Presidente de comité de Euskaltel cree que el ERE de MasOrange no garantiza salidas «dignas» ni «voluntarias»

No ve «ningún compromiso, ni proyecto relevante que garantice que la plantilla de Euskaltel se va a mantener o incluso vaya a crecer»

BILBAO, 16

El presidente del comité de empresa de Euskaltel (CCOO), Javier del Blanco, ha mostrado su rechazo al acuerdo para el ERE en MasOrange porque el expediente no es «única y exclusivamente voluntario» y teme que finalmente pueda haber «bajas forzosas» si no se acogen las suficientes personas a las prejubilaciones y bajas incentivadas.

A su juicio, la empresa tendría que haber hecho «un esfuerzo» para que «todas» las salidas sean «voluntarias y, además, dignas».

En declaraciones a Europa Press, Javier del Blanco ha mostrado su rechazo a las condiciones establecidas finalmente para el expediente de regulación de empleo, cuyo acuerdo para la salida de 650 personas ha sido apoyado por UGT y Fetico mientras que CCOO lo ha rechazado.

El presidente del comité de Euskaltel y representante de CCOO en la mesa de negociación ha señalado que el sindicato ha seguido «las indicaciones de la plantilla», que rechazó la propuesta de la empresa presentada el pasado lunes y este miércoles solo ha habido modificaciones que no eran «excesivamente relevantes».

«El acuerdo ha salido adelante con los votos de Fetico y de UGT, en contra de lo que es la opinión de la mayoría de la plantilla, pero ellos sabrán», ha criticado.

Javier del Blanco ha manifestado que su rechazo viene motivado porque «no es un ERE única y exclusivamente voluntario». «El primer criterio es voluntariedad, pero, si no, se cubrirá con bajas forzosas», ha añadido.

Según ha indicado, no se puede saber cuántas salidas habrá finalmente en Euskaltel -donde inicialmente se habían cuantificado en 39- porque la empresa «eliminó los porcentajes» de las salidas previstas en cada una de las participadas y de las áreas.

Con esa decisión, en su opinión, «se desmontan las causas organizativas y productivas» que alegaba con el ERE, ya que la empresa hablaba de duplicidades existentes tras la integración de las plantillas de Orange y MásMóvil. A su entender, la empresa «ha roto su informe técnico» y se puede dar un «desequilibrio tremendo en ciertas plantillas».

«Ya veremos a ver qué impacto tiene en Euskaltel, porque hay mayoría de antigüedad y mayoría de edad en los colectivos», ha apuntado. Además, Javier del Blanco ha indicado que «no tienen ningún tipo de compromiso, ni ningún proyecto relevante que vaya a garantizar que la plantilla de Euskaltel se va a mantener o incluso vaya a crecer».

«Ahora mismo no hay encima de la mesa ningún proyecto que lo avale, de las dimensiones suficientes como para avalarlo. Nos preocupa, se lo hemos dicho también a la dirección y esto puede tener unas consecuencias muy negativas a corto y medio plazo», ha criticado.

Tras este acuerdo en torno al ERE, ahora se tendrá que debatir en el comité de Euskaltel el mismo y analizarlo para determinar si dan por finalizado este proceso, que les ha llevado a realizar diversas movilizaciones.

CONDICIONES

La segunda razón para rechazar el expediente es que no comparten las condiciones que se han establecido para las salidas y Javier del Blanco cree que, con «las expectativas previstas y el nivel de inyecciones de dinero que hay» la empresas tendría que haber «hecho un esfuerzo para que todas las salidas fueran voluntarias y, además, dignas».

Según ha señalado, el número final de salidas en Euskaltel dependerá que la gente pueda «estar en situación de acogerse a una de las dos modalidades, tanto prejubilaciones como de bajas incentivadas y le cuadre».

Javier del Blanco cree que no se ofrecen unas condiciones «que permitan que la gente lo tenga fácil apuntarse» y ha reconocido que ya le han llegado algunos mensajes de trabajadores que, en esas condiciones, no se acojen a esas salidas y «se la jugarán a que sea forzosamente».

En su opinión, no se tenía que haber dado esa «baza» a la empresa de que haya «despidos forzosos» y cree que finalmente se van a producir. «Las condiciones no son lo suficientemente buenas como para que no haya dudas. Creemos que se podría haber hecho un esfuerzo, que no se ha hecho y esto puede tener una repercusión muy negativa», ha apuntado.

Asimismo, considera que la empresa «va a presionar a muchas personas» para que se acojan a la voluntariedad», con la «amenaza de que, si no te acoges, en cuatro días te echan». «Dentro de esa voluntariedad, habrá despidos forzosos (…) Nos consta que ya se están dirigiendo a personas concretas para empujarles a esa voluntariedad», ha manifestado.