Los acreedores del operador brasileño Oi aprueban el plan de reorganización judicial

Los acreedores de la brasileña Oi han aprobado en una asamblea el plan de recuperación judicial de la empresa, lo que implicará una reestructuración de los negocios de la operadora, incluido la venta de los activos y su salida del sector de telefonía móvil.

En un comunicado remitido al regulador brasileño, la empresa explica que el plan aprobado implica a todas las partes interesadas de forma «equilibrada» y garantiza la viabilidad operativa, una mayor flexibilidad y la eficiencia financiera, así como el reposicionamiento de la compañía y la creación de valor para todos sus accionistas.

La aprobación del plan de recuperación se produce en el marco de la negociación por los activos móviles de la compañía, donde Telefónica Brasil, TIM y Claro (América Móvil) han sido calificados como primer licitador en la compra, por lo que tendrán derecho de tanteo en la operación.

Con su oferta revisada, Telefónica y sus socios ratifican el valor de la misma en 16.500 millones de reales brasileños (más de 2.600 millones de euros), de los cuales 756 millones de reales (120,6 millones de euros) se refieren a los servicios transitorios que serán prestados por el Grupo Oi a los oferentes por un periodo de hasta 12 meses, y el compromiso de celebrar contratos a largo plazo para la prestación de servicios de capacidad de transmisión.

Oi, la cuarta operadora de telefonía móvil de Brasil, anunció el pasado mes de junio que, en el marco de su proceso de reestructuración, iba a llevar a cabo la segregación de sus activos, pasivos y derechos de recuperación de las entidades asociadas en cuatro Unidades de Producción Aisladas (UPI, por sus siglas en inglés).