Fedea ve «agotados» los efectos de la reforma laboral para limitar la rotación en el empleo

Avisa de que los demandantes de empleo con relación laboral, básicamente fijos discontinuos inactivos, se encuentran en máximos desde la reforma

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) advierte en su último boletín trimestral del mercado laboral, correspondiente al cuarto trimestre de 2024, de que la tasa de rotación de la afiliación al Régimen General de la Seguridad Social «apenas ha variado desde el segundo año de aplicación de la reforma laboral» a pesar de que la economía española se encuentra en una fase expansiva del ciclo económico.

«Las tasas de baja por fin de contrato temporal han descendido de forma considerable con la caída de la contratación temporal, que ha sido parcialmente compensada por el aumento de las bajas por inactividad de los fijos discontinuos y, en menor medida, por dimisión o abandono voluntario», refleja el estudio, elaborado junto a BBVA Research y Sagardoy Abogados.

El informe, presentado este viernes en la Universidad de Oviedo, indica que, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), se está produciendo «una reducción constante» de los flujos de empleo asalariado, en línea con el patrón anterior a la pandemia.

Si se tienen en cuenta los cambios de empresa entre dos trimestres consecutivos, la tasa de rotación del empleo asalariado disminuyó 1,5 puntos entre 2019 y 2024, frente a una caída de 1,2 puntos entre 2014 y 2019. Entre los menores de 25 años, la tasas de rotación también descienden debido a la contracción de las tasas de alta, mientras que Fedea no aprecia variaciones significativas en las de baja o permanencia desde la entrada en vigor de la reforma laboral.

«En conjunto, estos datos indican que los efectos en el corto y medio plazo de la reforma laboral sobre las tasas de rotación han sido limitados y parecen haberse agotado», subraya el estudio, que ha sido elaborado por Fedea en colaboración con BBVA Research y Sagardoy Abogados.

Aunque España ha pasado de doblar la tasa de temporalidad media de la Unión Europea a converger con las economías de su entorno, Fedea avisa de que sigue liderando el ránking europeo de tasas de transición del empleo al paro.

«La reducción de estas tasas se ha detenido a partir de 2022. En 2024, el número de fijos discontinuos activos creció en la EPA, y los demandantes de empleo con relación laboral, que incluyen esencialmente a los fijos discontinuos en periodo de inactividad, alcanzaron su nivel más alto desde la aplicación de la reforma del mercado de trabajo», expone el informe.

Así pues, subraya Fedea, el paro efectivo , que incluye a demandantes de empleo con contratos fijos discontinuos en periodo de inactividad, en ERTE y a los que cobran prestaciones estando en situación de colaboración social, subió en 2024, mientras que el paro registrado descendió en 141.000 personas.

El informe anticipa que el dinamismo del empleo observado en el cuarto trimestre de 2024 se prolongará en el primer trimestre de este año, tal y como apuntan los registros de afiliación de enero y la primera quincena de febrero. Asimismo, Fedea prevé que las vacantes crezcan menos de lo sugerido por la caída del paro, lo que apuntaría, a su juicio, «a una mejora de la eficiencia de los emparejamientos laborales».

EL PESO DE LAS COMPETENCIAS VERDES EN EL EMPLEO, MODERADO EN ESPAÑA

Según el observatorio, el peso de las competencias verdes en el empleo, lo que se denomina intensidad verde es moderado en España (4%), en línea con el promedio de la UE-27.

«La concentración de habilidades verdes en ocupaciones propias del sector primario y las diferencias en el número de competencias generales necesarias para desempeñar una ocupación afectan al cálculo de la intensidad verde y al perfilado de la población ocupada», argumenta Fedea.

De este modo, para solventar los inconvenientes del indicador agregado, el informe clasifica las habilidades verdes en cinco subgrupos: agricultura y biodiversidad; políticas y estudios ambientales; reciclaje y residuos; energía renovable y eficiencia energética; y otras.

Según Fedea, el perfil de las personas trabajadoras con más intensidad verde difiere por grupo de competencias. Aquellas con habilidades verdes en renovables y eficiencia energética o estudios ambientales son más jóvenes y tienen un mayor nivel educativo que el promedio. Por el contrario, en los grupos de agricultura y reciclaje, la edad de la población ocupada es más avanzada y la titulación, menor.

Para satisfacer la demanda creciente de profesionales orientados a lograr la neutralidad climática, Fedea insta a impulsar la educación superior y diseñar programas formativos que capaciten a la población adulta.

LA JUBILACIÓN PARCIAL, POCO UTILIZADA, Y LA ACTIVA «NO DESPEGA»

En su informe, Fedea señala que las diferencias de género en las tasas de participación laboral y empleo han provocado a su vez divergencias en las carreras contributivas.

A partir de la cohorte de 1960, estas brechas se reducen «sustancialmente» a costa de un descenso de la fecundidad, entre otros factores. Según Fedea, las desigualdades en la carrera contributiva aún representan entre 7-8 años en las últimas cohortes en edad de jubilación.

Constata, además, que las reformas de la jubilación han afectado a la brecha de género en las salidas del mercado laboral. Así, la ratio entre jubiladas y jubilados, que era de 0,36 en 1997, aumentó hasta 0,80 en 2023. Además, las diferencias salariales y de años cotizados entre hombres y mujeres se traducen en brechas «importantes» en la base reguladora.

Fedea señala además que la jubilación parcial es una fórmula «poco utilizada» y no ve claro si la reforma introducida a partir de este año la reactivará.

En el caso de la jubilación demorada (más allá de los 65 años), afirma que siempre ha sido minoritaria y que, aunque la reforma de 2021 la ha incentivado, sólo lo ha hecho antes de los 67 años. En el caso de la jubilación activa, introducida en 2013, Fedea avisa de que «no ha despegado, especialmente entre las mujeres».