Kutxabank no prevé operaciones corporativas «transformadoras» y apostará por la diversificación para crecer

Arriola afirma que «hay que pagar más al talento» y que el banco dará «pasos claros en ese sentido»

BILBAO, 29

El presidente de Kutxabank, Antón Arriola, no vislumbra la posibilidad de participar en operaciones corporativas «transformadoras», aunque no descarta «pequeñas operaciones», y ha apuntado que el banco apostará por la diversificación de sus fuentes de ingresos para seguir creciendo.

Arriola ha realizado estas manifestaciones en un acto celebrado en Bilbao por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), con el patrocinio de Kutxabank, en el que se ha analizado el papel de la banca en el crecimiento y consolidación del tejido empresarial.

En su intervención, ha afirmado que no vislumbran en Kutxabank una operación corporativa «transformadora», aunque ha apuntado que se pueden dar «pequeñas operaciones» como una joint venture o una «compra pequeña en algún segmento».

Arriola ha indicado que, si se observa el mapa de la banca en el Estado español, «cada uno quiere hacer su camino». «Todos estamos en una posición, unos más y unos menos, muy buena de solvencia y de rentabilidad, con lo cual nadie está en una necesidad y lo cierto es que normalmente las oportunidades de operaciones corporativas se dan cuando alguien está en dificultades», ha añadido.

El presidente de Kutxabank ha añadido que hay otro aspecto que no les hace ver la posibilidad de operaciones corporativas transformadoras y «es el arraigo y mantener el centro de decisión en Euskadi». A su juicio, eso limita «las posibilidades de operaciones transformadoras a las que se puede acceder».

Antón Arriola ha señalado que la foto de Kutxabank es «excelente» con una «solvencia y una posición de balance encomiable», además de una «fortaleza importante» en los mercados naturales, con un liderazgo en particulares y familias y en cuanto a productos.

El presidente de Kutxabank, que ha señalado que tiene una manera de hacer las cosas «muy respetada» por ser «cabal y rigurosa», ha manifestado que tienen unas «grandes posibilidades a futuro» porque tienen «los recursos y las personas para seguir creciendo y haciendo cosas importantes».

A su juicio, les quedan por delante «muchas oportunidades», pero ha apuntado que hay segmentos, en los que han sido «más tímidos en la última década», por una decisión de perfil de riesgo, y en los que a hora quieren incidir.

Arriola ha explicado que han realizado una reflexión estratégica y han apostado por dos ejes principales, que son crecimiento, aunque reconoce que es «difícil crecer en este mercado bancario que tiene poquísimo crecimiento» y, por otro lado, se centrarán en diversificar fuentes de ingresos, porque se concentran en hipotecas, que supone cerca del 70% de la cartera crediticia». «Queremos tener otras palancas de crecimiento y rentabilidad, que ya las tenemos, pero queremos desarrollarlas más», ha manifestado.

En este sentido, ha precisado que han definido algunos segmentos de oportunidades donde están «infrarrepresentados» y creen que la banca de empresas «es la oportunidad más importante» que tiene el banco. Además, ha dicho que es parte de su misión porque quieren «ayudar a las empresas con financiación».

Ha añadido que otras áreas que han identificado es la financiación al consumo, donde tiene crecimientos porque quieren «darle otra vuelta de tuerca», la transición energética, banca privada, donde quieren «doblar en cuatro años» los activos bajo gestión o en banca de inversión.

Todo ello, según ha declarado, se trata de un plan a medio o a largo plazo, una apuesta para los próximos cinco o diez años. Arriola ha confirmado que el año que viene elaborarán su nuevo plan estratégico e incorporarán los objetivos concretos que se van a definir en los próximos meses.

El responsable del banco ha señalado que el 60% de la inversión crediticia está fuera de sus mercados naturales, por lo que están ya «con potencia en muchas plazas», pero tienen «planes ambiciosos de crecer».

En el caso de Euskadi, en particulares y familias, están en cuotas de mercado «muy altas, bastante por encima del 30%» y, aunque quieren seguir creciendo en la medida posible, «no parece que la oportunidad sea evidente» dado el nivel» en el que están, pero sí cree que pueden crecer su cuota en empresas o en financiación de consumo.

En relación a la cartera de participadas de Kutxabank, ha especificado que todavía es «muy importante», de 1.800 millones, un nivel en el que están «cómodos».

Arriola ha afirmado que quieren apoyar a sus participadas en su estrategia de crecimiento y siempre que el centro de decisión «se quede en el Territorio» porque es «fundamental». Según ha sostenido, no tienen intención «de variar de una manera significativa su cartera «ni vendiendo, para abajo, ni para arriba aumentándola».

No obstante, ha manifestado pueden hacer «cosas puntuales», pero no «grandes inversiones», porque el BCE les «crucifica». Arriola ha señalado que las fundaciones bancarias van a liderar en los próximos años el esfuerzo inversor y el banco les puede acompañar «financiando determinadas operaciones» y también se pueden buscar otro tipo de sinergias «más comerciales».

Arriola, que ha destacado la importancia que le dan a la sostenibilidad, se ha referido también al talento y ha señalado que este año tiene previsto incorporar a más de 100 personas.

Según ha afirmado, el tema de las personas es «crítico» porque, dada la evolución demográfica, hay más «dificultades» para encontrar determinados perfiles». «Es más difícil contratar que antes», ha señalado.

Arriola ha asegurado que el banco tiene una «batería» de maneras de afrontar esta falta de profesionales y por ello son «muy activos» en este tema, por ejemplo, con las universidades, o en el ámbito de la conciliación.

Por otra parte, cree que «hay que pagar más el talento». «Hay que pagar más a gente que tiene dos carreras, tres o cuatro idiomas y que les pagamos en términos generales las empresas, los bancos unos sueldos que no les permiten desarrollar un proyecto de vida, comprarse una casa, es que hay que pagarles más».

En este sentido, ha manifestado que darán «pasos en ese sentido claros», partiendo de «un nivel que está muy por encima de la media en cualquier caso».