Campofrío frescos obtiene el grado de excelencia en la auditoría de bienestar animal de Welfare Quality

La planta de sacrificio y procesado de Campofrío frescos ubicada en Burgos ha obtenido la calificación de Excelente en la auditoría de Bienestar Animal que, basada en el protocolo europeo Welfare Quality, realiza anualmente Aenor para evaluar aspectos como la alimentación, el alojamiento, la salud y el comportamiento adecuado dentro de las instalaciones.

El protocolo Welfare Quality analiza diez criterios complementarios como el confort en la zona de descanso y el térmico, la facilidad de movimiento o la ausencia de lesiones y enfermedades, entre otros.

El director del área de ganadería y relación con proveedores de Campofrío frescos, Jesús Maes, ha explicado que desde la planta quieren asegurar un trato respetuoso a los cerdos que se sacrifican en las instalaciones, así como garantizar la calidad del producto, que está relacionada con el bienestar animal, por lo que es “fundamental” minimizar el estrés de los animales durante el transporte.

“Este sistema de puntuación nos ayuda a entender el nivel de bienestar animal en nuestras instalaciones y a implementar medidas de mejora en nuestras prácticas de día a día para garantizar unos estándares elevados de bienestar animal”, ha añadido.

Campofrío Frescos obtuvo la certificación de Bienestar Animal Welfare Quality para el sacrificio de ganado porcino en 2017, consiguiendo entonces la calificación de “bueno”. Tras diversas mejoras en el matadero, en 2018 obtuvo una puntuación global de 75 puntos y ya alcanzó una calificación de “excelente” en dos de los cuatro principios.

Maes ha resaltado que algunos de los cambios que realizaron en 2019 para obtener la excelencia fueron reformas como el reemplazo del suelo de cuadras, el incremento del número de bebederos en los corrales de espera o la formación del personal de cuadras para fomentar un manejo “suave y tranquilo” de los animales durante la descarga, conducción a cuadras y entrada a sacrificio.