Componentes Inductivos no tendrá que pagar la deuda de Karly
El Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) ha anulado una resolución de la Tesorería General de la Seguridad Social que reclamaba a Componentes Inductivos y Derivados 127 millones de pesetas, en concepto de cuotas, como responsable solidaria de la deuda contraída en su día por Manufacturas Electrotécnicas Karly, declarada insolvente en 1999.
La sentencia señala que no existe sucesión empresarial, debido a que la transmisión de bienes de una a otra empresa se produjo por subasta y la empresa presuntamente transmitente estaba en una situación de insolvencia. Destaca, igualmente que la composición social de ambas sociedades es «claramente diferente», dada la mayoría que sobre la nueva empresa ostenta una compañía inglesa.
La mera incorporación de seis trabajadores de Karly y el utilizar el mismo domicilio, mientras se hacían las gestiones para la puesta en marcha de la empresa, no pueden ser elementos suficientes para la exigencia de la responsabilidad solidaria, según los jueces.
Karly, situada en el polígono de El Campón, fabricaba pequeñas bobinas eléctricas y transformadores de alimentación y presentó suspensión de pagos en 1992, pasando en 1998 sus instalaciones a ser propiedad de la empresa Gesinar, que las adjudicó en subasta pública.
Componentes Inductivos y Derivados tiene su actividad en Maliaño, produce transformadores y autotransformadores trifásicos y de la plantilla inicial, sólo 6 de los 12 trabajadores contratados inicialmente proceden de la antigua Karly.