Fiebre de titulaciones

Junto a las escuelas de negocios que ofrecen titulaciones, generalmente relacionadas con la dirección y gestión empresarial, y que están avaladas por universidades extranjeras, prestigiosas empresas, entidades financieras y universidades, se han lanzado además a una agresiva competencia para ofrecer una nueva oferta para aquellos universitarios que, una vez licenciados, aspiran a ganar más dinero y tener un mejor trabajo.
En el mercado universitario existen más de un centenar de masters (MBA) que tienen garantizado el éxito si se les dedica horas de esfuerzo y sacrificio y que van a permitir un ascenso laboral mucho más rápido que si sólo se dispone de una licenciatura. Una vez terminado el master, el destino estrella para la mayoría de los graduados suelen ser las consultorías, aunque los sectores mejor pagados siguen siendo la banca y las finanzas.
Las escuelas de negocios que han ido surgiendo al amparo de universidades extranjeras, principalmente de Gran Bretaña y Estados Unidos, ofrecen la posibilidad de realizar licenciaturas asentadas sobre el dominio del inglés, la informática y los medios audiovisuales.

Clases prácticas

Además, en estos centros se incide en los aspectos prácticos para que el alumno aprenda a tomar decisiones, asumir riesgos, defender públicamente sus ideas y, sobre todo, trabajar en equipo. La oferta se completa, en la mayoría de los casos, con estancias en otros países para perfeccionar el idioma y para que el alumno, que en su vida laboral tendrá que enfrentarse a la Europa sin fronteras, tenga una visión lo más completa posible de cómo funcionan las empresas a nivel internacional.
Las escuelas universitarias de negocios que existen en Cantabria mantienen además acuerdos con instituciones como la Cámara de Comercio, las agrupaciones empresariales CEOE-CEPYME y Jóvenes Empresarios y con el Colegio de Economistas, para facilitar el acceso de los alumnos no sólo a los conocimientos y experiencia de muchos empresarios y profesionales de la región a través de conferencias y clases teóricas, sino que puedan realizar prácticas en las empresas más importantes de Cantabria.
Estas escuelas comenzaron su andadura ofreciendo titulaciones relacionadas básicamente con la dirección y gestión de empresas, pero, a medida que en la sociedad han ido apareciendo nuevas demandas profesionales se ha ampliado con otras licenciaturas como ingeniería informática, marketing y, más recientemente, técnicas medioambientales o periodismo y comunicación.
En todos los casos se pretende conjugar una sólida base de conocimientos teóricos con una formación fundamentalmente práctica. Para conseguir la graduación es requisito imprescindible elaborar un proyecto, generalmente en equipo, que además sea posible poner en marcha. De hecho, muchos de estos centros ofrecen como un aliciente más la búsqueda de financiación y ayudas para la puesta en práctica de los mejores proyectos presentados por sus alumnos. Algunas de estas escuelas tienen como objetivo poner en contacto a los autores de estos trabajos con inversores que buscan nuevas ideas para desarrollar.
El elevado coste económico de muchos de estos estudios se justifica porque incluyen estancias obligatorias en el extranjero y aportan la tecnología más avanzada tanto en informática como en audiovisuales. A través de Internet los estudiantes pueden mantener un contacto continuo con la universidad de la que depende el centro y que es la encargada de emitir la titulación correspondiente.
El precio de estos estudios se dispara en el caso de los masters, que en muchos casos pueden superar el millón de pesetas. El perfil de los alumnos suele ser, por tanto, el de un joven perteneciente a una clase social media-alta y en muchas ocasiones, hijos de empresarios que están llamados a la sucesión al frent del negocio familiar, aunque los responsables de estos centros intentan desterrar esta idea asegurando que en ellos tienen cabida cualquier tipo de alumno que tenga ganas de trabajar.

Formación continua y reciclada

Pero también existen otros cursos destinados a satisfacer la necesidad que tienen empresas y profesionales tanto de la Administración como del ámbito privado de contar con una formación continua y reciclada. Por eso se han puesto en marcha con éxito cursos que permiten obtener titulaciones universitarias a empresarios, ejecutivos y profesionales mayores de 27 años que intentan compaginar su trabajo profesional con el estudio. Para facilitar esta formación, muchos centros empiezan a ofrecer la posibilidad de realizar sus cursos a distancia, como ocurre en el caso de la formación pública con la UNED, e incluso de manera virtual.

Cursos a medida

Algunas academias se han especializado en el diseño de cursos de las más variadas disciplinas, planificados a medida para empresas que quieren ofrecer a sus trabajadores la posibilidad de reciclarse, especialmente en áreas relacionadas con las nuevas tecnologías, administración y contabilidad, recursos humanos o gestión comercial, entre otras. En estos momentos, uno de los cursos que más demandan las empresas para adaptarse a la legislación vigente en materia de seguridad laboral son los relacionados con la prevención de riesgos laborales que se imparten desde un nivel básico hasta titulaciones de nivel medio y superior. Estos cursos incluyen materias como seguridad en el trabajo, ergonomía y psicología aplicada e higiene industrial y para la realización de los de grado superior es imprescindible tener un titulo universitario reconocido por el Ministerio de Educación.
En esta competitiva carrera por la formación se han embarcado también las organizaciones empresariales y sindicales que, a través del FORCEM, ofrecen cursos para trabajadores en activo o en paro e incluso la propia Administración ocupa el tiempo de muchos desempleados con la asistencia a diversos cursos de formación.

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