Reocín se convertirá en el eje comercial del Besaya
Durante más de un siglo la prosperidad de Reocín estuvo ligada a la riqueza mineral de su subsuelo. Pero otro valor, el que le otorga su centralidad en la geografía de Cantabria, estaba aún por descubrir. Clausurada aquella época industrial, con el cierre de la mina de AZSA, este municipio se dispone a sacar partido de la privilegiada situación que supone ser el punto de conexión de los dos grandes ejes de comunicaciones de la comunidad autónoma, las autovías de la Meseta y del Cantábrico.
Esta estratégica ubicación es la que ha animado a una promotora zaragozana a constituir la sociedad Valle de Reocín que proyecta la construcción de un gran centro de tiendas y locales de ocio en Puente San Miguel, con una superficie comercial equiparable a los mayores de la región. 80 millones de euros se invertirán en poner en pie este macrocentro de 130.000 metros cuadrados repartidos en cinco plantas, de los que 50.000 serán destinados a zona comercial. Las dimensiones de este centro, que llevará el nombre de Nueve Valles, superarán las de Valle Real (47.830 m2 de aprovechamiento neto) aunque no las del centro Bahía de Santander, propiedad de El Corte Inglés, cuya superficie comercial es de 57.000 metros cuadrados.
Una pieza clave, aún sin desvelar, es el adjudicatario del hipermercado que actuará como locomotora del futuro centro comercial. Se sabe que se lo disputan tres cadenas y que va a ocupar unos 8.500 metros cuadrados. Además, habrá dos medianas superficies de textil y hogar que, por superar los 2.000 m2, también necesitarán una autorización específica de la Consejería de Economía (la llamada segunda licencia).
Precisamente la moratoria acordada por el Gobierno cántabro para la concesión de este tipo de licencias hasta la aprobación el pasado verano de la Ley de Estructuras Comerciales, ha sido una de las causas que han retrasado proyecto. La previsión de los promotores, que ya cuentan con casi todas las autorizaciones municipales que precisan, es que una vez obtenida esta licencia la construcción del centro esté finalizada en 18 meses.
Además de los tres establecimientos de gran tamaño, Nueve Valles contará con unos 140 locales ocupados por franquicias y comerciantes de la zona. La consultora que se va a encargar de su comercialización, Knight Frank, suele reservar un 30% del espacio alquilable al comercio local por entender que su presencia es clave para favorecer el funcionamiento de este tipo de centros. También a emprendedores de la zona que deseen actuar como franquiciados de alguna marca.
Tan importante como la oferta comercial, será la de ocio, pensada para atender el gran área urbana que forman Torrelavega y los ayuntamientos cercanos como Polanco, Cartes o Santillana. Está prevista la instalación de minicines, una bolera americana de 24 pistas, un centro de fitness, y varios locales de restauración. El hecho de que todo el eje Reinosa-Torrelavega se haya quedado sin cines refuerza las expectativas puestas sobre las salas de proyecciones como factor de atracción de público hacia el futuro centro. Dos cadenas nacionales se han interesado ya por la explotación del local reservado a los cines donde podrían instalarse hasta diez salas.
Adaptado al terreno
El diseño del Nueve Valles, de corte vanguardista, ha sido encargado al estudio de arquitectura madrileño L35, especializado en este tipo de grandes superficies. La primera dificultad que han debido salvar sus autores ha sido el notable desnivel del terreno elegido, una parcela de 200.000 metros cuadrados situada entre la antigua carretera de Helguera y la Autovía del Cantábrico. Para resolver los 20 metros de diferencia de altura entre los extremos de la finca y aminorar el impacto visual que supone el gran volumen del edificio, los arquitectos han optado por encajarlo en el terreno, soterrando cuatro plantas –dos de ellas dedicadas a parking– y crear una amplia estructura acristalada para aprovechar al máximo la luz natural. Una gran plaza ajardinada, completará el entorno del centro comercial, en el que destaca la fachada de acero inoxidable del módulo central, donde se ubicarán los establecimientos de ocio.
El de Reocín será el quinto centro comercial que levante la promotora zaragozana, que ha adquirido los derechos de Actur, la compañía que inició el proyecto. Valle de Reocín SL pertenece a un grupo de empresas que ha levantado el centro comercial Gran Casa, en la capital aragonesa, de 210.000 metros cuadrados y que en 1998 recibió el premio al mejor centro comercial de España. Recientemente ha comenzado la ejecución de otro gran centro en Murcia (El Tiro), de parecido tamaño. En ambos casos, el espacio principal ha sido ocupado por El Corte Inglés e Hipercor. Esta experiencia ha sido esgrimida por los representantes de la promotora, Valeriano y Patricia Mayayo, como garantía de su solvencia y capacidad para llevar a cabo un proyecto de esta magnitud.
665 viviendas
El centro comercial no será la única actividad de estos promotores, que van a construir también 400 de las 600 viviendas libres que se levantarán en las inmediaciones. Las 200 restantes serán construidas por Arrendamientos Bilbao, una firma vasca que fue la primera en valorar las posibilidades que encerraba una zona que desde 1986 estaba reservada para usos comerciales. Su persistencia para ir haciéndose con las innumerables parcelas en que se dividía es lo que ha permitido llevar a cabo el proyecto. En los dos años y medio transcurridos desde que se esbozó, el Ayuntamiento ha completado la compleja tramitación urbanística que permitirá ponerlo en práctica en cuanto el Gobierno regional de luz verde a las licencias comerciales que se precisan. Entre las dotaciones previstas para completar esta nueva área residencial, se contempla la construcción de un nuevo colegio, una guardería, dos parques, una casa de la juventud y varias instalaciones deportivas.
Además de las viviendas libres, el proyecto recoge la construcción de 65 viviendas de protección oficial que se destinarán a alquiler para jóvenes. Reocín es el ayuntamiento que estadísticamente tiene una mayor proporción de jóvenes de toda Cantabria. Ellos serán también los principales destinatarios de los 1.200 empleos directos que podría llegar a generar este gran centro comercial. Una ambiciosa apuesta que no han sabido ver los operadores locales y con la que Reocín quiere reivindicar su condición de encrucijada de caminos, un papel que hasta ahora estaba reservado a Torrelavega, que será la gran perjudicada por este proyecto si tiene éxito, ya que va a disputarle su público natural.