la Gastronomía, la experiencia continúa con «Les Toqués du Fromage», que ofrece degustaciones y actividades en torno al queso y el vino. El itinerario culmina con una visita a la Cité du Chocolat Valrhôna, un lugar reconocido a nivel mundial que celebra su décimo aniversario.
- Viaje en Globo a través de los viñedos de Borgoña. Ideal para descubrir como nunca los climats de los viñedos de Borgoña. La aventura finaliza con una cata exclusiva de tres excepcionales vinos de Borgoña en el aire.
- Nuevo recorrido gastronómico al mercado de Lices, una joya de Rennes con 400 años de historia y el segundo mercado más grande y longevo de Francia. Esta experiencia, una verdadera inmersión en el rico patrimonio culinario de Rennes, es más que una simple degustación, ya que está guiada por un experto apasionado por los productos locales.
- Establecidos en el corazón de Sancerrois, el chef Julien Médard y su esposa, Delphine, celebran en 2024 una década de éxitos culinarios con su restaurante Maison Médard. Con una estrella Michelin, esta meca gastronómica está decididamente comprometida con un enfoque ecorresponsable.
- Reconocidas en todo el mundo, las patatas fritas tienen sus raíces en la historia de Arras, que acogió con orgullo el primer Campeonato Mundial de Patatas. Esta ciudad, cuna de Charles de l’Écluse, pionero en el estudio de la patata, adquirió un nuevo impulso con este alegre concurso.
- Cerca de Gisors, en Eure, la sidrería Mont Viné, ofrece una experiencia inmersiva en la que confluyen tradición y compromiso medioambiental.
- En 2023, el Occitanie Rail Tour ganó el «Rail Tourism Award» a la mejor iniciativa regional de promoción del viaje en tren como solución de movilidad sostenible. Este premio resalta el compromiso de Occitania con un turismo sostenible y auténtico, que permite a los visitantes explorar la región a través de 19 rutas de trenes regionales respetuosas con el medio ambiente.
- Íntimamente ligada a la gastronomía, el menaje de mesa de la Manufacture de Sèvres es un testimonio del savoir-faire y de un art de vivre francés único. Al oeste de París, la ciudad de Sèvres es la cuna de la histórica Manufactura de Sèvres, establecimiento emblemático fundado bajo Luis XV y famoso en toda Europa por la incomparable calidad de su porcelana.
- El restaurante del Hôtel d’Anjou****, galardonado con la etiqueta «Table Gourmande» de Gault & Millau y la etiqueta «Ecotable» por su profundo compromiso con el medio ambiente cuenta con una decoración art-decó y cocina centrada en productos locales de temporada y ecológicos. Un lugar donde las delicias gourmet van de la mano de la exploración culinaria.
Alojamientos sostenibles y sorprendentes
Francia cuenta con una amplia gama de alojamientos en plena naturaleza, eco albergues aislados, chalés en los árboles o en el agua, caravanas o tiny houses para disfrutar de noches bajo las estrellas o mañanas mágicas.
Desde unas casitas enclavadas en el bosque de Orleans, el mayor bosque nacional de Francia, ideales para relajarse y dar rienda suelta a la creatividad, cabañas que combinan aventura y confort en los Altos de Francia, 18 ecolodges a tan solo una hora de París, Normaldía, ideales para relajarse en un entorno natural, una casa rural de alta gama construida según la más pura tradición de la montaña en los Pirineos, al Castillo de la Rosa Bonheur, en By-Thomery, una escapada culinaria e histórica.
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Fuente Comunicae
Source: Comunicae