Iberdrola recibe visto bueno medioambiental a su megaproyecto de interconexión en Estados Unidos
Iberdrola ha dado un paso adelante para el desarrollo del megaproyecto de redes entre Estados Unidos y Canadá para el suministro de energía limpia a Massachussets, que supondrá una inversión de 950 millones de dólares (unos 878 millones de euros), al recibir el visto bueno medioambiental de las autoridades de Maine.
En concreto, el Departamento de Protección Ambiental de Maine (MDEP) ha concedido la aprobación del permiso al New England Clean Energy Connect (NECEC), como se denomina el proyecto, confirmando que ha cumplido o excedido todos los estándares ambientales establecidos y que ninguna otra ruta alternativa representaría una mejora en el diseño actual del proyecto.
Este visto bueno final al proyecto incluye varias condiciones adicionales que deben ser cumplidas, entre las que figuran la reducción del ancho del corredor de uno de los segmentos a 54 pies, desde los 150 pies inicialmente planteados, así como un plan de conservación diseñado para compensar los efectos de la fragmentación del corredor y dar prioridad a la conservación de grandes bloques de tierra y promover la conservación del hábitat de los bosques maduros.
El presidente y consejero delegado de NECEC Transmission, Thorn Dickinson, destacó que la decisión de las autoridades representa «otro paso significativo» para el proyecto y es «la culminación de un proceso riguroso que comenzó hace más de dos años».
Dickinson señaló que se ha trabajado «duro» para el desarrollo de un proyecto que proporcionara «medidas de mitigación sólidas para proteger el medio ambiente y, a través de este proceso de permisos, ahora hemos hecho un proyecto extremadamente bueno, aún mejor para Maine», que obtiene «aún más de este proyecto».
«Además de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, impulsar la economía de Maine y reducir los precios de la energía para hogares y empresas», añadió al respecto.
En marzo de 2018, Iberdrola, a través de su filial estadounidense Avangrid, fue seleccionada, junto a la compañía Hydro-Québec, para llevar a cabo este proyecto, que implica la puesta en marcha de una gran línea de alta tensión de 233 kilómetros de longitud que conectará ambos países y permitirá abastecer a Nueva Inglaterra con electricidad de origen renovable, gracias a una capacidad de transmisión de 1.200 megavatios (MW).
ARRANCAR LA CONSTRUCCIÓN EN ESTE AÑO.
La construcción del proyecto arrancará en cuanto se reciban los permisos ambientales finales, que se prevén para este segundo trimestre de 2020, con el objetivo de que esté terminado y la línea en servicio en diciembre de 2022.
El desarrollo del proyecto tendrá un impacto positivo relevante en el empleo, con la creación de más de 1.600 empleos durante el periodo de construcción de dos años y medio.
Asimismo, al tratarse de una concesión de explotación a largo plazo, los clientes podrán beneficiarse de precios estables durante los próximos años, evitando picos cuando haya puntas de demanda en verano e invierno. De esta manera, los consumidores de Maine ahorrarán entre 14 y 44 millones de dólares (entre 13 y 40,6 millones de euros) cada año durante los próximos 15 años a través de menores costos de electricidad.
Este proyecto será la segunda gran interconexión entre Estados Unidos y Canadá a cargo de Iberdrola. La compañía ya culminó en 2015 la construcción del proyecto Maine Power Reliability Program (MPRP), que supuso una inversión de 1.400 millones de dólares (unos 1.294 millones de euros).
Source: Europapress