Vox exige al Gobierno eliminar el Impuesto Especial sobre la Electricidad y reducir la fiscalidad energética

Piden reducir la dependencia energética de terceros países y eliminar el mercado de emisiones de CO2

Vox ha registrado una iniciativa en el Congreso con la exige al Gobierno eliminar el Impuesto Especial sobre la Electricidad y reducir en conjunto la fiscalidad energética para rebajar la factura y que las familias y empresas españolas tengan unos precios asequibles.

Se trata de una proposición no de ley que se debatirá en la Comisión Mixta para la Coordinación y Seguimiento de la Estrategia Española para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

La idea principal de la iniciativa es revertir la pobreza energética y promover un Plan Nacional de Soberanía Energética en el país. Para ello, la formación pide en su primer punto promover todas las reformas legislativas oportunas encaminadas a suprimir el Impuesto Especial sobre la Electricidad y reducir la fiscalidad energética de manera permanente, especialmente en materia del IVA.

En lo que respecta al plan de soberanía energética, este consistiría en garantizar que la política energética nacional quede exenta «de toda imposición climática» por parte de organismos suprancionales.

Vox quiere que el plan sea ejecutado con carácter de urgencia por parte de los poderes públicos competentes y tendrá por objeto asegurar la soberanía energética de España con todos los medios al alcance para conseguir una «energía barata, sostenible, eficiente y limpia que garantice unos precios de la luz asequibles para las familias y empresas españolas».

A renglón seguido, la propuesta del grupo parlamentario solicita reducir la dependencia de terceros países y revisar «de forma urgente» el sistema de generación eléctrica en España para la reducción de los costes de este, garantizando la sostenibilidad de los agentes implicados.

QUE SE HAGAN NUEVAS CENTRALES NUCLEARES

Otra de las propuestas que incluye la iniciativa es la de promover la extensión de la vida útil de las centrales nucleares y la creación de nuevas plantas de energía nuclear en cantidad suficiente para garantizar la soberanía energética. También considerar esta fuente de energía como libre de emisiones de dióxido de carbono (CO2).

De su lado, los de Santiago Abascal plantean la supresión del mercado de emisiones y del mecanismo de asignación de los derechos a través de subasta por su carácter «especulativo», ya que consideran que lastra la economía y provoca la pérdida de industria y capacidad productiva esencial de los Estados Miembros.

El último punto de la propuesta dice que hasta que ese mercado de emisiones se elimine se destine el importe íntegro recaudado por los derechos de emisión de CO2 a rebajar la factura eléctrica de los «españoles más necesitados».