La ciencia al día
Recuperación de archivos audiovisuales
La cantidad de información que almacenamos en video y audio ha aumentado de forma tan estratosférica que ha hecho que la búsqueda de los contenidos que nos interesan y su posterior recuperación cobre una importancia cada vez mayor.
Una reciente investigación europea ha desarrollado un algoritmo específico para la clasificación del material audiovisual que puede solucionar este nuevo problema que nos hemos buscado sin ayuda de nadie. Se trata de una tecnología capaz de reconocer la voz y de hacer transcripciones de quien habla y sobre qué. En el campo de la imagen, permite actuar sobre detalles de ciertas escenas, objetos, caras o incluso frases o subtítulos de películas.
La repercusión de este invento no se nos oculta porque, a partir de ahora, será innecesario ver una película al completo o escuchar una canción de principio a fin para buscar algo determinado.
Robots y neurociencia
La ciencia tiene cada día más claro que los procesos de la mente humana están determinados por la estructura física del cuerpo y su relación con el entorno. Por eso, el desarrollo de la investigación se enfoca hacia la utilización de robots humanoides.
En Europa hay un proyecto denominado Robotcub (cachorro de robot) que estudia la manera que tenemos los humanos de reconocer e imitar los gestos de otros para, partiendo de esa base, construir robots capaces de comunicarse por medio de este sistema.
Hasta el momento, han diseñado un artefacto con cabeza binocular, torso y un brazo antropomórfico con una mano capaz de hacer cosas tan humanas como apuntar con el dedo, rascarse o llevarse la comida a la boca, aunque sea una lata de aceite lubricante.
Autobuses de hidrógeno
Diez ciudades europeas se sumaron a un proyecto para demostrar que los autobuses pueden usar combustible de hidrógeno en células y, tras un primer año de pruebas, los resultados no han podido ser más favorables.
En Londres, una de las ciudades elegidas para instalarlos, tres autobuses han estado en funcionamiento durante 3.400 horas y han recorrido 37.000 kilómetros.
La investigación concluye que su rendimiento y fiabilidad han sido altos y que los pasajeros han podido apreciar su ventaja ecológica y, sobre todo, la tranquilidad y suavidad con la que se desplazan.
Algún aspecto negativo tenían que tener y ese, de momento, sigue siendo el precio.
Los perros y el olor del cáncer
A nadie deja indiferente la conclusión a la que ha llegado un científico polaco sobre la capacidad de los perros para oler las células cancérigenas. Según este investigador, hay perros que pueden percibir los olores específicos que desprenden los tumores del cáncer, que él ha conseguido detectar por medio de la cromatografía de gases y la espectromía de masas. Los más hábiles para lograrlo son los perros de caza, en concreto, el pastor alemán y los que antiguamente se encargaban de localizar a los esclavos que rompían, unilateralmente, su contrato de servidumbre.
La capacidad olfativa de los canes es asombrosa, porque pueden reunir doscientos millones de células olfativas, cuarenta veces más que los humanos, lo que les permite identificar más rápidamente las moléculas olorosas y recordar unos seiscientos mil olores distintos.
Este método tan poco convencional para detectar el cáncer, según su descubridor, no puede utilizarse como herramienta de diagnóstico, pero sirve para distinguir a los pacientes que deben ser tratados de forma prioritaria.