Los inversores activistas reducen un 88% el capital desplegado en marzo por el coronavirus, según Lazard

La pandemia frena la racha de enero y febrero, con actuaciones dispares de los grandes fondos

Los inversores activistas recortaron «significativamente» su actividad en marzo por la volatilidad del mercado en la crisis del coronavirus, con el menor número de campañas iniciadas desde 2013 y un despliegue de capital en mínimos de 2016, según un informe de Lazard.

En marzo se llevaron a cabo 16 campañas de fondos activistas en compañías de gran capitalización, la mitad en Estados Unidos y cinco en Europa, por un total de 1.300 millones de dólares (unos 1.200 millones de euros). El recorte fue especialmente llamativo en el volumen de inversión, con un 88% menos en marzo respecto al mes anterior.

Además, supuso una reducción del 38% en la cifra de operaciones iniciadas por estos grandes inversores de febrero a marzo, lo que equivale a un 27% menos de acciones en el tercer mes respecto a marzo de 2019.

«En medio del caos algunos activistas han aumentado su actividad e inversiones incrementando sus posiciones en las campañas ya existentes, mientras otros han tenido que suspender o aplazar las campañas», sostiene el informe trimestral de activismo accionarial de Lazard, que destaca la disparidad en el mercado.

El banco considera que esta crisis mengua las opciones de los fondos activistas, que tendrán complicado presionar hacia fusiones y adquisiciones, y tampoco es probable que centren sus campañas en dividendos o recompras por las medidas implantadas por los reguladores que se oponen al retorno de capital de las empresas.

Para 2020, Lazard ve probable que la extrema volatilidad y la incertidumbre en cuanto a la vuelta un entorno operativo estable mantengan enfocados a la mayoría de los activistas en sus inversiones de cartera existentes; sin embargo, no descarta que se puedan iniciar nuevas campañas de forma selectiva.

SALVAN EL TRIMESTRE

En suma, durante el primer trimestre se iniciaron 58 operaciones de activismo, en línea con el mismo periodo de 2019, por un valor de 14.400 millones de dólares (unos 13.300 millones de euros) a nivel global.

Antes de la crisis de salud pública, el activismo de inversores registró 42 campañas iniciadas con un capital desplegado de unos 13.100 millones de dólares (unos 12.100 millones de euros) durante enero y febrero a nivel global.

CON IMPULSO DE EUROPA

Este aumento en enero y febrero fue especialmente impulsado por las campañas en Europa con inversores de la región. De hecho, 15 activistas locales llevaron a cabo el 71% de la actividad europea en el primer trimestre de 2020.

El activismo accionarial se aceleró en el continente europeo con 21 campañas en el primer trimestre, principalmente por Reino Unido y Alemania, que acapararon el 57% de las campañas. Solo en tres meses el volumen de nuevas campañas alcanzó los 6.500 millones de dólares (unos 6.000 millones de euros), un 70% del capital total del año 2019.

Elliot fue el fondo estadounidense más activo en Europa en el primer trimestre, mientras que BlueBell y Ena fueron los activistas europeos más prolíficos, con dos campañas iniciadas cada uno.