Planas defiende que la autorregulación del mercado oleícola debe tener encaje en los mecanismos comunitarios

JAÉN, 15 (EUROPA PRES)

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha defendido la autorregulación del mercado del aceite de oliva y su “encaje” en los mecanismos comunitarios, algo que ha calificado como uno de los retos de futuro a los que se enfrenta el sector oleícola y por el que ya está en conversaciones el Gobierno de España.

Planas, que ha participado en Jaén en la inauguración de la Feria Internacional del Aceite de Oliva e Industrias Afines, Expoliva 2019, ha indicado a los medios de comunicación que la autorregulación que está impulsando el Gobierno de España “significa posibilidades de intervención en una economía de mercado desde el punto de vista del respeto a las reglas de competencia, pero teniendo en cuenta que los operadores tienen posibilidad de almacenar y de decidir en qué momento se pone en el mercado determinadas cantidades y cómo”.

Ha señalado que “es un mecanismo perfectamente posible” y “perfectamente admisible” en el marco del reglamento de la organización común de mercados europea, ya que se trata de “un mercado maduro, que puede conseguir una retribución de todos los elementos de la cadena que sea suficientes y que nos dé futuro al conjunto del sector”.

Además, ha incidido en que la propuesta de autorregulación no tiene nada que ver con el almacenamiento privado, un mecanismo para el que desde 1996 todos los gobiernos de España, independientemente de su color, han venido pidiendo sin éxito la actualización de los umbrales, ya que está concebido como una medida de emergencia.

“Creo perfectamente que un mecanismo de autorregulación debería tener encaje dentro de los mecanismos comunitarios”, ha indicado el ministro, al tiempo que ha subrayado que se trata de iniciativa que “no le cuesta dinero al presupuesto comunitario”. También, ha insistido en que se trataría de un mecanismo de regulación en manos de operadores económicos, por lo que “no debería ser un elemento incompatible con las normas comunitarias, de modo alguno”

“Yo lo veo de forma positiva y lo vamos a impulsar”, ha dicho Planas en su comparecencia, donde además ha añadido que en los próximos meses el Ministerio va a plantear a través de un decreto una regulación de las organizaciones de productores para “poder estructurar mejor los puntos y las posibilidades de regulación de la oferta, que es un elemento fundamental, una regulación de la oferta que pueda ser planteada por el propio sector”.

Al igual que en el caso del mercado vino, lo que se está planteando también es que “la Interprofesional pueda sugerir en un momento determinado la retirada del mercado de una determinada categoría de cara a beneficiar al conjunto del sector” y así lograr precios que estén en consonancia con los umbrales de rentabilidad para el conjunto del sector.

RETOS DE FUTURO

Además de “unificar y coordinar y de integrar más” el sector cooperativo del aceite de oliva para aumentar en dimensión y competitividad, el ministro ha destacado que “los grandes restos de futuro” del sector pasan también por la mejora de la calidad y la trazabilidad, así como por la comercialización.

En lo que respeta a la calidad y trazabilidad, el ministro ha apuntado que “no nos podemos permitir falsas noticias ni errores”, por lo que hay que asegurar que “aquello que vendemos es lo que ponemos en la etiqueta”. Por eso, ha apuntado que “hay que conseguir que el conjunto del sector y cada una de las categorías del aceite de oliva estén perfectamente definidas y se apliquen por parte de todos”.

En este objetivo ha señalado que el Gobierno de España va a poner el acento para lograr que “todos los elementos vinculados a la trazabillidad y a la calidad sean incontestables”.

El segundo reto al que se ha referido Planas es la comercialización y la apertura de nuevos mercados emergentes en un momento en el que España está próxima a alcanzar los dos millones de toneladas de aceite de oliva en un contexto en el que la producción mundial llegará “muy pronto” los cuatro millones de toneladas.

Esto significa que España tiene que “prepararse” para alcanzar los dos millones de toneladas porque “si queremos hacer de ese crecimiento cuantitativo un futuro desde el punto de vista de renta, de economía para el sector, tenemos que abrir nuevos mercados y estamos en ello”, aludiendo a nuevos mercados asiáticos, entre otros.

“Está bien que seamos lideres mundiales, pero el liderazgo no se proclama, el liderazgo se ejerce y eso se hace con la calidad, la organización y con la comercialización”, ha dicho el ministro.

En relación con Expoliva, el ministro ha apuntado que es “una oportunidad para hacer una radiografía de lo que es hoy sector del aceite de oliva, pero también lo que puede ser dentro de unos años” y ver por dónde hay que seguir trabajando “si queremos obtener mayores niveles de renta y mayores niveles de beneficio para el conjunto de los agricultores”.

Planas se ha referido al aceite de oliva como “la punta de lanza” del sector agroalimentario español y “punto de referencia” de la economía española. Ha recordado que la actual campaña se ha cerrado con una producción de 1.790.000 toneladas, una cifra “récord” que va a llevar a acercarse, e incluso a superar en la exportación el récord de 1.100.000 toneladas.

Estas cifras, entre otras cuestiones, han llevado al ministro a decir que es “optimista” en cuanto al futuro del sector. En este sentido y en lo que respecta a la negociación de la Política Agraria Comunitaria, Planas ha señalado que el objetivo del Gobierno de España es que el olivar mantenga las ayudas que percibe en la actualidad, además de estar trabajando en “buscar la articulación del apoyo al olivar tradicional que constituye un elemento muy importante desde el punto de vista no sólo económico sino también social en el conjunto de España”.