LA PÉRDIDA DEL EMPLEO NO VALE LO MISMO EN TODAS PARTES
En España hay mucha diferencia según se trabaje en unas empresas u otras. La fusión de Bankia y Caixabank son un buen ejemplo de cómo el sector financiero sigue estando muy por encima de la media en ventajas. Una de las cuestiones que se discuten es el número de bajas que se producirá como consecuencia de los solapamientos, y lo que le costarán a la entidad resultante. Internamente se maneja un coste de 300.000 euros por empleado, aunque en los últimos despidos realizados por CaixaBank cada salida le ha supuesto una media de casi 400.000 euros. Unas cifras que le parecerán de otro mundo a cualquiera que haya pasado su vida laboral en una pyme familiar.