Los avances tecnológicos que están revolucionando los talleres mecánicos

No hay frente ni sector en el que la tecnología y sus avances no hayan dejado huella.

Si miramos al mundo de la mecánica, a los tradicionales talleres de reparaciones de coches, podemos comprobarlo fácilmente. Solo hay que pensar en cómo cada vez hay más vehículos con ordenadores en su interior.

Los talleres tienen que actualizarse cada cierto tiempo para poder reparar los nuevos automóviles y amoldarse a las nuevas necesidades de los vehículos. Pero, al mismo tiempo, también tienen que actualizarse para poder llevar a cabo su trabajo con más facilidad.

La tecnología siempre busca agilizar y facilitar procesos, mejorar la eficiencia de todo aquello que toca. Si miramos a los talleres, hay mucho que mejoran también aquí. De hecho, hay muchos avances tecnológicos que están replanteando incluso la forma de trabajar en los talleres mecánicos.

Vamos a ver a continuación cuáles son los avances de la tecnología que más están revolucionando los talleres de reparaciones de vehículos. Cuáles son esas claves de las nuevas tecnologías y qué están aportando tanto a profesionales como a consumidores en este sector.

¿Qué nuevas tecnologías han llegado a los talleres de reparación de vehículos?

La tecnología no deja de avanzar, como bien hemos subrayado anteriormente. Si miramos al ámbito mecánico y automovilístico, hay determinados avances que han llegado a marcar un antes y un después en la labor de profesionales de la mecánica. 

Podemos mirar al mundo de la alta competición o, también, al ámbito más doméstico. Los talleres convencionales poco a poco están transicionando, mejorando sus métodos, aumentando su rendimiento y ofreciendo a sus clientes un servicio mucho más completo y avanzado.

Todo al servicio del trabajador y del cliente. Vamos a ver cuáles son las nuevas tecnologías que más están mejorando este sector a continuación:

Software de gestión integral (ERP)

Los software de gestión integral de procesos ya se están colando en todos los sectores que se puedan imaginar. Por eso, no termina de sorprender verlos presentes también en los talleres mecánicos. Los ERP son ya el pan nuestro de cada día dentro del ámbito empresarial.

Soluciones como la que puedes encontrar en este enlace agilizan considerablemente la labor en los talleres, además de mejorar toda su organización. Gracias a estas herramientas, por ejemplo, un taller puede tener controlados todos los repuestos de los que dispone y automatizar las compras en caso de faltar unidades.

Asimismo, también mejora la gestión de los horarios, controlando todos los tiempos a la hora de organizar las diferentes reparaciones. Hace un seguimiento del estado de la maquinaria, de los vehículos reparados, los clientes y un largo etcétera de variables. Pero, por encima de todo, ayuda a mejorar el rendimiento del taller y controlar los puntos en los que flaquea para mejorarlos.

Proyecciones de Realidad Aumentada (RA)

La tecnología de la Realidad Aumentada se ha estado empleando principalmente en el sector del entretenimiento, sin embargo, poco a poco se ha ido integrando en otros campos. Así, en los últimos años ha empezado a integrarse también dentro del sector de la automoción y, más concretamente, en el de los talleres de reparaciones.

Contando con un dispositivo intermedio que cuente con una pantalla, esta tecnología permite proyectar imágenes sobre una imagen real captada por un dispositivo. Empresas como Bosch ya están integrando soluciones de este tipo dentro de los talleres.

¿Cómo? Combinando el uso de una tablet o incluso unas gafas de Realidad Aumentada con el software adecuado, se pueden ver las diferentes capas del coche y consultar la información sobre todas y cada una de sus piezas. Algo ideal sobre todo para explicar al cliente qué ocurre y cómo debe arreglarse en su automóvil.

Sistemas de Inteligencia Artificial (IA)

La Inteligencia Artificial se está adentrando sobre todo en los propios vehículos. Bien es cierto que, desde hace unos años, la mayoría de automóviles cuentan en su interior con ordenadores de a bordo que ayudan no solo al conductor, sino también a los talleres, a la hora de avisar en caso de averías.

Facilitan la ubicación del error para actuar con mayor rapidez. Sin embargo, desde hace poco, el ordenador de a bordo ha ido evolucionando hasta contar con sistemas de Inteligencia Artificial.

¿Y en qué ayuda una IA a la hora de reparar un coche? Cada vez más vehículos modernos cuentan en su interior con esta tecnología para recibir avisos gracias a la programación de protocolos de revisión periódicos. Así, se comprueba el estado de componentes como las bombas de combustible, las baterías, motor de arranque y un largo etcétera.

Impresión 3D

Desde que llegaron al mundo, las impresoras 3D han hecho como la RA o la IA, colarse en más y más sectores. Dentro del mundo de la mecánica y la reparación de vehículos, también están sirviendo a la hora de facilitar la labor de los profesionales o, simplemente, a la hora de mejorar la experiencia del cliente.

Estas máquinas, que permiten imprimir toda clase de figuras y hasta piezas en materiales plásticos, se están usando sobre todo para elaborar diseños con los que replicar cualquier pieza o repuesto. En el caso de que haga falta una pieza que ya no está catalogada o no esté disponible en el mercado, cabe la posibilidad de rehacerla gracias a la impresión 3D.

Se elabora el modelo y el molde que, después, sirva para dar forma al recambio. Aunque, en ocasiones, también se pueden hacer directamente las piezas que se necesiten.

Es de esperar que, con el paso del tiempo, las aplicaciones de estas tecnologías crezcan todavía más. De hecho, también es de esperar que las posibilidades aumenten todavía más, permitiendo así a las empresas con talleres mecánicos optimizar todavía más su trabajo y maximizar su rendimiento.

A fin de cuentas, la prioridad de la tecnología, además de abrir la puerta a nuevas oportunidades, es la de hacernos las cosas todavía más fáciles. ¿Qué más conseguirá en los talleres durante los próximos años? Lo veremos poco a poco.